Charlotte Beckett es una joven policía de 27 años; hace 2 años asesinaron a su hermana, un conocido asesino serial Red John, a tratado de olvidar el terrible suceso, pero esto se complica cuando es transferida al BIC y debe enfrentar una terrible re...
Desperté, me sentía agotada, miré a la mesa de noche, estaba el collar, lo tomé, era imposible no recordar a Eve, era una chica tan alegre, jamas ofendia a nadie, trabaja duró, era mi hermana, mi mejor amiga...cuanta falta me hacia; finalmente seguí la rutina, depués de tomar té tomé mis cosas, tomé el expediente y salí del departamento "hoy es otro día", respiré el aire fresco de la mañana y al dar un paso un idiota me tropezo, lo peor, ni siquiera se disculpo, solos iguio caminando.
—¡Mire por donde camino! —me agaché a recoger el expediente que estaba hecho un desastre.
Levante la carpeta, y encontré un sobre rojo, me levanté rápido y miré hacia los lados, pero ya no había nadie, empecé a caminar hasta la avenida, pare un taxi, y dentro de este abrí el sobre.
"Me he estado preguntando qué opina de mis cartas, quisiera saberlo, sé que quisiera responderlas, tal vez pueda hacerlo alguna vez...solo déjeme ayudarle.
-R.J."
¿Ayudarme?, ¿cómo podría ayudarme él?, destruyó mi vida en segundos, y ahora me dice que quiere ayudarme, de verdad estaba loco.
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Llegamos al BIC muy rápido, o tal vez se me hizo rápido porque estuve perdida en mis pensamientos; me dirigí a la entrada, estaba bien, no vi a Jane por ningún lado, pasé, no sonó el detector de metales, era un buen comienzo, subí con tranquilidad por el elevador y me senté en mi escritorio, no sabia que hacer, la jefa no dejaba que me involucra en los casos, quería que "me adaptara al ritmo del BIC" eso me molestaba, a veces sentía que el trabajo en Atlanta era más complicado y mi teniente no dudaba en llamarme, hablando de llamadas mi telefono sono.
—Hola...
—Beckett...
—¿Jefe?, wow, creo que lo llame con mi mente...
—¿Estaba pensando en mi?
—Bueno, no por las razones que cree...
—No te preocupes —sentí que sonreía— la verdad llamaba para pedirte un favor...
—Dígame señor.
—Tenemos un fugitivo, creemos que está en Sacramento, pero no tenemos jurisdicción, quería pedirte que me echaras una mano, podemos reportarlo como un asunto oficial.
—Claro que sí jefe.
—Bien, te enviaré la dirección.
—Esta bien... —entre en la oficina de Lisbon— Jefa, voy a salir...
—¿Eso porque?
—Estoy en un cooperativo con la policía de Atlanta...
—Lleva a Jane...
—¿Disculpe?
—Ya oíste, si quieres mi permiso, lleva a Jane contigo.
—¿Es broma, verdad? —estaba muy seria— está bien...
Salí de la oficina de Lisbon y me diriji a la cocina, obviamente iba por un té, abrí la alacena donde estaba el té y vi una caja, tenía un papel de pegatina que decía "para Charlotte", abrí la caja, era un taza me causo gracia y solo una leve risita.
—Primera vez que te veo sonreír —Jane apareció de la nada.
—No era una sonrisa...
—¿Entonces que era? —sonrió, para ser sinceros tenía una linda sonrisa.
—Era un gas...
—Pues que extraño gas... —sonrió más.
—Que bueno que viene usted a mi... —serví té en mi nueva taza— Lisbon me pidió que lo llevara conmigo.
—¿Cuál es la misión?
—Buscar un fugitivo.
—Pues vámonos...
Al llegar al estacionamiento me sorprendí al ver el carro de Jane, no soy buena con los autos, pero eso lo reconocí sin duda.
—Su padre tenía uno igual —me observó.
—Eh, sí...¿cómo lo supo?
—Su mirada —se subió al auto.
Condujo, lo hacía rápido, parecía que le gustaba vivir al límite, hasta nos pasamos un semáforo en rojo "¡Está loco!" le grité en ese momento, él solo sonrió burlonamente.
—Buenas tardes —hablé cuando oí que la puerta se abrio, cuando alce la mirada vi a un hombre, 1,80, cabello negro, ojos verdes, nariz perfilada y unos labios rosados realmente encatadore.
—Hola, ¿puedo ayudarle? —me miró intrigado.
—Claro....e-estoy buscando a Joseph Kane, ¿lo conoce?
—Él es mi hermano...
—¿Usted vive aquí? —pregunté.
—Claro que no, es demasiado elegante para vivir en un lugar como este, tal vez solo esta de visita... —Jane respondió desde atrás.
—Mi hermano me llamó, dijo que necesitaba mi ayuda, viene a buscarlo, pero no está.
—¿Tiene llaves de la casa?
—Sí, es mía, solo que Josh la usa cuando viene a Sacramento, supuse que estaría aquí...pero no.
—¿Me permitiría revisar? —fuí rápida.
—Emm, por supuesto, pero, me dejaría ver su identificación.
—Claro lo olvide, soy Charlotte Beckett —saque mi placa— y el es mi colega Patrick Jane...
—Pasen por favor.
—Usted es dueño de una empresa, ha hecho muchos estudios, pero su hermano...su hermano es un fracaso, sin embargo tienen un vínculo muy fuerte, y aunque usted es el hermano menor, usted cuida de él —Jane observaba la casa.
—Sí... —frunció el ceño— ¿cómo lo sabe?
—Intuición...
—Al parecer no hay nada, pero sí quisiera pedirle un favor señor...
—Micael Cane.
—Por favor, llámame cuando su hermano vuelva a comunicarse...
—Por supuesto.
—Sabe que me resulta extraño —Jane interrumpe— en ningún momento nos ha preguntado qué pasa con su hermano.
—Pues, sé que mi hermano tiene problemas, que las cosas que hace no son legales...¿qué podría preguntar?, además, aquí son ustedes los que preguntan no yo... —se paró firme frente a Jane.
—Le agradezco mucho Sr.Kane, nos veremos luego —empuje a Jane fuera de la casa.
