🐍Castigo🐍

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Me encontraba con Malfoy en las afueras del castillo.

-¿Puedes dejar a Potter en paz?Me meterás en problemas- regaño a Draco quien me jalaba de mi brazo.

-¿Asustada Pucey?- ruedo los ojos- solo iremos a ver qué hacen y los acusamos con la profesora McGonagall-

Llegamos a la cabaña de Hadrid y espiamos por la ventana, estaban los cuatro Gryffindor hablando con Hadrid, Harry Potter, Hermione Granger alias la sangre sucia, Ron Weasley alias traidor de sangre y el cobarde de Neville Longbottom.

-¿Y quiénes son ellos?- me asustó por qué Hadrid nos vio espiando su cabaña.

-¡Vámonos!- Draco toma mi mano y jala de ella llevándome de nuevo al castillo.

Corro directo a las mazmorras pero me vuelve a jalar.

-¿Que traes estúpido?- molesta me suelto de su agarre.

-Iremos con McGonagall-

-Estas pensando muy estúpidamente Malfoy, si vamos con McGonagall también nos castigará- vuelvo a caminar pero se pone enfrente de mi.

-Solo por está vez déjame acusar a Potter- ruedo los ojos y corrimos hasta con McGonagall.

-¡Profesora McGonagall! Los de Gryffindor estaban en la cabaña de Hadrid, y Hadrid tiene un dragón que por cierto, lo están ocultando- dice Draco una vez llegando al salón de la profesora.

La profesora McGonagall nos deja sentados a los dos en su salón mientras que llegarán los cuatro de Gryffindor.

Salimos del despacho encontrándonos con Potter y los otros tres más

-Gryffindor tendrá un castigo de menos cincuenta puntos, y le diré al señor Filch que los lleve a con Hadrid para que les den un castigo a los seis- abro mis ojos de sorpresa y veo a Draco con cara de "¿Ya viste lo que hiciste?".

-Disculpa profesora, ¿Al caso la escuché decir... los seis?- Draco da un paso al frente sobre entender muy bien lo que decía McGonagall.

-Asi como escucho señor Malfoy, ustedes por estar fuera de la cama en hora no apropiadas, aunque su intención fue buena, termino siendo lo mismo para usted- Draco fulmina con la mirada a Potter y yo solo ruedo los ojos queriendo que me tragara la tierra.

Filch llegó y nos llevo a los seis a la cabaña de Hadrid y estaba prendiendo una fogata.

-No entiendo cómo cambiaron los castigos, antes se los colgaban de los pulgares para que aprendieran su elección- volteo a ver a Filch esperando a que dijera las cosas de broma, pero todo era lo contrario- ¿Sigues así pero tú Dragon? Superalo y comportate como alguien de tu edad- regaña Filch.

-Me preocupa que le pase algo- acomoda unas leñas al fuego.

-Lamento lo de tú Dragon- dice Hermione.

-Tranquila, ya está en un lugar mejor, solo espero que los otros dragones no lo lastimen, estará en Rumania, probablemente lo vaya a ver y espero a que no me olvide-

- Mi tiempo aquí termino, traje a los niños contigo para que vayas al bosque-

-¿Al bosque? Nadie entra ahí, los estudiantes tienen prohibido entrar ahí, y además hay...- hace señas extrañas- hombres lobo- Draco termina su oración.

-Oh, te aseguro que no nomás te encontrarás con hombres lobos, hay más criaturas que solo eso- Filch se va dejándonos con Hadrid y unas cuantas antorchas para el camino.

«Ya en el bosque»

Caminábamos los cinco con un pequeñas antorchas para iluminar el camino, sentía mucho frío más disimulaba estar bien y sin preocupaciones.

—La misión de hoy, es encontrar a la bestia, desconozco que bestia sea, pero está acabando con los unicornios, bebe de su sangre, la primera pista de está noche— se acerca a un tronco tirada y toca un líquido blanco viscoso—... Sangre de unicornio—

Veo con asco la mano de Hadrid y Draco respinga su nariz

—Bien hagamos equipo, Hermione con Ron, Gwendoline con Neville—

—Aggg...— miro al chico robusto y da una tímida mirada mientras fruncí el seño.

—...Y Malfoy con Harry— Harry asiente y Malfoy se interpone.

—Fangs, prefiero a Fangs— respinga Draco.

—Tal vez se vea aterradora, pero es un cobarde de eso estoy seguro—

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—No me asusta la ocuridad— pega un brinco Longbottom.

—Seguro... Que cochinada es esto, si mi padre se enterará de este nefasto castigo, seguro me saca de está nefasta escuela—

—Ya entiendo porque estás en Slytherin—

—Y yo ya entiendo el porque te  catalogan el cobarde—

—No soy cobarde—

—¡Mira es la bestia!— hago mi cara de horror apuntando a la nada.

—¿¡Dónde!?— Neville da pasos hacia atrás con la cara de susto.

—Patetico— suelto una leve carcajada y sigo mi camino.

Hadrid nos hace un llamado para regresar todos e irnos a las mazmorras.

Noche cansada, aburrida y tediosa, llegó a la Mazmorra y veo a las chicas dormidas en sus respectivas camas, así que me desvisto, pongo mi pijama y me dispuse a dormir.

 ❌CANCELADO❌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora