47.

344 21 12
                                    

47. 💌

Javier Bonet aka ; bnet.❄️

hace cuatro días que Alina salió del hospital, yo estaba más que contento que ya se encuentre bien, se está quedando en el departamento de lobo, le cedí mi lugar, ahora duermo en el sofá. Su familia tuvo que volver a Costa Rica, y dentro de unos días ella volverá.

— hey, bnet —me llama el mexicano, muevo mi vista del móvil para verlo— te llaman allá adentro. —dice mientras cierra la puerta de la habitación en la que está durmiendo Ali. Me levanto rápido del sofá y entro a la habitación.

—primero que nada, buenas tardes. —dice y yo sonrío.

—buenas tardes —respondo— ¿cómo te has sentido hoy?

—bien, mejor que antes —contesta— ¿puede sentarse aquí por favor? —dice mientras hace un campo en la cama donde está acostada. Aún debe reposar su golpe de la espalda.

—ya está —digo mientras me siento.

—tenemos muchísimo de qué hablar —dice mientras juega con el borde de la sábana que tiene encima— pero realmente voy a ir al grano ¿por qué le contó a skone? Quiero saber qué pasó.

—yo estaba mal, debes entenderme un poco, yo sí te recordaba, y me vi obligado a alejarme de ti. Cuando te vi otra vez, fue realmente notorio que me afectó, Chemi es mi amigo, notó que estaba mal, y me preguntó qué pasaba, yo necesitaba hablar del tema y le conté. —contesto.

—entiendo. Me disculpo, mi actitud no fue la correcta, pero tal como yo me pongo en sus zapatos, póngase usted en los míos, la forma en la que me enteré no fue la mejor, ni en el momento indicado, eran demasiadas emociones para procesar en poco tiempo.

—créeme Alina, que si yo pudiese regresar el tiempo atrás, lo haría, para evitar todo esto. —contesto.

—entiendo, solo que nunca me ha gustado preocupar a los demás, tampoco me gusta hablar de mis problemas y cosas, eso debería saberlo. Cuando supe que skone se enteró me sentí invadida y traicionada. —yo asiento.

—yo quiero pedirte disculpas, porque no era mi intención de verdad, jamás haría algo para dañarte, y día a día me he arrepentido. El día de la internacional yo quería que estuvieses conmigo disfrutando, habíamos logrado eso juntos, me dolió muchísimo no tenerte conmigo en ese momento, pero era mi culpa.

—lo disculpo, con la condición de que usted me disculpe a mí, ambos estuvimos mal, yo solo quiero que las cosas estén bien entre nosotros. —dice y yo sonrío.

—Alina, quiero hacerte una pregunta —ella asiente— ¿todavía sigues enamorada de mí? —ladea su cabeza y me mira, se queda en silencio.

—Javi, yo quiero decirle que, sigo tan enamorada de usted cómo probablemente lo estoy desde la primera vez que lo vi. —responde mientras acaricia mi mejilla.

—¿entonces volverías a ser mi novia? —ella sonríe.

—volvería a usted mil veces sin pensarlo. —no pienso resistirme más. Me acerco y la beso, porque es necesario, así le dábamos un plus al momento.

me seguía sorprendiendo de lo bien que encajaban nuestros labios, de lo enamorado que sigo, y que después de todo, se siga sintiendo la misma química de siempre.

—podré pasar por accidentes y perdidas de memoria, pero jamás olvidaré el sabor de sus labios. —dice cuando nos separamos, dejo un beso en su nariz.

—ahora voy a cuidarte, porque te aseguro que de ahora en adelante no tendrás ningún otro accidente —digo mientras tomo su mano, que aún lleva la pulsera de hilos amarillos que le había regalado.— sabes, me sigue sorprendiendo que lleves esa pulsera, si hace como dos años que te la regalé.

—pues cuando desperté de mi primer accidente la tenía, y me gusta mucho así que nunca me la quité. De hecho que hasta creo que me da suerte, porque siempre que jugaba con el dije antes de alguna batalla, ganaba. —responde y yo río.

—yo tengo una —digo mientras saco mi billetera— está acá —hablo mientras saco la pulsera— el dije es un copo de nieve, y me la diste tú, para que te recordara siempre.

—dios, éramos muy cursis —dice mientras ríe— por favor no dejes de ser así. —jala de mi brazo para que con cuidado me recueste sobre su pecho.

yo no podía explicar lo mucho que extrañaba eso, a ella haciéndome mimos en el cabello, y contando algo, mientras su pecho vibraba por el sonido de su voz, el rápido palpitar de su corazón. El sentimiento de ataraxia que me producía estar con ella, supera todos los logros que he obtenido.















al final no soy tan mala,,,

recuerdos de tu olvido ; bnet.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora