Es una novela creada por tres escritoras, esperemos que en un futuro esta novela se convierta en una trilogía.
Todas para una y una para todas, era el lema siempre recitado por mis hermanas y por mi, todo antes de que unos dementes nos secuestraran...
Capítulo dedicado a: @cada_dia_ @Lauritadix y @NiliaSanchezHoran3
Gracias por participar en la dinámica del domingo y por votar y comentar en los capítulos las quiero mafiosas.
Ahora a disfrutar del capítulo, espero les guste :)
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Nos levantamos para entrenar como lo venimos haciendo desde hace ya un mes, entrenar con las armas y enseñarle a Marianne todo acerca de las drogas ha sido una tarea un poco fácil ya que ella aprende muy rápido, también me dijo que quiere hacer una carrera en contaduría, derecho o alguna carrera que ayude al negocio.
Hoy iremos a ver a la ginecóloga ya que han pasado dos semanas desde los días fértiles de Marianne.
Llegamos a la clínica y nos dirigimos al consultorio de la doctora Reyes, espero que Marianne si este embarazada, con el tiempo aprendí a querer a Ally, esa pequeña se ha ganado el corazón de toda la familia.
-Hola Anne, ¿cómo se encuentran?- preguntó la doctora Reyes dándome la mano para estrecharla.
-Bien ¿y tu Tanya?- contestó mi esposa antes de darle un beso en la mejilla.
-Bien gracias, tomen asiento- dijo señalando las sillas frente su escritorio.
Tomamos asiento y empezó con las preguntas.
-¿Cuándo fue la última vez que intimaron?- pregunto tomando nota.
-La última semana casi a diario pero en sus días fértiles también lo hicimos- conteste.
-Bien, Anne pasa a ponerte la bata por favor haremos el ultrasonido- dijo pasándole una bata de hospital.
Marianne salió del baño y se sentó en la silla ginecológica.
-Bien, recuéstate por favor- dijo señalando la camilla
La doctora Reyes colocó el monitor que está conectado al aparatito que ocupan para los ultrasonidos..
-Aplicare gel y veremos en el monitor si hay fecundación o no- dijo enseñándole la sonda.
Marianne asintió nerviosa, tomó su mano y me posicione a su lado.
-Bien empecemos- dijo colocando gel, colocó el aparato en su vientre.
Observamos el monitor, no veo nada y al parecer Marianne tampoco.
-Tan, si estoy embarazada?- preguntó angustiada.
-Si Anne, mira aquí está su bebe, felicidades- dijo señalando un pequeño punto en la pantalla del monitor.
Marianne tenía su mano en su boca y sus ojos estaban cristalizados, apreté su mano que seguía unida a la mía y volteo a verme, quito su mano y me regaló una sonrisa enorme.
-Su bebe está bien, todo está en orden, quieren que imprima el ultrasonido- dijo viéndonos feliz.
