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Lunes, ella llegó emocionada al kinder después de casi cuatro días, pudo asistir al jardín de nuevo, a encontrarse con sus amigos, o más bien con sus compañeros, por qué de amigos solamente tenía a Manuelito y Gigi.

—Manuelito.— grito cuando vio a su amigo esperándola en la resbaladilla.

—Sam, regresaste, pense que ya no vendrías.— el niño emocionado la abrazo, y caminaron a su salón de clases.

—Yo pensé que ya te habías ido, Manuelito no deberías de jugar con ella, me han dicho que Samantha esta loca.— una niña de dos coletas, hablo, la niña jamás se había llevado bien con Sam, y siempre buscaba la manera de molestarla.

—Ella no es así, ella es buena, es mi mejor amiga, y si ya no juego con ella, tampoco jugaría contigo Nicol.—

Sam vio hacia sus zapatos, se sentía tímida frente a todas las miradas de todos los niños.

—Piensalo Manuelito por qué después ella puede hacerte llorar, Gigi dijo eso, que ella siempre hace llorar a su papá.—

—Yo jamás hago eso, yo quiero mucho a mi papito, jamás lo hago llorar.— hablo por fin encarandola.

—Pues Gigi nos contó otra cosa, que tú estás loca y que prefieres más a tu papá Emilio que le pegaba a tu papá, eres tonta.—

"Sam es tonta, Sam es tonta, Sam es tonta". Todo el salón de clases comenzó hacer bulla gritándole cosas a Samantha. Salió corriendo de ahí, llorando, Gigi su mejor amiga la había traicionado.

—no les hagas caso Sam, Nicol es tonta tú no, tu eres inteligente y bonita.— Manuelito de su mochila sacaba un frasco con besos de nuez. —Mira le e pedido a mi mamá que me compré esto para ti, quería dártelo en una ocasión especial, y creo que es buen momento.—

Siempre analizaba su situación con Emilio, de principio a fin, preguntándose un millón de cosas, analizaba detalle por detalle, por qué imaginaba que se le pasaba algún dato importante que decirle a sus abogados.

—Tenemos que tener otra estrategia, otra donde nosotros nos beneficiemos de ello, Emilio dijo que tú no estabas interesado en la empresa, pero de todas maneras sigues teniendo tus acciones no es así?— pregunto Nikolas cuando leía los documentos de las demandas.

—Si, por qué el las manejaba y deben de estar intactas.—

Joaquín fumaba de su cigarrillo, leía una y otra vez los papeles que tenía en mano, era hora de tomar posesión de su empresa, de sus terrenos y su casa.

—Solicitare copias de tu carta poder dentro de la empresa.—

Diego movía más el cielo que el mar por qué Joaquín obtuviera todo lo que le pertenecía desde hace siete años, por qué cuando se casaron el matrimonio fue por vienes malcomunados, Emilio fallo y ahora tenía que recompensarlo.

—Quiero que cambies esto.— señaló Joaquín el papel que contenía las condiciones para que Emilio viera a su hija. —La pensión me la debe depositar los sábados, antes de que vea a Samantha, Samantha come, Samantha pide, Samantha viste, es responsabilidad de el también, y cambia la cantidad, por qué las cosas de Samantha son caras, yo a mi hija no la baño con cualquier jabón, tampoco va con cualquier pediatra, y Azul no regala sus consultas.—

Un Ángel Llora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora