32. Nuevo equipo

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POV Daniela

- ¡Daniela, ahí te va! - no había captado muy bien aquel comentario hasta que sentí un golpe en mi cara.

- Carajo - susurré recomponiéndome y sobando mi frente ya que había recibido un pelotazo.

- Lo... siento m-mucho Daniela - se acerca nadando levemente uno de los nuevos integrantes del equipo, Steve.

Hace unos días, Jones me había informado que ya tenía a unos estudiantes enlistados para el campeonato pero que aún faltaban algunos, ella decidió aún así empezar a hacer algunos entrenamientos para que vayamos calentando con el nuevo equipo de momento.

- No fue tu culpa, Steve - le doy una leve sonrisa tranquila que no dudo que se vio más como un horror.

Me di la vuelta y nadé hasta acercarme a la orilla de la piscina, me estaba empezando a doler la cabeza.

Me alcé y me senté en la orilla de ésta mientras hacía gestos incómodos por el próximo dolor irritante que se venía.

Segundos después me puse de pie y cuando me doy la vuelta, choqué con un cuerpo.

- No jodas - susurré ya enojándome.

Levanté mi rostro y vi a una Jones de brazos cruzados algo... enojada.

- ¿Qué pasa entrenadora? - comenté mientras le pasaba por el lado para ir en busca de mi toalla.

- No hemos terminado Daniela, regresa al agua - comenta dura.

- Yo terminé, me duele la cabeza - pasé la toalla por mi cuerpo retirando todo exceso de agua y luego la coloqué sobre mis hombros.

- ¡Porque tú te dejaste pegar Daniela! ¡Llevas así estos últimos días! - fruncí mi ceño, sus gritos me estaban haciendo doler más la cabeza.

- Tranquila Jones - dije colocando mi mano hacia al frente insinuando a que pare - Aún quedan dos meses y algo para la final, estaremos bien.

- Daniela, sabes que el waterpolo es un juego complicado por la panticularidad de que es con una mano, debes tener...

- Si si - la corté - luego nos vemos, me duele la cabeza - me giré escuchando un gruñido de su parte y me fui a cambiar de vestimenta.

...

- Kim ¿podemos hablar? - pregunté una vez que saludé a todos en la mesa.

Luego de preguntar aquello me alejé un poco dando a entender que mi pregunta era más una afirmación.

- Suéltalo - se cruzó de brazos frente a mí. Suspiré.

- Necesito que me cubras, me iré a casa.

- Calle, si lo dices por María José, tranquila, ella está en tu casa y está con Alba.

- Por esa razón debería preocuparme más - susurré para mí.

- ¿eh?

- Nada - me apróxime a decir - Me duele la cabeza, me dieron un pelotazo hoy - en parte era razón pero la razón principal es que no puedo concentrarme en nada cuando Poché no está del todo bien.

Desde lo que pasó en la cena con su padre y su hermana, luego de que saliera huyendo, caminamos hasta el parque al que ella suele escaparse cuando no se siente bien.

Al principio, trate de detenerla ya que presentí que esto no terminaría bien pero ella no quería parar. Lo iba intentar nuevamente ya que me estaba preocupando bastante sus reacciones pero Valentina me detuvo, me dijo que era necesario que ella soltara todo y que la escuchen, luego pensé y tenía razón, sentí que ella necesitaba desahogarse, necesitaba decir todo lo que había silenciado, necesitaba que sus pensamientos tuvieran voz.

La Nadadora Estrella Donde viven las historias. Descúbrelo ahora