Especial 2

920 30 3
                                    

-Okey, turno de Rose y Scorpius...- dijo Louis viendo que su hermanita no se separaba de su novio y mirándolos serios. Ellos rieron y se sentaron juntos. Muy juntos.

-Amor... ¿Haces el honor princesa?- preguntó Scorpius sabiendo que esto molestaría a todos los hombres Weasley menores.

-Por supuesto cielo.- le respondió la pelirroja a su ahora esposo siguiéndole el juego. Por último le dió un beso antes de pararse e invocar el recuerdo con su varita para volver a sentarse al lado de Malfoy.

Su plan funcionó a la perfección porque los hombres Weasley desviaron la mirada serios.

Una pelirroja y un rubio de unos dieciocho años acababan de aparecerse y comenzaron a caminar hacia la Madriguera. Había una fina capa de nieve sobre el suelo y las nubes que cubrían la luna prometían una nevada esa noche.

-¿Listo?- Le preguntó la pelirroja. Rose tenía facciones más adultas y la voz un poco más grave pero seguía siendo la misma.

-Ah... eso creo...- le contestó él parandola y haciendo que lo mirara.

-Pero si ya has venido a pasar Navidad, Días Weasley y vacaciones con mi familia.- Rose pasó sus brazos por los hombros de él. Scorpius también había cambiado. Sus rasgos eran más marcados y su voz también se había vuelto más grave. La elegancia de su porte también lo hacía ver más adulto.

-Como amigo, no como novio.- Scorpius la tomó por la cintura y la acercó a él hasta que sus rostros quedaron a pocos centímetros e hizo un adorable puchero.

-Tranquilo... no pasará nada...- el rubio alzó una ceja.- bueno... nada muy grave. Además ya tenemos nuestro hermoso plan B.- la chica se encogió de hombros.

-Huir a Liverpool, lo sé. Es que estoy nervioso Rosie... imaginate que a tu padre y a tus tíos y primos les da un ataque de celos e intentan matarme.

-Tampoco para tanto... Además yo te protegeré mi amada Julieta.- Le contestó ella riendo y acercándose aún más a él para besarlo.

-¿Ahora yo soy Julieta y tu Romeo?- él rió muy cerca de su boca.

Todos los hombres de la sala de la 2G y 3G gruñeron, menos Scorpius y Albus, claro.

-Podrían alejarse un poco.- Le dijo James a nadie en especial mientras los demás asentían y las chicas presentes reían.

Se besaron otra vez. Los presentes volvieron a gruñir.

-¿Interrumpimos algo?- La risueña voz de una chica los hizo separarse.

-Solo estamos atrasando mi muerte.- Le respondió el rubio con algo de sarcasmo.

-No mataran a mi hermano sin que dé pelea.- dijo la chica con tono pirata y mientras entraba en la imagen. Una Sara de cabello lacio y por los hombros se acercó a la pareja que se separó hasta quedar uno al lado del otro. Él aún la tomaba por la cintura.

-Los defenderemos a muerte.- También entró Albus hablando en el mismo tomo pirata y llegando al lado de su novia para pasar uno de sus brazos por sus hombros. Los cuatro rieron y comenzaron a caminar rumbo rumbo a la destartalada casa.

La imagen cambió. Ahora se veía una gran mesa en donde todos los Weasley y casi todas sus parejas futuras estaban sentadas comiendo y riendo entre ellos. La imagen volvió a cambiar; ahora estaban todos sentados en la sala. Albus estaba en un sillón junto a sus tres amigos. Los cuatro hablaban entretenidamente con los merodeadores y sus respectivas parejas. Lily también estaba en el grupo sentada en el regazo de su novio y abrazandolo por los hombros mientras James le mandaba, de vez en cuando, miradas furtivas que eran interrumpidas por Dom. El resto de la familia hablaba en distintos grupos por toda la sala. En ese momento Rose se giró para mirar a Scorpius y le hizo una seña con la cabeza para salir del lugar; el asintió y se levantó seguido se la chica.

En un tiempo antes de mi tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora