Capítulo #28

94 9 0
                                    

Pov, Skye:

Nunca he mi vida había odiado tanto un lunes. Después de un domingo feliz y triste a la vez, mi vida no pudo sonreír un poco más y me dio un lunes. No puedo creer que lo vaya a ver después de dos días de olvidar todo, mi hermana y mi primo se encargaron de que me olvidara de él en todo el fin de semana.

Pero ahora, después de ignorar sus llamadas y mensajes todo el domingo tengo que verle. Veo por la ventana de la camioneta de Conan la entrada del instituto, quiero salir corriendo y regresar a casa, odio con todas mis fuerzas sentirme débil al frente de alguien, pero se que no voy a poder evitar ver su rostro y recordar sus palabras, eso hace que quiera llorar.

Abro la puerta de la camioneta sin pensarlo salgo rápidamente, caminó rápido por los pasillos, hasta llegar a mi casillero. Tomo mis libros y los coloco en mi mochila, cierro el casillero y salgo corriendo hasta el salón de clases, llego y todos están en sus asientos, las chicas están juntas Conan está en otra clase entonces me toca sola, me siento detrás de las chicas, ellas comienzan hablar, pero mi cerebro solo se dedica a pensar como sera cuando lo tenga que ver.

Después de unos minutos llegan todos y se sientan es los asientos que quieren, entonces el universo me da una señal y dirijo mi vista a la puerta, por esta entra Hebron cuando me ve me sonríe, lo que hago es apartar la vista. Entonces veo como detrás de Hebron se encuentra Stephen, este le pasa por un lado a Hebron, ya que Hebron se quedó como estatua en la entrada del salón, veo como Stephen camina y se sienta a mi lado.

-Hola, linda.-Me dice con una sonrisa de oreja a oreja, Stephen acerca su mano a mi rostro y me quita un mechón de cabello que tengo y lo pone detrás de mi oreja. Antes de que pueda contestar su saludo, con más que una sonrisa como lo hice anteriormente, algo, más bien alguien interrumpe mis palabras.

-Ho...- No puedo terminar la hora oración porque una voz me interrumpe.

-Podrías quitarte, ese es mi puesto.- Dice Hebron con una evidente cara de enojo.

-No.-Responde Stephen sin darle importancia a Hebron que se encuentra de pie justo a su lado.

-Ya te lo dije una vez Stephen, no me hagas volver a repetirlo.- Le dice Hebron con una obvia cara de molestia e ira.

-No lo voy hacer, sabes que puedes irte a otro lado, en esta clase no tenemos puestos fijos.- Dice Stephen volteandose para ver su cara de enojo.

-Bro, no hagas que te parta la cara al frente de mi chica y de todo el salón.- Dice Hebron con un tono más alto, varios de la clase nos voltean a ver, después de unos segundos se comienza formar un pequeño círculo alrededor de nosotros. Veo como Stephen se pone de pie, todo se queda en un silencio inmenso, veo como varios chicos y chicas sacan sus celulares para grabar.

-Stephen, quédate en este puesto. Y me voy, por lo que veo van a pelear por un puesto, así que mejor me voy a hacer con Jane que tiene un puesto a su lado.- Les digo, puedo ver la expresión de asombro de Stephen, ya que a Hebron, no le pienso dar el justo de ni siquiera darle una mirada. Tomo mis cosas para ir al puesto al lado de Jane, cuando le paso al lado a Stephen, este susurra "Perdón". Cuando paso al lado de Hebron, esté me toma del brazo, rápidamente me suelto, cuando él está a punto de hablar, la profesora entra y nos ordena sentarnos, todos obedecemos sin objeción alguna.

Jane me sonríe cuando me siento a su lado, ella es una persona bastante tímida y callada, pero por alguna razón conmigo es bastante sonriente y amable, a veces hasta me habla en los pasillos. La clase inicia, durante toda esta no dejo de sentir los ojos en mi espalda, en un momento me armo de valor y volteo a donde siento estas miradas.

La persona que no despega mis ojos es él. El maldito causante de que sienta cosas inexplicables, lo odio por lo que siempre signifique para él, solo me hubiera gustado que todo fuese de alguna manera distinto a lo que pasó. Después de unos minutos la profesora nos entrega los trabajos revisados, el timbre suena, pero antes de que pueda salir, la profesora me llama.

-Skye, señorita Williams tu trabajo estuvo excelente.

-Muchas gracias.

-Señorita Williams, te quería decir que sigas así. Si mantienes este ritmo, cuando acabe el año estarás en la Universidad Harvard, Yale o incluso en Princeton.- Me dice con una sonrisa en los labios, que me hace saber que está más que segura que entraré a una de esas universidades.

-Muchas gracias, profesora. Y claro que mantendrá este ritmo, usted misma sabe que el sueño que siempre he tenido es ir a Harvard.- Le sonrió, ella me señala la puerta para que me retire, camino por los pasillos hasta mi casillero. Llego y saco mis libros rápidamente, la campana suena avisando que es hora de entrar a clases, cuando cierro mi casillero, me encuentro con el rostro de Conan.

-Skye, que no creo que Hebron y Stephen estuvieron a punto de matarse solo por sentarse a tu lado.

-Que rápido corre el chisme.

-No tienes idea de todo lo que dicen, dicen que Hebron te reclamo como si fueras su novia, lo que creo que es correcto, por la manera en la que te ve, además de que hace unos días llegaste con el..

-No soy novia de ese idiota, estúpido, mal humorado y pedazo de mierda, y vamos clases, que vamos a entrar tarde.- La cara de Conan es de sorpresa absoluta, no dice nada más solo camina a mi lado hasta llegar al salón de clases, entramos y nos sentamos en nuestros pues.

Unas Horas después....

Puedo decir que este es uno de los días más cansados que he tenido en el instituto, tanto que lo único que quiero es llegar a casa, tomar un baño y dormir. Por alguna extraña razón los profesores no dejaron nada de tarea ni proyectos de semana, Creo que ya se dieron cuenta de que no tiene caso mandar tanto, de todas maneras todos nos graduamos, algunos con honores, o como en el caso de otros solo siendo reyes y reinas del instituto.

Por mi parte, siento que no quiero irme sin dejar algo de mi aquí. Mientras estoy parada viendo los pasillos del instituto, viendo como todos hablan, otros dejan sus libros, otros hablan por teléfono y otros se besan como si mañana no se van a ver de nuevo, muchos brazos me abrazan desde mi espalda. Rápidamente noto que es Lía, Dayanna y Conan. Ellos me sueltan y caminamos por los pasillos.

Cuando llegamos al estacionamiento Hebron está apoyado en la camioneta de Conan, este se acerca rápidamente, yo no dejo que ni me toque y que mucho menos diga palabra alguna, ya que me monto en la camioneta en el lado del conductor.

-Skye, podemos hablar, por favor.- Me dice al otro lado del vidrio polarizado. -Solo dame la oportunidad de aclarar todo, por favor.

Entonces hago lo impensable...


Nota de la autora:

¡Hola! personitas hermosas.

Solo quería decirles que espero que les este gustado mi historia.

Gracias a las personas que comentan y votan se les quiere demasiado.

Gracias a las personas que comentan y votan se les quiere demasiado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
HEBRONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora