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Capítulo 11

La visión de Shiro

Todos estaban reunidos en la sala en espera de que su compañera despertara, habían pasado varias horas y desde lo sucedido en el planeta anterior, Shiro mencionaba a detalle lo que había ocurrido con la bruja y Tania. 

El rostro de la joven paladina mostraba tranquilidad, a pesar de que su herida estuviera cerrada y curada. Había pasado exactamente 4 horas desde que fue ingresada al castillo.

Coran mantenía una revisión constante en el estado de la joven. Shiro temía que algo ocurriría por lo que se mantenia atento, en especial mantenía una vision en Tania.

– Ha pasado mucho tiempo, ¿Por qué aun no despierta? – preguntó Pidge.

– Seguro está... teniendo una... ¿Pesadilla? – aseguró Lance.

– Luchó contra Haggar, ¿Qué puede ser peor que una pesadilla?

Sus ojos se abrieron de repente, pero no eran los mismo, eran totalmente blancos y su pelo lo era aún más, bajo de la cápsula con lentitud, con rapidez fue directamente a Shiro y tocando su brazo robótico, dándole una descarga, regresando así a su día de escape.

En su brazo poseía coordenadas de un Galra que lo había ayudado a escapar.

Junto a él había un Galra, preparaba varios químicos, dos centinelas custodiaban sus medicamentos y demás.

Uno de esos centinelas le estaba inyectando una anestesia de alto efecto, pero el Garla lo detuvo dándole la excusa de darle algo para el "dolor" pero para cuando el centinela se alejará, el Galra acabaría con los centinelas.

– Aquí hay algunas coordenadas donde me puedes contactar... – golpea su rostro. – ¡Despierta soldado! El destino del universo depende de ti.

El Galra suelta a Shiro de las esposas que lo tenían atrapado.

– Mi nombre es Usla, saldado de la Espada de Marmora, Los Galra obtuvieron las coordenadas del león azul en tu planeta, debes encontrarlo antes que ellos, habrá una explosión que cubrirá tu escape, aprovéchala, buena suerte soldado. – así fue por otro lado.

Shiro empezó su travesía hacía la nave de escape, cuando estaba por llegar dos centinelas trataron de detenerlo, el mayor como pudo se soltó de ellos, casi no lo logra, pero si no fuese por la explosión este no estaría aquí.

Tania caía al suelo nuevamente, inconsciente, le había revivido un recuerdo a Shiro.

¿Como era eso posible?

Keith sostuvo su cuerpo antes del golpe, Shiro por su parte estaba sorprendido, recordaba su escapa y llegada a la Tierra.

Frigus, frigus ... – murmuraba.

Tania buscaba un calor en Keith, su aspecto de siempre había regresado a la normalidad aún que seguía inconsciente. Allura revisó su temperatura corporal, se había estabilizado completamente.

– Coran, Keith, lleven a Tania a su recamara. – ordeno. – Estará inconsciente por un tiempo, despertará pronto, es mejor que esté en un lugar más cómodo.

Keith cargo a Tania mientras que Coran lo guiaba a la habitación, Shiro mencionó lo que había visto dejando al equipo pensando.

En el cuarto, Keith ponía con cuidado a Tania en la cama, Coran chequeaba los latidos y temperatura, todo estaba estable, lo raro de todo esto fue la reacción que tuvo con Shiro, ¿Que había visto?

– Me quedaré por si se llega a despertar. – sugirió Keith.

– Está bien, avísanos si algo cambia. – dijo mientras salía.

Minutos pasaban, Keith se notaba algo desesperado, hasta que un quejido llamó su atención, Tania estaba despertando, se miraba mejor, sentía un leve cansancio y dolor en sus castillas. La chica se incorporó en la cama, quedando a vistas del pelinegro.

– Buenos días. – bromeó.

– ¿Qué pasó? – preguntó.— ¿Hace cuanto estoy aquí?

– Pasaron varias cosas, la verdad.

– Soy todo oídos.

Keith contó los sucesos del planeta en el que habían caído y como le había hecho a Shiro algo como para dejarlo casi mudo, mencionó también su estado de salud y cómo algunas cosas se le dificultará por un tiempo.

Keith salió para que pudiera cambiarse, ambos fueron al centro de comando, los chicos discutían sobre la información que Shiro les había proporcionado.

– ¿Seguro no lo soñaste? – pregunto Pidge, tecleaba en su computador dudosa.

– Soñar despierto es posible, recordar algo que no recordaba es imposible. – comentó obvio.

Tania saludo al equipo, ellos saludaron de vuelta comentando lo que sucedió con Shiro, sumando que relataron nuevamente lo que ella había hecho, la joven paladina no le encontraba explicación a eso ya que no recuerda nada de lo sucedido.

– Creo que encontré algo. 

El Allegado del Blanco. [Voltron Fanfiction]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora