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Las semanas pasaban y ya teníamos la fecha de la boda.

-No puedo creer que tenemos un angelito más en nuestra vida- sentí como acariciaba mi abdomen plano

-Recuerda lo que dijo el ginecólogo- susurré colocando mi mano sobre la de él

Subí mi rostro y lo vi asentir.

-Ya debemos levantarnos- mire el reloj en nuestra mesa de noche

-Es mi día libre- hizo que me recostara por completo sobre él

-El mío no- acaricie su barbilla

-Ya fuiste al baño y te lavaste los dientes, puedes quedarte a dormir unos minutos más- sonrió mirándome

-Amor tenemos hambre- señale mi abdomen

-Si es así ahora te hago de desayunar- sonreí al verlo salir rápidamente

Cuando estuve sola fui a ducharme.

Si es por Marcus no me deja hacer nada.

El ginecólogo nos menciono que todo estaba bien, pero debía seguir una dieta en especifico.

Siento de cierta forma que su madre esta por descubrirlo ya que Marcus no sabe ocultar nada.

FlashBack

-Mami Eleonor no puede comer eso- quito el plato frente a mi al cual estaba dispuesta de demorar

- ¿Razón? – nos miro preocupada

-Se enfermo y no puede comer eso- levanto sus brazos como si nada

-Eres malo mintiendo- apretó su mejilla para continuar

Luego de eso me encontraba en la sala junto a Alessandra para ver una de sus películas favoritas.

-Hace frio abrígate- me paso una frisa

-No se que te pasa- apareció mi suegra con sus brazos cruzados

Fin de flashback

Definitivamente él era muy malo con todo lo del embarazo.

Cuando estuve completamente arreglada bajé a desayunar.

-No entiendo que le pasa- susurro mi suegra mientras miraba a Marcus cocinar

-Tampoco se- subí mis hombros riendo

Cuando giro para verme me miro sorprendida.

-Estas hermosa hija- me abrazo sin dejar de mirarme

-No sabes como Alessandra pregunta por ti todas las mañanas- sonrió para irnos a sentar en la mesa

-Mi pequeña cuñada es hermosa- coloque un mechón de mi cabello detrás de mi oreja

-Preciosa a desayunar- frente a mi tenia uno de los desayunos mas completos de mi vida

-Gracias- sonreí para comer

Mi suegra y Marcus no dejaban de mirarme.

- ¿Pasa algo? – los mire a los dos

-Es una bruja- la señalo y sabía a lo que se refería

-No es que tu madre sea bruja, pero tu no sabes mentir amor- reí mientras comía

-Es bueno saber que pronto tendremos un bebé en la casa- su sonrisa a medida que hablaba se intensificaba

-No diga nada ya que quiero pasar los tres meses para poder dar la noticia- respondí un poco nerviosa

-Tranquila princesa no diremos nada y tu Marcus debes de aprender a mentir- señalo a su hijo causando que me riera

Amor en la CocinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora