Consejos para escribir escenas de acción

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Para escribir escenas de acción y peleas, no hay reglas fijas o recursos narrativos y literarios, no hay una secuencia o recetario para seguir. Esta teoría, más que nunca, son consejos para facilitar la forma de escribir estas escenas.

Primeramente, una definición de qué es una escena de acción: toda escena donde haya mucho movimiento; así, una persecución también es una escena de acción, un tiroteo, una carrera de autos, un juego de las escondida. La acción no se limita a las peleas, y a su vez, estas no se limitan al 1 vs 1.

*Tener la coreografía en la mente*: para las peleas, antes de empezar a escribirla, se debe tener ya la coreografía planeada; los movimientos que van a seguir los personajes, los golpes, técnicas, movimientos, poderes que van a usar durante la batalla; las heridas que van a recibir, el trayecto que van a seguir los cuerpos; todo debe estar ya planeado en tu cabeza. Hacer esto facilitara al momento de plasmar en papel la imagen que queremos transmitir, porque está en nuestra memoria, la idea es que te formes una película en tu cabeza la cual vas a ver segundo a segundo mientras escribes. Si tienes la imagen clara, pero se te difumina al momento de mostrarla, puedes hacer un flujograma, mapa conceptual, lista, resumen, x, donde pondrás verbos y movimientos claves, esto te será una guía al momento de escribir.

Se deben evitar las coreografías ostentosas de anime genérico, los intercambios de golpes de las películas de acción genéricas y ese tipo de cosas. Y cuando me refiero a evitar, no me refiero a suprimirlas; sino, que no vamos a describirlas, es algo muy difícil y que no va aportar nada a la historia, basta con decir «luego de un intercambio de puños/espadazos/x tomaron aire y...». Son cosas que se ven bonitas en el contenido audiovisual, pero no en un libro, cansan. Lo que realmente se debe considerar en las coreografías de las peleas es: la posición inicial y la posición final de cada movimiento; lo que vamos a escribir son las acciones entre esas dos posiciones.

Un consejo personal, que me ayuda muchísimo, es representar lo que quiero escribir; hago las acciones y trato de mirar diferentes ángulos, miro qué hace cada parte de mi cuerpo, en qué dirección se mueve, cómo se mueve, cómo se siente, pongo en palabras lo que veo.

*Técnica y anatomía*: no podemos escribir de algo que no sabemos; ¿Cómo nuestro personaje, diestro en todas las artes marciales habidas y por haber, va a pegar una patada si nuestro concepto de esta es solo alzar el pie? No sabremos qué palabras poner. Por eso es bueno tener un mínimo de técnica en este tema. De la misma forma, nuestros lectores no podrán leer algo que no saben, no es escribir: «Pepito usó la técnica 248 del estilo de la lagartija y le arrancó la cabeza a su rival»; es bueno saber la técnica para poder mostrársela al lector. Aplica lo mismo para otros temas: para un tiroteo debemos saber de armas y calibres de balas, el daño que pueden causar; en una guerra debemos saber sobre espadas, armaduras, dagas, flechas, formaciones, entre otros ejemplos.

Una recomendación personal, es bueno tener un conocimiento básico de anatomía humana, para tener una claridad de las partes del cuerpo. Esto facilita mucho visualizarnos la imagen y poder plasmar las cosas que pasan en palabras, porque sabemos los nombres y direcciones del cuerpo. Y nos ahorra la vergüenza de errores e incoherencias como: «Pateo con su mano izquierda, el golpe impacto en el rostro enemigo y le desgarro el hígado», suena exagerado, y en parte lo es, pero he visto casos que se acercan bastante a este.

*Realismo y coherencia*: sí, sé que es ficción, pero un poquito de realismo y coherencia no le hace daño a nadie. Las cosas deben tener lógica, así sea la lógica de ese mundo, no es que alguien con 25 tiros en el cuerpo pueda seguir corriendo como si nada, o que un farmacéutico que en su vida a trotado ahora haga piruetas y reparta golpes a diestra y siniestra, o que con balas calibre 11 se logre explotar un tanque de guerra, o que el monstruo inenarrable puedas demoler paredes, pero no pase la puerta. Se debe tener en cuenta los límites de la realidad para dar esa sensación de peligro, para que se transmita ese temor de perder la vida en cualquier momento. Se debe tener en cuenta que, durante una pelea las emociones suelen pasar a un segundo plano, el pensamiento racional (a no ser que sea alguien muy analítico, con nervios de acero) baja, la adrenalina se sube, el cuerpo sufre cambios fisiológicos para pelear o huir, las motivaciones se vuelven tan simples como: la rabia, el odio, el miedo.

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