Accidentally In Love // Sterek - Omegaverse //

Epílogo

Soltó un suspiro esperanzado cuando escucho el anuncio de que estaban por llegar del piloto, ya solo faltaban minutos para aterrizar, luego de casi dos semanas lejos de sus hijos y su Omega, era un sueño estar a punto de verlos.

En algunos momentos pensaba dejar todo el trabajo de lado y poder estar con su esposo y sus hijos, era lo que más deseaba, más no podía hacer eso, no aún.

Miro por la ventanilla del avión, tratando de ignorar los ronquidos de Peter, si estaba en lo correcto sus hijos debían estar dormidos al igual que Stiles, aunque conociendo a Tyler, su cachorro debe estar internado saquear la nevera, hoy era viernes así que Stiles de seguro hizo algún postre, por ende Tyler intentaba devorar todo, por eso solía colarse a la cocina de madrugada.

Conocía a su familia tan bien y extrañaba cada segundo lejos de ellos, tal vez era un poco ridículo después de haber pasado tanto tiempo solo antes de conocer a su Omega, pero ahora no se imaginaba una vida sin ellos. Le parecía muy lejana esa época de soledad, ahora parecía como si Stiles hubiera estado con él desde el inicio.

Cuando anunciaron el aterrizaje del vuelo, se permitió darle un ligero golpe en la mejilla a Peter, quien despertó asustado mirando a su alrededor.

—¿Que paso?

—Ah... Nada, un mosquito—intento lucir aburrido—ya estamos por aterrizar.

—Tengo ganas de ver a Chris y Newt.—comento sonriente, mientras se sobaba el cuello, dormir sentado no era cómodo.

Peter recordó a su pequeña familia, Chris había tratado de dejar atrás todo lo referente a su padre y el estaba de acuerdo con eso, Newt por otro lado, cada día empezó a volverse más abierto(su embarazo estaba por culminar también) y que ahora no estaba solo, era una familia un poco rara y pequeñita, pero era su familia.

Ambos bajaron del avión y se despedieron, cada uno tenía un lugar al que llegar ahora, un lugar al que orgullosamente llamaban hogar.

Cuando el moreno llegó a su casa, sonrió de alegría y aun sonriendo ingreso la llave en la cerradura, dejo sus cosas en el mueble más cercano, quitándose el saco y dejándolo en el mismo lugar, en estas últimas dos semanas odio los trajes, las constantes reuniones no le dejaban usar ropa cómoda, fue a la cocina por algo de comer, quería probar algo de la deliciosa comida de su marido, ya había comido, pero la del avión ni siquiera se acercaba a la camisa hecha en casa.

—Pa dejo comida para ti en el microondas—la voz de Tyler en la oscuridad lo sorprendió.—dijo que de seguro llegarías con hambre, que no te gustaba la comida que daban en el avión.

Derek busco a su hijo por la estancia, antes de que las luces se encendieran, sonrió cuando vio a su hijo mayor, el pequeño Alfa estaba sentado en uno de los bancos de la isla, con un vaso lleno de lo que parecía leche chocolatada.

—Hola papá—saludo, bajando del banco y yendo a dejar su vaso en el fregadero—tambien te dejo postre... Yo le dije que la azúcar era mala para ti y que mejor me la de a mi, pero no quiso—lo miro a los ojos—¿tu me darás tu parte papá?—pregunto.

—¿Que haces despierto tan tarde?

—No tenía sueño... Además quería verte.

Dejando lo que estaba haciendo, Derek sonrió alegre, se agachó hasta quedar a su altura y lo abrazó, lo había extrañado, todas las noche llamaba para dar las buenas noches a sus cachorros, también hacían videollamadas, pero esa no era suficiente.

—Te extrañe papá

—Yo también lo hize, los extrañe mucho.

Cargandolo procedió a subir las escaleras hasta el cuarto del niño, dónde lo arropó y dejo un beso en su frente después de que cerrará los ojitos.

Cerró la puerta y fue a la habitación de sus gemelos, los niños estaban profundamente dormidos, dejo un beso en cada una de sus cabecitas y acomodo el edredón que los cobijaba.

Nada era como estar en su casa, con su familia.

—Te extrañaron—la voz de su Omega hizo que su piel se erizará, giro su rostro para verlo, ahí, de pie en la puerta de la habitación.

Trago duro cuando vio la liguera curva en su vientre que sobresalía de su ropa de dormir. Prácticamente corrió hasta los brazos de esposo, besándolo una vez lo tubo a su alcance, Stiles lo recibió contentó.

—Te extrañe, amor.—acaricio su rostro, acunandolo con su manos

—Yo también te extrañe, Derek

Se volvieron a besar, intentando mitigar el amargo sentimiento de haberse tenido lejos.

Ambos estaban felices de la familia que tenían, sus hijos crecían sanos, ellos se amaban y a pesar de los problemas y discusiones que se presentaban, ellos seguían y seguirán juntos, dicen que los felices por siempre no existen, pero no por eso se debe dejar de intentarlo, ¿Verdad?

Nota:

Nos leemos en unos días 😉