Mi complemento [Saeyoung]

Nocturnos

Pasaron dos o tres horas, seguíamos hablando. En algún momento de la conversación Yoosung se había quedado dormido abrazado a mí.

-Esto es oro.

Seven seguía tomando fotos a Yoosung.

-Jumin, dile algo.

-Aunque lo haga, no dejará de hacerlo.

Tenía razón.

-Pero, ¿qué haremos con Yoosung? Se está haciendo tarde.

Seguía acariciando el cabello de Yoosung.

-Puede quedarse a dormir aquí, no creo que sea seguro regresarlo a casa.

-No creo siquiera que podamos despertarlo jajaja.

Seven seguía burlándose.

- ¿Cómo te iras a casa, Kyung? Debería enviarte con algún chofer...

-Nah, yo la llevo. Traje a uno de mis bebés~

-No quiero ser una molestia, puedo regresar sola.

-No.

Ambos respondieron. Reí.

-Meow~

Elizabeth III bostezo, contagiandonos el bostezo a Seven y a mí.

-Creo que deberíamos irnos, el Dios Seven debe descansar para seguir luchando contra el mal~

Seven hizo una pose heroica.

- ¿Cómo me levanto?

Yoosung estaba literalmente encima de mí, estaba recostado en mis piernas.

Jumin me ofreció una almohada.

-Hazlo lentamente.

Levanté la cabeza de Yoosung y me levanté con suavidad. Coloqué la almohada como sustituto de mis piernas. Sentí las piernas débiles, de estar sosteniendo el peso de Yoosung.

-Esconderé el vino, no vaya ser que Yoosung se emborrache más.

Jumin tomó entre sus brazos a Elizabeth III. Me acerqué a él.

-Nos vemos Elizabeth, fue un gusto conocerte~

Acaricie la cabeza de Elly y le dí un ligero beso.

Jumin me miró y desvió la mirada.

-Me alegro que le cayeras bien.

-Sigo yo, sigo yo~

Seven se acercó a Elizabeth para darle un beso, Jumin puso su mano, haciendo que Seven le besara la mano.

- ¡Eso es injusto!

Seven hizo pucheros.

-A-bu-sa-dor

- ¡Jo!

-Hora de irnos, Seven~

Lo tomé del brazo, acercándonos a la salida. Seven se ruborizó.

-B-Bien...

-Nos vemos, Jumin. Cuida de Yoosung.

-Tengan cuidado de regreso, descansen.

Jumin cerró la puerta.

-Muchas gracias por ofrecerte a llevarme a casa.

Miré a Seven y le sonreí.

-No hay de que, ahora eres parte de la RFA, eres parte de nuestra pequeña familia.

Me hizo muy feliz lo que dijo.

Nos montamos en el elevador y bajamos al primer piso. Uno de los choferes estaba fuera del edificio con la llave del auto de Seven.

-Que buen servicio~

Reí.

-Que tengan buena noche, Sr. Luciel, Sra. Kyung.

-Igualmente, caballero.

Seven camino hacía su auto orgulloso.

-Bueno, Sr. Luciel, hora de ir a casa.

Seguí el juego.

-Exacto, Sra. Kyung. Espero que tenga un viaje espectacular.

Seven abrió la puerta para que entrará, me subí al auto y espere que hiciese lo mismo.

-Por cierto, ¿sabes dónde vivo?

- ¡Que insulto! Sé prácticamente TODO de los miembros de la RFA~

Dijo orgulloso.

-Entonces estamos en desventaja, ya que eres muy misterioso y tienes muchos secretos.

-Soy el que se hace cargo de eso, así que tiene sentido.

Me sacó la lengua. Comenzó a conducir.

Nos quedamos en silencio, no en uno incómodo. Me sentía a gusto junto a él, era muy tranquilizador sentir la brisa nocturna en mi rostro.

- ¿Tendré que cargarte dormida hacía tu cama?

- ¡Por supuesto que no! Sigo despierta~

-Sí, claro. Estas dormitando.

-Suelo dormirme tarde, así que tengo aguante.

-Entonces eres como yo, suelo quedarme despierto hasta tarde.

-Somos nocturnos~

-Muchos dirían que somos vampiros~

Seven simuló un ruido de vampiro, lo típico de las películas.

-Entonces, el Dios Seven es inmortal~ ¿Cuántos secretos más tendrá Seven Zero Seven?

-Más de los que me gustaría tener, ja...ja

Su risa sonaba algo fingida, lo miré.

-No sé qué secretos tengas, ni lo peligrosos que sean, pero nos tienes a la RFA.

Le sonreí. Me miró de reojo y sonrió.

-Igual tú, eres igual de misteriosa que yo, así que si pasa algo confía en nosotros.

Le sonreí y seguí mirando por la ventana, cada segundo me relajaba más.

¡Nuevo capítulo!

La historia de momento va lenta y aviso que es larga, jajaja.

Avísenme si ven algún error de ortografía c:

647 palabras.