Mi complemento [Saeyoung]

Epílogo

-Mh...

Lucía incómodo. Sus mejillas estaban rojas y su mirada no se despegaba el suelo del búnker. Estaba sentado en el sofá rojo de Sev-- Saeyoung.

Todos los miembros de la RFA estábamos allí, algunos lo observaron con curiosidad y otros con lástima. Yo... lo miraba sorprendido. Seguía sin creer que Saeyoung, 707, Seven o como sea, tenga un hermano gemelo y haya estado en manos de Mint Eye durante tantos años.

No me atrevía a verlo con lástima, era capaz de simpatizar con él y si fuera mi situación... me molestaría que la gente sintiera lástima por mí.

Saeran, el hermano gemelo de Saeyoung. Nos había contado a detalle, todo lo que había tenido que pasar en Mint Eye, el culto religioso. También nos contaron la historia de su familia. Saejoong Choi, el primer ministro de Corea, no era quien decía ser. Era un mujeriego que había tenido una aventura con la madre de los gemelos. Nos contaron los múltiples maltratos que habían pasado, en especial lo cegada que estaba su madre con Saeran. Saeyoung nos contó las razones del por qué se fue del lado de Saeran y el plan que había tenido con V. Saeran nos contó lo que sufrió después de que Saeyoung se fuera, nos contó el cambio que había sufrido Rika y nos contó las mentiras que Rika le había dicho, el lavado de cerebro constante que había sufrido durante tantos años.

Saeyoung explicó a Saeran su versión de las cosas, al final, su hermano le creyó. Tenía sentido todo lo que decía y, a decir verdad, era difícil creer lo contrario. Ahora que tenía la mente despejada y libre de las drogas, podía pensar con claridad y ver la verdad, ver y diferenciar entre lo verdadero y lo falso. Veíamos el arrepentimiento en su rostro, había vivido odiando a su hermano. Su única fortaleza había sido destruir a su gemelo.

Y yo... estaba sorprendido de todo lo que decían. No quería creer en lo que había hecho mi prima, pero no creerlo era sinónimo de no creer a Saeran, y eso no era posible. Era un chico tan... sincero y puro, no cabía en mi cabeza pensar que estaba mintiendo. Desearía poder ver a Rika y preguntarle todo esto, quería escucharlo de su propia boca.

-Desearía hablar con Rika...

Dije en voz alta, Zen me miró con pena.

-También yo, pero es imposible. Han pasado cinco días desde Mint Eye y no sabemos dónde están V ni Rika. Desaparecieron.

Era la verdad, no podíamos encontrar rastro de ninguno de los dos. Jumin había contratado un investigador privado para buscarlos, pero nada.

-Cuando nos separamos, V dijo que iría a buscarla.

Suspiré. Suena como algo que diría V. V... no sabía qué pensar acerca de él. Estuve tanto tiempo culpándolo, por todo lo que había pasado, pero ahora, no es más que una víctima más de las circunstancias.

-No encontramos nada en los escombros, así que deben estar bien.

Jumin, el mejor amigo de V. Tenía unas ojeras visibles en su rostro, nunca lo habíamos visto así.

-Después de interrogar a los seguidores de Rika, no encontramos respuestas. No saben nada de dónde están.

-¿Qué les hicieron?

Pregunté.

-Algunos fueron devueltos a casa y otros serán condenados prisión.

Saeran suspiró.

-Todo quedará en manos del estado, nosotros nos centraremos en escondernos de nuestro padre. Tal vez lo denunciemos públicamente.

Saeyoung tomó la mano de Kyung, era enternecedor verlos juntos.