DISCLAMER: ¡Buenos díiiiiias!! Hemos tenido un finde completito, con despedida de soltera sorpresa incluida, y no ha habido forma de actualizar. Juro que estoy viva, no me ha pasado nada y, esta semana, trataremos de darle duro a las actualizaciones.
Me habéis preguntado cuántos capítulos quedan para "ciertas cosas". Pero como no puedo (ni quiero!! Porque odio los spoilers) contestar a eso ni especificar si ocurren o qué, os diré simplemente que nos quedan muy muy muy muuuuuy poquitos capítulos. MUY poquitos.
Dicho esto, espero que hayáis echado de menos el fic tanto como él a vosotrxs y que os guste mucho mucho mucho mucho este nuevo capítulo. ¡Nos leemos!!
.Ninguna madre debería jamás escuchar hablar a su hijo con esta voz. Quebrada, triste, sin esperanza ni fuerzas. No debería espiarle, pero desde que le he escuchado no he podido resistirme. Se ha atrevido a escaparse de casa tan tarde porque necesitaba ver a Emma y aquí está ahora, como suelo hacer yo misma, sentado en esa silla, agarrando su mano y susurrándole. Con la diferencia de que la máquina no reacciona y Henry está sollozando.
Cada palabra me oprime un poco más el corazón...
"Mamá... mamá tienes que escucharme. Tienes que despertarte, eres la salvadora, te necesitamos... y yo tengo miedo. Estoy preocupado por Regina. Parece fuera de sí, está demasiado tranquila y cada día más rara, más misteriosa. Mamá, ¿y si todo esto es por la boda? ¿Y si está pensando maneras de atentar contra ellos? No puedo imaginar a la Reina Malvada permitiéndoles ser felices... Al menos tú estarás a salvo de ella, lejos de su alcance... Aunque también lejos de mí.
¿Cómo es esa maldición? Te imagino luchando día a día contra ella... ¿Es así? ¿Estás tratando de volver con nosotros? ¿Puedes tan siquiera oírme? Mamá, necesito que luches, necesito saber que tú no me has abandonado también..."
Se abraza a ella y llora contra el camisón del hospital. Yo lo hago contra la mano, luchando porque no se escape ni un solo sollozo. Me escondo con los ojos nublados tras la primera esquina cuando Henry recoge su chaqueta y sale a hurtadillas del dormitorio.
Voy a la vera de Emma y sé de antemano que esta visita durará poco porque no voy a tardar en derrumbarme. Es la primera vez que me siento a su lado y la siento tan lejos. Acerco la silla pero no me consuela. Hoy nada lo hace.
"Emma, por favor, demuéstrale que no le has abandonado, demuéstrale que ninguna de las dos lo hemos hecho y que no está sólo, por favor. Salvadora, tienes que despertar." Las últimas palabras salen a trompicones, me atraganto con las lágrimas y sé que he llegado al límite de mis fuerzas. Me tiemblan las manos, pero no me voy a ir sin tocarte, sin hacer que respondas aunque sea ese breve instante.
Sujeto la mano que momentos antes sostenía Henry y susurro: "Emma, se nos acaba el tiempo..."
Dejo un suave beso sobre el dorso, un gesto inconsciente, que no medito, y antes de separar los labios de la piel, la máquina ya está pitando. Me escabullo sin prisas, sabiendo ya por dónde llegará la enfermera de turno y por dónde debo salir yo. A pesar de ir lenta, caminando a paso tranquilo, cuando llego al coche aún estoy llorando. Llorando por Henry, por Emma y por mí. Por esa sensación de angustia. Ese agujero negro en mi pecho que se traga cada pensamiento feliz. Que se agranda con cada día que tacho del calendario...
Continuará...
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Diálogos de la Manzana (SWANQUEEN)
Fanfic¿Qué hubiera ocurrido si Emma hubiese mordido el hojaldre de manzana hechizada en vez de Henry? ¿Qué habría sido de la Salvadora? ¿Y de Regina? Una versión paralela (y muy Swanqueen) en la que la maldición recae sobre Emma y no sobre Henry...