CAPITULO 45

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LAUREN PV

-¿De qué está hablando?-. Preguntó Giselle aferrándose a mi hombro.

Me encogí de hombros  -Ya conoces a Dinah-. Susurré. Camila soltó una pequeña risita.

Me lo perdí. La extrañaba

-Entonces, Camilla, ¿verdad?-. Dijo Giselle reconociendo la presencia de Camila.

-Es Camila-. Dije. No entiendo cómo la gente pronuncia mal su nombre. Ella acaba de escucharnos hablar y pronunciar su nombre.

-Oh-. Dijo Giselle  -¿Qué haces tú?-.

-Soy escritora-. Camila respondió con orgullo mientras me daba una sonrisa sutil.

-¿De Verdad?-. Preguntó cruzando los brazos sobre el pecho   -¿Algo de lo que hiciste fue reconocido?-.

Me llevé el vaso a los labios con la esperanza de que para cuando terminara de beberme la cerveza ... Giselle se hubiera ido.

-No, estoy segura de que no lo has leído -. Camila dijo suavemente mordiéndose el labio   -Pero, Lauren si-. Ella me guiñó un ojo.

Escupí mi cerveza directamente sobre la camisa de Giselle.

-¡Lauren!-. Ella exclamó.

-Lo siento ... lo siento-. Dije tratando de ayudarla. Ella apartó mis manos.

-Me voy a ir a casa-. Giselle chilló   -Te llamaré -. Ella siseó rozando a Camila mientras salía del lugar.

-Seguro que sabes cómo elegirlas-. dijo Camila.

-¿Por qué estás aquí?-.

-Mira por ti misma-. Ella respondió.

Comenzó a caminar hacia el balcón. La seguí porque necesitaba saberlo. Por suerte para mí, no había nadie aquí.

Con suerte, Dinah no aparece. Ella no tiene ningún puto escalofrío.

-¿Qué intentas ver Camila?-.

-Dónde salió mal-. Caminó hasta la barandilla. Me abstuve de caminar allí porque ya tenía siete pisos de altura y mirar hacia abajo me habría enviado al borde.

-¿No nos hacemos todos esa pregunta?-. Saqué la caja de cigarrillos del fondo de mi bolsillo.

Giró un poco su cuerpo para poder verme un poco, pero aún podía ver las luces de la ciudad   -No te imaginé fumando-. Me reí   -Tampoco te imaginaste que me gusten las mujeres-. Levanté el cigarrillo y lo coloqué entre mis labios  -Las cosas cambian-. Encendí el extremo e inhalé profundamente.

-No me digas que Giselle es un hombre-. Camila bromeó. -Quienquiera que sea su médico ... hicieron un trabajo terrible-. Bromeó. Exhalé.

-Eres graciosa-.

-¿No es por eso que le agrado Dra. Jauregui?-.

-Una de las muchas razones-. Me dirigí a la barandilla para estar junto a ella.

-Cinco años ¿eh? -.

-Cinco años... -.

-¿Qué me perdí?-.

-Brian y yo tenemos una niña -.

-¿Qué? Espera. ¿Tú y Brian tienen un hijo juntos?-. Me aparté de la barandilla.

-Adoptamos a una niña, sí-.

-¿Qué están casados ​​ustedes dos ahora?-. Yo pregunté   -Ustedes dos también estaban cerca-. Dije pasando mi mano por mi cabello.

-No. No. No estamos juntos-.

-¡Vamos, vives con el chico! Tienen un hijo de cuatro años juntos. ¿Cómo no esperas que crea que no?-.

-Eres una idiota-. Dejé de caminar.

-¿Qué? -.

-Eres una idiota. ¿Crees que si estuviera casada con Brian estaría hablando contigo?-. Ella preguntó.

-Pero estabas casada con ese otro hombre -.

-No sabes nada de eso-.

-¿No, Camila? ¡Es por eso que me dejaste sola en el hotel hace cinco años!-. grité.

-¡Te dejé porque te amaba Lauren!-. Ella gritó en respuesta   -Te amaba entonces ... y estoy segura de que todavía lo hago-. Ella susurró   -Te vi con ella, hace unos años pensé que te tenía pero, ahora me di cuenta de lo tonta que era por pensar que esto era lo mismo-.

Pasó junto a mí, chocando contra mi hombro derecho. Caminó dentro del lugar, cerrando la puerta detrás de ella.


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CAMILA PV

-Mila, ¿a dónde vas?-. Preguntó Dinah agarrándose a mi muñeca.


-Me tengo que ir-. Dije tratando de no llorar   -Fue bueno verte-. La acerqué para darle un abrazo    -Asegúrate de que Lauren esté feliz-.

-¿Por qué no puedes hacer eso tú misma?-. Dijo una voz ronca detrás de mí. Me aparté de Dinah y me dirigí hacia la salida delantera.

Esperé afuera, solo para mi suerte, no había taxis donde la percepción.

-¿Cuándo vas a dejar de correr?-.

-Vuelve dentro de Lauren-. Dije mientras comenzaba a caminar por la acera.

-Vuelve a mí-. Dijo ella con firmeza.

-No te pertenezco Lauren-.

Corrió directamente frente a mí   -Si tu puedes-. Dijo alcanzando mi mano. -Solo quiero decir que eres mía. Eres mía, al diablo con lo que escuchaste, eres mía. Eres mía-. Ella sonrió.

Entrecerré mis ojos   -Pasas demasiado tiempo con Dinah-.

-Mila, solo cállate y trae a tu chica-. Dinah gritó desde una puerta.

-¿Qué vas a hacer Camz?-. Preguntó Lauren. Ella miró al suelo. Puse mi mano debajo de su barbilla y levanté su cabeza. Sus ojos se encontraron con los míos. Como tantas veces antes.

Mi cabeza me decía que no, pero mi corazón me decía   -Sí-.

-¿Si?-. Preguntó Lauren. Asenti.

-¡Sí! ¡Lauren dejó a Giselle y se fue con Mila!-. Gritó Dinah. La gente dentro del lugar comenzó a vitorear.
-Las dejaré a ustedes dos solas ahora-. Dinah sonrió  -¡Las amo perras!-. Dijo dirigiéndose de regreso al lugar.

-Ella apostó por mí-. Lauren se burló.

-¿Estás realmente preocupada por eso?-. Arqueé una ceja.

Lauren me dio su sonrisa distintiva. -Estoy preocupada por ti-.

Colocó una de sus manos en mi cintura y la otra se colocó estratégicamente en mi cabello   -¿Qué estas esperando?-. Susurré mirándola a los ojos.

-1432-. susurró antes de presionar sus labios contra los míos.

The Patient's Promise (traducción) CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora