La venganza del pasado

Nuevos sentimientos

Los ojos llenos de sinceridad, un corazón puro y la necesidad de amor, distinguían a Sofía, como un ser excepcional.

La princesa regresó a su castillo y se encerró a llorar en su habitación.

~¡La sequía ha comenzado! Gritó Roland, mientras daba indicaciones a sus guardias para hacer brigadas de protección a la población.

~¿Tan pronto? Preguntó Miranda.

~Asi es, al parecer el desabasto de agua, provocó que la cosecha se secara antes de tiempo.

~¿Por que está pasando esto? Justo cuando Encantia iba a coronarse como el país más poderoso del eterny reino. Se quejó Amber, mientras observaba los informes.

Roland cerró los ojos por un segundo y recordó al padre de Beatriz y aquella mirada llena de furia. "Hare que pagues por todo lo que hiciste, jamás olvidaré que fuiste el causante de la muerte de mi hija".

~Tal vez esté pagando un viejo pecado. Titubeó para si mismo.

~¡Todo estará bien! Sonrió Sofía tomando su hombro.

Al notar la mirada de apoyo en el rostro de su hija menor, recordó a su preciada Beatriz y una pequeña lágrima recorrió su mejilla.

~Sofia, no te preocupes por mi, ¡disfruta tu vida! tú debes ser feliz.

~Pero quiero ayudar, amo a Encantia tanto como tú... Aunque no sea una princesa de nacimiento.

El rey Roland acarició las mejillas de la joven y depósito un beso en su frente.

~Tú eres la mejor princesa que he conocido.

Mientras tanto, Hugo se encontraba dando vueltas alrededor del comedor.

~¿Por qué lastimaste a Sofía? Grito mientras observaba a Isabella.

~Me di cuenta que tú realmente la amas, la pones incluso por encima de mi. Gritó mientras se levantaba de su asiento y caminaba hacia él.

~Yo solo cumplo las órdenes de mi padre, al igual que Axel.

~Esta estúpida venganza ya llegó muy lejos ¿Cuánto más te condenaras por esto? Recuerda que ya no seguiré colaborando con ustedes.

~No me interesa si estás de acuerdo o no, ya sabes, puedes irte cuando quieras, pero apenas lo hagas, enviaré una órden para que tu padre "el duque", entre a prisión por atentar contra el rey de Kiev. Soy el único que puede salvarlo.

Isabella apretó los puños y le dió una cachetada.

~¡Eres igual a tu padre! Él realmente atrofió tu corazón, en tu mente no hay más que sed de venganza, por algo que no te consta que haya ocurrido.

~El rey Roland deshonro a mi madre y por su culpa, ella murió ¡ahora haré lo mismo con su hija!

~¿Por qué no elegiste a Amber?

~Mi padre dijo que debía obtener a Sofía, aunque no es hija legítima del rey Roland. Desde niño me he preparado para esto ¿Realmente crees que disfruté practicar o bailar con ella? Solo fingí interés y amistad, tal como lo hago ahora.

~¡Odio este plan! Mi vida se arruinó por él.

Hugo la tomó entre sus brazos y la acercó hasta su corazón.

~¿Escuchas esto? Mi corazón realmente late por ti y por nadie más.

Isabella cerró sus ojos y se dejó llevar por el ritmo de su corazón, sin saber que Hugo la observaba con una expresión de burla.

La noche pasó con rapidez y los sentimientos de satisfacción salían a relucir con cada palabra y acción.

Cuando el día se hizo presente, Dereck llegó a Encantia.

Sofia se encontraba practicando con James, cómo cada mañana.

~¡Dereck! No esperaba verte. Gritó James aproximándose a él.

~Después del problema en el que me metió Hugo, mi padre me prohibió salir por unos días, pero ya todo se aclaró y vine a pedirles disculpas, realmente lo siento, me comporte como un niño inmaduro.

Sofía lo observó con interés y notó que por primera vez, era sincero.

~Te disculpo, pero no quiero que vuelvas a difamar a nadie. Alzó la voz Sofía provocando que James se riera.

~Creo que entendió la lección, su padre es muy severo.

~Quiero compensarlos, a ustedes y al señor Cedric, vengan está noche a cenar al castillo, daré una fiesta en su honor.

~¿Una fiesta? Gritó Amber emocionada.

Los tres chicos la observaron, sin saber que ella llevaba mucho tiempo espiandolos.

~Claro Amber, todos están invitados.

~¿Puede ir Hugo también? Preguntó la rubia.

~Preferiría que fuera algo íntimo, mi padre está un poco molesto con él.

~Lo entiendo Dereck, allí estaremos. Sonrío Sofía, mientras dirigía a Amber a su habitación.

Una vez se encontraron solas, la rubia comenzó a reírse.

~¿Viste su cara cuando mencioné a Hugo?

~No debiste hacerlo, Amber, ellos nunca se han llevado bien.

~¿Por qué será? Volvió a reír.

~Siempre me he hecho esa pregunta y no encuentro una respuesta.

~¡Es por ti! Dereck te ama y es un gran partido, un futuro rey no se puede dejar pasar.

~Él no me ama, titubeó con pena.

~Esta noche lo demostrará.

En un abrir y cerrar de ojos toda la familia se encontraba en el castillo del príncipe Dereck.
Aunque el señor Cedric se había negado inicialmente, Sofía lo persuadió para que aceptara la invitación.

~Bienvenidos. Sonrío besando la mano de la princesa castaña.

Sofía notó que en la fiesta se encontraban algunos antiguos compañeros de la escuela real, como Desmond, Vivían, Hildegard y Clio.

La musica comenzó a tocar y Dereck llevó a Sofía hasta el centro del salón para que juntos abrieran el baile.

Uno de los guardias observó con especial atención e inmediatamente se dirigió a enviar un telegrama.

La princesa Sofía de Encantia se encuentra en brazos del príncipe Dereck; la fiesta se lleva a cabo con total discreción y tranquilidad.

El telegrama no tardó en llegar y Axel inmediatamente lo recibió.

~¡Hugo! Tengo noticias sobre tu prometida. Se rió mientras extendía el papel.

~¡No puede ser! Gritó apretando los puños.

~¿Celoso?

~Nada de eso, ¿no te preocupa que la enamore? Que nuestra venganza pueda destruirse por culpa de Dereck. ¿Acaso no te preocupa eso, Axel?

~Me preocupa, pero no tanto como a ti. Sonrío descaradamente.

~¡Debo ir a la fiesta!

~Hermanito, lamento arruinar tus planes, pero tú no fuiste invitado.

~¡Entonces haz que saquen a Sofía de ahí! No puedo permitir que me roben su cariño.

~Lo siento hermanito, no lo haré, nuestra venganza merece un poco de emoción.

Hugo estrelló su puño contra una de las paredes, para posteriormente tomar su saco y salir de la habitación.