Es una novela creada por tres escritoras, esperemos que en un futuro esta novela se convierta en una trilogía.
Todas para una y una para todas, era el lema siempre recitado por mis hermanas y por mi, todo antes de que unos dementes nos secuestraran...
Este capítulo va dedicado a: @Regina_Halemuchas gracias por apoyar la historia.
Disfruten del nuevo cap.
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-!NO, NO ME TOQUES!- desperté gritando.
-Tranquila amor, no pasa, no hay nadie aquí que te pueda hacer daño- dijo MIkhail, mientras prendía la lámpara de mesa.
-¿Mami?- se escuchó la pequeña voz de Ally.
-¿Te desperté?- pregunté angustiada todavía.
-Ti- dijo tallándose su ojito y con su osito de peluche.
-Ven aquí cariño- dijo Mikhail palmeando la cama.
Misha ayudó a subir a Ally a la cama y la acomodo en medio de ambos, Ally se acercó a mí y me abrazó posicionando su cabeza en mi pecho.
-No te preocupes mami, yo te cuidare junto con Osi- dijo mientras me pasaba su oso. Lo tomé y lo colgué en mi pecho abrazándolo.
-Gracias cariño- dije dándole un beso en su coronilla.
Ally se acurrucó y se quedó dormida casi de inmediato. Misha se acomodó en su lugar de nuevo no sin antes acercarse a darme un beso en los labios con cuidado de no aplastar a Ally.
-Descansa cariño- dijo antes de apagar la lámpara.
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Me encuentro en el despacho de la mansión revisando unos papeles que llegaron, también se me paso decir que este mes Mikhail me ha estado enseñado el trabajo administrativo y todo lo que se tiene que revisar: contratos, ventas, planificación, lugares de venta de armas (ya que ese es puesto), salarios de empleados y todo eso que lleva la administración.
-Moya lyvbov'- dijo entrando mi esposo al despacho- la comida está lista y tus padres nos esperan- continuó acercándose a mí para pararse detrás de la silla y abrazarme.
-Ya casi termino de revisar estos papeles- dije levantando la cabeza para verlo.
-Bien entonces te espero- dijo recargando su barbilla en mi cabeza.
Unos minutos después termine de hacer el papeleo.
-Listo- le dije mientras me ponía de pie.
-Pensé que no terminarías nunca, muero de hambre- dijo divertido.
-Tonto- digo dándole un golpe en su hombro.
-Auch!- dice sobando la zona golpeada.
Salimos del despacho y nos dirigimos al comedor donde los demás nos están esperando. Salude a mis padres y tomamos asiento.
-¿Cómo han estado?- pregunte antes de meterme una cucharada de sopa a la boca.
-Bien hija, el negocio ha mejorado pero no tanto- dijo mi padre.
