Capítulo 30: Provocador

2.6K 229 10
                                    

Cuando llegó All Might, se sentaron en una banquillo, por unos cuantos segundo no dijeron ninguna palabra, era un silencio cómodo, hasta que Izuku lo rompió.

Le contó todo, desde como conoció a Shigaraki hasta como llego a conocer a la pequeña Eri, y que necesitaba salvarla.

Su padre no hacia más que escuchar, sorprendiendose de la situación de la niña, entonces en ese momento, su hijo le pidió el Consejo de como rescatarla de aquel infierno.

Toshinori se puso de pie, sujetando la mano de su hijo, y fueron a la UA, donde se reveló la verdad a Nezu, al pasar los días.

Izuku tenía la labor de seguir frecuentando a Eri, para que se sospechara que se planeaba un plan para el rescate. La situación se revelaba con la policía, algunos héroes que tenían pensado en como ayudar, ya que no perdonaban la actitud de Chisaki.

Al pasar ya una semana, donde Izuku y Mirio se conocieron, y por sus actitudes iguales al querer rescartar a la pequeña, se volvieron amigos.

Mirio le contó que ya tenía un Omega marcado, y que era un héroe que ayudaría, fue ahí donde conoció a Tamaki, un chico algo tímido, y muy hermoso Omega, también conoció a Negire una beta muy linda y aniñada, era un grupo raro pero se complementaban tan bien, recordó a Uraraka e Iida.

Al pasar ya una semana y media, se pensó en el plan, todos ya conocían a la pequeña Eri, por medio de fotos que Izuku le tomaba, para que no hubiera malentendidos al momento de reconocerla, todo estaba tan bien planeado.

Justo ahora era una tarde donde conversaba con la peliplata, el pecoso adoptó una manía de acariciar la espalda y su cabello, de manera suave, mientras la niña escuchaba lo que el peliverde decía, todo era tranquilo, Eri ya había comido, estos días recobró la masa corporal, ahora tenía unas lindas mejillas, y las ojeras se perdieron un poco.

Pocas eran las veces que la niña hablaba pero iba cogiendo más confianza, era tan cómodo.

Pero alertó el sonido de una alarma a lo que el pecoso dedujo que provenía de su celular, indicando que era la hora de irse, ya que mañana salvarían de una vez por todas a la pequeña.

Siguió acariciando a la niña, hasta que la recosto en su cama, haciendo que esta se duerma, luego de algunos minutos, se decidió abandonar el lugar.

Chisaki no siempre estaba cuando entraba, pero cuando salía la mayoría de la veces se encontraba ahí, como ahora que lo miraba con un ligero toque de contento.

Chisaki: Mañana dedujo que vendrás ¿verdad?.

Izuku: Si lo haré, mañana tengo el día libre así que estaré temprano aquí. - respondió caminando a la salía, mientras el contrario le seguía por detrás.

Chisaki: Desde el primer día que te ví, me atraiste un poco. - comentó caminando a la par que el contrario.

Izuku: Me halaga lo que me dices.- habló algo incómodo por la situación.

chisaki: Pues dejame decirte que me atrae el aroma que tienes. - soltó acorralando al pecoso, que lo miro sorprendido.

Izuku: Me tengo que ir. - dijo poniendo sus manos en el pecho del contrario tratando de apartarlo.

chisaki: Me provocas mucho, si te tengo, seria la envidia de Tomura. - con su mano saco el accesorio de su boca, dando vista al rostro del Alfa, quien no perdió el tiempo el recorrer su nariz por el suave cuello del peliverde, quien inquieto, se removió un poco.

Izuku: Me tengo que ir. - repitió dando un fuerte empujón a Chisaki y corrió hacia la salida, con la respiración agitada, tanto por los nervios como la pequeña corrida.

Dejando a un Chisaki muy excitado y necesitado.

.
.
.
.

ꉔꄲꋊ꓄꒐ꋊ꒤ꋬꋪꋬ...

El Omega Mas DeseadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora