Secrets And Lies - ATEEZ

Como amigo y como rey

- Hey - escuchó detrás de él.

Giró y se encontró con Seonghwa mirándolo con una leve sonrisa, como si encontrarlo ahí le alegrara.

- Pensé que ya todos estaban arriba.

- Si tú sigues abajo no pueden estar todos arriba - dijo Yunho regresando su vista a la taza frente a él.

Estaban en la cocina, el alto se encontraba sentado en la gran mesa del centro mientras tomaba algún té.

- Eso... olvídalo - sin pedir permiso se sentó junto a él.

Yunho lo miró sentarse mientras alzaba una cega al igual que la comisura de sus labios.

- ¿Acaso siempre te sientas sin permiso? - preguntó en broma.

- Me lo han dicho.

El rubio vio que Seonghwa también llevaba una bebida, un café completamente negro, lo mecía mientras lo sujetaba desde arriba con solo sus dedos creando pequeñas olas de café.

- ¿Dónde está él? - preguntó el mayor sabiendo que el rubio sabía a quién se refería.

- Durmiendo arriba - se quedaron en silencio durante unos segundos hasta que Yunho lo rompió - ¿y él?

- No lo sé, igual está arriba pero dudo que esté durmiendo - llevó la taza de café a sus labios y bebió - tal vez esté revisando sus sueños y más terribles miedos.

El rubio soltó una muy baja y corta risa.

- No me sorprendería.

Seonghwa lo vio con más detenimiento, observando las pequeñas ojeras cansadas debajo de sus ojos y su cabello rubio levemente despeinado, definitivamente ese chico alto de rubios cabellos y personalidad cambiante tenía algo más que ocultar que una historia familiar larga.

- ¿Por qué no le dices? - preguntó de repente, recibiendo la mirada confundida de Yunho - hablo de Mingi y tu especialidad.

- ¿Cómo...?

- Se me confían muchos documentos sobre los herederos reales, aunque el tuyo tiene sin duda alguna muchas partes en blanco no es difícil deducir quién eres - le dijo Seonghwa - no tienes escapatoria así que habla.

Yunho lo miró de una manera extraña, como si se obligara a callar todo por lo que su mente pasaba en esos momento y es que eso era lo que pasaba, el joven heredero de los Jeong no quería decir semejantes cosas que le pasaban por su cabeza.

- Porque es... más complicado.

- Tenemos tiempo antes de que Hongjoong baje en mi búsqueda - se sentó mejor en la silla de madera.

El rubio suspiró.

- Se va alejar - fue lo primero que dijo antes de continuar - es demasiado para Mingi, es demasiado para mí y no quiero perder la...

Se quedó callado dejando las palabras en el aire, como si se hubiera perdido en su mente.

- Yunho, sigue - le pidió Seonghwa con un tono bastante tranquilo llamando de nuevo la atención del menor.

- No quiero perder la única oportunidad de volver a ser feliz con él - soltó mirando al mayor a los ojos - ¿Sabes lo destructiva que es mi especialidad? Es una total...

- Bendición - lo completó Seonghwa - ¿tienes idea de lo extraña que es? Y no solo eso, es... es hermosa tu especialidad.

El menor solo lo miraba con el rostro triste, intentando dar a conocer su pesar. Porque Yunho odiaba su especialidad con todo su ser, odiaba lo que la Aurora le había otorgado y siempre se preguntaba el porqué entre todos los niños tuvo que ser él al que le otorgaran tal especialidad, un poder del cual temía. Tan hermosamente destructivo que nadie sabía con exactitud las habilidades que se te otorgaban pues solo pocas personas en su familia la habían poseído.