Capítulo 30

39 1 0
                                    


CAPITULO # 30

Un Secreto a Voces –Planes y Enfrentamientos.

Hisana tomo asiento en el despacho de Ginrei, Rukia llevo té para todos y con una media sonrisa agradeció el gesto, aun así tuvo un momento de duda al ver que su hermana tomaba asiento junto a ella. Al ver Ginrei que la prudencia era un rasgo evidente en Hisana podría esperar que Rukia también lo fuera.

— Está bien Hisana — señalo Ginrei — creo que Rukia sabrá guardar la confidencialidad dadas las circunstancias.

Rukia les miro un poco desconcertada pero asintió ante la vista de los dos mayores, Hisana bebió un poco de té y luego dejo escapar un largo suspiro — creo que fue algo muy acertado el enviar el mensajero Ginrei-san —– indico la pelinegra con una sonrisa y el mayor de los Kuchiki dejo entrever una media sonrisa — el mensajero llego a las 10:45 de la noche al lugar donde nos hospedábamos.

----------------------- Flash back ------------------------

Hisana y Byakuya estaban por descansar, desde el domingo que correspondería al primer día en un lugar paradisiaco que era un pequeño hotel donde muchos chinos y otras llegaban nacionalidades llegaban a tener vacaciones era todo un lugar hermoso ya que estaba cerca del puerto. El primer día fueron recibidos como reyes con una cena hermosa en la playa y luego ellos pudieron tener una verdadera luna de miel y no es que el día de su boda no hubiesen probado las mieles del matrimonio al contrario porque según los dos la experiencia de la entrega conyugal había sido la mejor experiencia de sus vidas como pareja. Pero al estar frente a una hermosa playa, comida exquisita y el ambiente romántico que el hotel les había preparado fue un poco más excitante pues supieron dar rienda suelta a su amor de una forma más pasional, los otros días los habían pasado de paseo en la playa, visitando las pequeñas islas alrededor y nadando en el mar.

He pensado que mañana deberíamos ir a la ciudad más cercana de compras —  sugirió el pelinegro con una sonrisa a su esposa que venía saliendo del cuarto de baño con un camisón un poco traslucido y provocativo.

Es buena idea secundo Hisana  si seguimos en la playa terminaremos como unos camarones señalo con una sonrisa al llegar junto al pelinegro que le tomo para atraerle en un beso que empezaba a calentar el ambiente pero que fue interrumpido por unos toques a la puerta de su habitación ¿has pedido algo? Pregunto la pelinegra.

No respondió serio y se puso de pie camino a la puerta ¿sí? cuestiono al abrir la puerta con un tono levemente molesto, al instante pudo ver un joven un poco temeroso con su cabeza inclinada.

Lamento interrumpir señor Kuchiki se disculpó con cierto pesar ha llegado un mensajero que dice traer un mensaje urgente para usted de su abuelo.

Byakuya miro hacia donde estaba Hisana que ya venía junto a él y daba su asentimiento que cualquiera que fuera su decisión estaba bien  que nos espere en el restaurante, podría servirle algo de comer, por favor pidió.

Por supuesto señor Kuchiki dijo el joven y así mismo como llego partió.

Los dos cerraron la puerta y como locos empezaron a buscar ropas decentes para bajar al restaurante y ver qué es lo que pasaba, por su parte Byakuya tenía ese rostro impasible que solo los que le conocían bien sabían que era preocupación —  esperemos que no sea algo grave soltó Hisana para calmar un poco la ansiedad.

Historia de Una GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora