Mi complemento [Saeyoung]

No lo digas

Me odiaba. Lo último que quería era verla llorar, pero era necesario.

Después de nuestra última conversación, se había encerrado en su habitación. Ya habían pasado unas horas, había anochecido.

Estaba preocupado, pero no debía mostrar mi preocupación, le daría falsas esperanzas.

Seguí con lo mío, no lograba encontrar la localización del hacker, era muy bueno, estoy seguro de que es mejor que yo...

- "Mierda..."

Clic

El sonido de una puerta llamó mi atención, Kyung había abierto la puerta de la habitación. Se había cambiado de ropa, se había rendido de ir al trabajo. Sus ojos estaban rojos, sentí una punzada de culpa.

Seguí sus movimientos con cautela, ví como se había agachado, donde había tirado el plato y lo recogió con sumo cuidado.

Rezaba que no se hiciese daño con el plato.

Puse de nuevo atención a la laptop, el hacker había estado inactivo las últimas dos horas, debía estar planeando algo.

Suspiré, al parecer llamó la atención de Kyung.

- ¿Cómo vas?

Su voz estaba rota, resultado del llanto. Decidí no responder, no deseaba seguir escuchando su voz así, no podría contenerme e iría a estrecharla entre mis brazos para consolarla.

Derrotada, se levantó del suelo y fue a la cocina.

Mi estómago comenzó a gruñir, comenzaba a tener hambre. Tomé la última bolsa de HBC que estaba cerca y la abrí, tomé un puñado y la llevé a mi boca.

Media hora después, Kyung salió de la cocina con un plato de fideos y lo puso en la mesa pequeña frente a mí, sin decir una palabra. Casi reí de la ternura que me causó.

La miré, también tenía un plato de fideos, estaba sentada en la mesa del comedor y había comenzado a comer, estaba en su teléfono mientras comía.

Me mataba el silencio, quería ir con ella y sacarle una sonrisa, pero no me lo podía permitir.

Kyung miró hacia mí, enseguida volví a centrarme en lo mío.

Dejé de lado lo del hacker y fui a la carpeta que había sacado de la USB, era impactante todo lo que había encontrado V. Había archivos de hace años, en donde dejaban mal a mi padre, el primer ministro de Corea del Sur.

Todos sus crímenes estaban es esos archivos, si planeaba algo contra nosotros, en cualquier momento podríamos sacarlo a la luz y amenazarlo. Teníamos un problema casi resuelto, solo quedaba el asunto del hacker, que no era poco.

Miré de nuevo hacía Kyung, se sentado en el sofá junto a mí y estaba haciendo los deberes de la universidad.

- Mmh...

Un pequeño gruñido me sacó de los números binarios, me había centrado en encontrar al hacker, miré la hora... eran las 2:45 de la mañana.

Kyung se había quedado dormida en el sofá, reí enternecido.

La miré mientras dormía, era hermosa... era como un fruto prohibido para mí, no debía acercarme a ella.

- No...

Parecía estar teniendo una pesadilla. Se abrazaba a sí misma en sueños, notaba que comenzaba a sudar y temblar.

Preocupado me acerqué a ella.

- Kyung, despierta.

La agité un poco, me preocupa que tuviese pesadillas.

- Ale...jate

No tenía ni idea de que podría estar soñando, pero debía ser aterrador, tenía una expresión de terror en su rostro dormido.

La agite más fuerte, abrió sus ojos con sorpresa.

- Soy yo, Seven. Fue sólo un su---

Antes de terminar mi frase, se había refugiado en mis brazos. Le correspondí a los segundos. Su cuerpo estaba temblando.

Me acomodé mejor sobre el sofá y la acerqué más a mi cuerpo, quería darle la misma calidez y seguridad que me había dado antes.

Nos quedamos en silencio, hasta que escuché sus sollozos.

- No es justo...

- ¿El qué no es justo?

Sollozó más fuerte, me partía el corazón.

- Antes fuiste muy brusco, pero ahora eres muy cálido...

- Lo siento...

- ¿Por qué?

- Ya lo he dicho, es peligroso que estés junto a mí, soy alguien peligroso.

- Esa decisión es tan... unilateral.

- Es lo mejor para todos...

Me abrazó más fuerte, correspondí de la misma manera.

- Seven...

Kyung se separó de mis brazos y me miró a los ojos... tenía un ligero sonrojo en su rostro, tenía tantas ganas de besarla.

La miré, embelesado.

- Tú me---

Cubrí sus labios con mi mano.

- No lo digas.

Me miró, confusa.

- No puedo corresponder a tus sentimientos... no sería justo para ninguno de los dos.

Sus ojos se llenaron de lágrimas. Quité mi mano de sus labios.

- Seven... no me importa el peligro en el que me pueda meter, quiero estar contigo...

Sentí mi corazón estrujarse.

- No sabes lo que estás diciendo, deberías guardar esos sentimientos para alguien más.

- Pero solamente... te quiero a tí.

Me volvió a abrazar, tuve que resistir a mis sentimientos.

- Será mejor que vayas a dormir y olvidemos todo esto.

- Seven...

- No me importan tus sentimientos, olvidaré todo lo que me has dicho. Ve a dormir.

Sé que sigo diciendo que el arco está cerca, pero sí, el arco está en unos 2 o 3 caps, ya tengo casi terminadas unas imágenes que pondré para ese arco~

Espero que les esté gustando la historia, muchas gracias por el apoyo >w<

837 palabras.