Los exámenes se han acabado y con ello las clases, dando pase a las vacaciones de medio año aunque duren solamente unas tres semanas, es tiempo suficiente para que los estudiantes tengan un poco de diversión y se olviden de sus deberes en la escuela.
Cuando Joel dijo a sus padres que recibió una sanción casi es golpeado por su madre con un sartén, hasta que explicó los motivos y la mujer quedó con ganas de quemar la escuela incluyendo a esas personas asquerosas, como les llamó mentalmente. El castigo básicamente consistió en quedarse dos horas después de clases ayudando a limpiar la cafetería, nada que no pueda hacer. Claro que siendo otro Alfa, hubiese pegado el grito al cielo por hacer una tarea que les compete a los Omegas, pero él es diferente.
Para Joel no existen tareas solo para Omegas, solo para Betas o solo para Alfas. Él cree que todos son capaces de realizar cualquier actividad, tal vez a algunos les cueste un poco más por la jerarquía en que siguen, pero no es nada imposible.
Justo ahora se encuentra en su recámara, hace pocas horas salió de la escuela y decidió ir con Erick a su casa. Su amigo luego de aquello que pasó no volvió a usar su bonita falda, incluso le dijo que la había tirado al bote de basura porque le traía malos recuerdos, alegando que estuvo a nada de prenderle fuego. Él no quería que Erick siga con miedo, porque es un ser maravilloso, algo celoso como siempre, pero tiene el corazón más hermoso y puro que pueda existir en la faz de la Tierra y de todo el Universo.
Joel luego de ver aquella espalda de piel suave, llena de manchas moradas por el golpe, su cintura que tenía una marca roja por el fuerte agarre. Tuvo que sacar fuerzas para no salir corriendo y hacer trizas al idiota ese, su Alfa moría por ir detrás de él, su lobo rascaba con sus uñas su interior. Pero no hizo nada, no cuando Erick comenzó a llorar y tuvo que abrazarlo para protegerlo, susurrando palabras bonitas y acariciando con delicadeza sus cabellos.
—Es mi culpa... todo esto es...
—No vuelvas a decir eso nunca más, Omega —reprende con el ceño fruncido Joel, sujetando su barbilla para mirarlo a los ojos-. Nunca más.
Erick realmente quería olvidarlo, quería huir de todos, pero no podía. Ese sentimiento de pena era más fuere que él, cada noche lloró desconsoladamente hasta quedar dormido, pensando en su Alfa y recordando sus palabras, abrazando a su chaqueta para que el aroma de chocolate puro tranquilice a su Omega y a su lobito.
Erick merece todo lo bueno, es lo que siempre se mentaliza el Alfa. A cada segundo que sus ojos se encuentran y la atmosfera parece cambiar solamente para ellos.
—Alfa, ¿está enojado por lo que hice?
La vocecita de Erick trae su mente al presente. Por un momento había olvidado que su Omega tiró accidentalmente el refresco sobre una Beta que lo estaba viendo, según él, de manera descarada y podía jurar que olía a zorra barata. Claro que después de pedir infinidad de disculpas la chica por el comportamiento del pequeño, la muchacha no le reprochó nada, al contrario que le tiró una cachetada y terminó por irse.
Durante el camino a su hogar no le dirigió la palabra a Erick, apenas y le prestaba atención porque su mejilla sí que dolía. Pero al ver su carita entristecida, su corazón terminó por ablandarse y lo perdonó en ese instante.
—No, Er, ya no estoy molesto —manifiesta, apagando el televisor porque ninguno de los dos está viendo.
—¿Seguro?
—Muy seguro.
Erick sonríe, estirando su mano y tocando con la yema de sus dedos el rostro del más alto, delineando cada una de sus facciones hasta llegar a sus labios que tanto desea probar como la primera vez. Roza por accidente la zona roja, causando una mueca en el Alfa.
Joel lo mira incómodo, no se atreve a dar nuevamente ese paso con él. Sabiendo que tenían un mes conociéndose cuando ocurrió lo otro. Pequeños flashbacks llegan a su mente, recordando cuando el pequeño cuerpo sudoroso y jadeante estaba sobre él, como sus cortas uñas dejaban marcas sobre su pecho y el apretaba sus caderas.
—Por cierto, ¿cómo te fue con tu celo?
Erick queda confundido ante su pregunta.
—¿Mi celo? Todavía no llega.
Ahora Joel es el confundido.
—Pregunté por ti al maestro y dijo que tu mamá había comunicado que estabas en celo y por eso habías faltado.
Erick comienza a reír al recordar esa pequeña mentira que tuvo que decir su progenitora para que pudiera faltar a clases.
—¡Oh, ya! Bueno, en realidad viajé con mis padres porque Christopher nos iba a presentar a su Omega y también iba a anunciar su boda —cuenta, soltando bajas risitas.
Joel no sabe si reír con él o llorar por todo el papeleo que hizo. Hasta se siente avergonzado de sí mismo por lo nervioso que estaba y por lo patético que debió verse.
—Rosita me contó que tiraste la puerta de una patada —dice divertido—. ¿Tanto me extrañabas?
—Estaba preocupado —se defiende—, no me mandaste ningún mensaje, además el día anterior no te dije nada luego de acompañar a Melissa y no recibí algún mensaje tuyo...
—Había dejado el móvil. ¿Quién es Melissa? —cuestiona con enojo.
—La chica con quien choqué y acompañé a la enfermería.
—Con la que estuviste todo el resto de clases, claro, ya recuerdo —musita, poniéndose de pie—. Tengo que irme.
Joel imita su acción, deteniendo sus pasos antes que salga.
—¿Qué sucede? Solamente le ayudé, no es como si nos hubiésemos estado besuqueando o algo así.
—Déjame, no quiero tus explicaciones.
Joel respira hondo, sabiendo que si continúa hablando Erick solamente va a distorsionar la realidad y creerá lo que quiere y parezca conveniente. Suelta su muñeca luego de sentarlo en la cama y ponerse frente a él.
—Solo me ofrecí a ayudarla porque estaba herida, no hice nada más, la enfermera estuvo todo el rato con nosotros. ¿No confías en mí?
—En ti sí, pero no en los ojos ajenos.
—¡Dios, Omega! No cambias más.
***
ME IBA IR A DORMIR, PERO LUEGO DIJE: TENGO QUE ACTUALIZAR SÍ O SÍ.
EN FIN, LOS MUCHACHOS ESTÁN DE VACACIONES Y PUEDEN PASAR MUUUUUUCHAS COSAS :3 ASÍ COMO TAMBIÉN NO PUEDE PASAR NADA :C. PERO COMO YA TENGO ESCRITO LOS OTROS CAPÍTULOS, SOLO FALTA EDITAR Y ESAS VAINAS, LES ASEGURO QUE POR AHORA NO HAY NINGÚN TIPO DE PROBLEMAS.
AH, CIERTO. NO SE PREOCUPEN CON EL FINAL, SERÁ UNO FELIZ PORQUE EN ESTA HISTORIA NO TENGO PENSADO HACERLES SUFRIR, AUNQUE QUIÉN SABE...
TAMBIÉN LES RECUERDO QUE TENGO OTRAS DOS HISTORIAS EN PROCESO: "CELOS" Y "CUIDADOR DE FIN DE SEMANA". DECIDÍ QUITAR LA DE "ALTEZA SIN CORONA" PORQUE LLEVO ALGUNOS PROBLEMAS, PERO LUEGO LO SUBIRÉ NUEVAMENTE.
PREGUNTAAA: ¿YA DIERON SU PRIMER BESO?
DE FORMA RÁPIDA LES CUENTO QUE EL MÍO FUE BOCHORNOSO, SUMANDO A ELLO QUE TENÍA A TODOS LOS DE MI CLASE VIÉNDOLO Y NO, NO. ASÍ QUE PARA MÍ NO CUENTA.
BESITOS CON SABOR A CHOCOLATE Y OLOR A ROSAS ♥
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Omega celoso || Joerick
FanfictionErick es un Omega el cual desde que tuvo su primer celo y fue ayudado por su amigo, quedó tontamente enamorado de él. Joel es un Alfa, uno muy diferente al resto, confundido como cualquier muchacho de su edad al no saber qué hacer frente a sus creci...