Capítulo XIII: Promesa
El eco infernal de las inentendibles voces de la muerte fueron ensordecedores para los sobrevivientes.
Los mismos que se agazaparon sobre la roca bajo sus pies, lo suficientemente alta para no ser devorados por las decenas de voraces caminantes, que se encimaron unos sobre otros para tratar de alcanzar la carne viva con sus manos.
En momentos donde la tenue oscuridad fue vislumbrada por luces azules y blancas pertenecientes a las linternas, una antorcha ajena a todos ellos se encendió.
—¿Amigos?— Jerry señaló hacia dicho resplandor y todos alzaron sus miradas.
El fuego vivaz y naranja brilló a lo lejos y en lo alto, y su portadora fue aquella mujer de mirada tétrica y vacía, quien los miraba victoriosa desde su posición luego de haberlos hecho caer en su trampa.
La forma en que se regodeaba con una simple mirada disparó los sentimientos más oscuros de cada uno de los presentes.
Y en la misma explosión iracunda, Carol estalló en un grito que superó él coro de gruñidos y ensanchó la sonrisa del enemigo.
Alpha se marchó más que triunfante del lugar.
Había logrado su cometido.
Los sobrevivientes estaban atrapados.
Y, probablemente, sin escapatoria.
[•••]
La pelinaranja gruñó al ejercer fuerza, tratando de flexionar sus brazos en el intento de escalar las mismas rocas por donde habían caído. Pero como si Alpha tuviera todo calculado con desde un principio, la superficie bajo sus manos fue tan lisa que no tuvo por dónde sujetarse y en un falso movimiento cayó, siendo rápidamente atrapada por los brazos de Daryl.
—¿Estás bien?—
El calor de su aliento contrastó con el frío de la cueva y Neferet suspiró temblorosa por la cercanía mientras se recomponía.
—Casi lo logro.— lo miró apenada por no poder ayudar, y siseó ante el escozor presente en su mano. Con sumo cuidado, él la tomó al notar los hilos de sangre, y descubrió el tajo que se había hecho sobre la palma.—Puedo volver a intentarlo.—
—No. Déjame ayudarte con eso.— expresó con rapidez mientras tomaba su pañuelo rojo con el que siempre cargaba. La pelinaranja dejó su mano suspendida y él la sujetó con la misma delicadeza, envolviéndola con la tela roja para que dejara de sangrar.
Neferet sonrió ante su bonito gesto, pero retiró su mano al sentir la mirada de Connie sobre ellos.
—Gracias.— su gesto se endureció por obligación, más no logró sostenerlo y bajó la cabeza.
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Después De La Tormenta ||Daryl Dixon; Negan
סיפור קצרU.T.E.E.F.D.M -Tercera Parte- ➖Parte A: Daryl x OC. ➖Parte B; Universo Alternativo: Negan x OC. Temporada 10- 11