ANXIETY ; KTH&JJK

cuarenta

Los tres mayores entraron a la habitación en preocupación, desconcertados por la repentina desaparición de Jungkook y Tae.

Dieron unos cuantos pasos en la habitación ya oscura, encontrándose con dos abrigos botados junto a la cama, las cortinas abiertas permitiéndole a las estrellas alumbrar la habitación, y sobre la cama ya desordenada, Jungkook dormía profundamente sobre el torso desnudo de su Tae, quien aún mantenía sus manos sobre las mejillas del menor.

Los tres rieron bajito por la escena.

"Se les ha pasado la hora" susurró YoonGi.

"Ellos en serio se extrañaban" agregó SeokJin.

Hoseok se acercó, y entre caricias los despertó

"Ya deben comer o morirán desnutridos" les dijo con una sonrisa.

Jungkook se levantó de a poco, recibiendo nuevamente la mirada de Tae sobre su cuerpo.

"Arréglense, los esperaremos en casa" dijo YoonGi para ir de vuelta al apartamento junto a los otros dos.

TaeHyung rió.

"Bebé, ¿qué hora es?" Dijo con esa voz ronca que ahora parecía hasta raspar su garganta.

Jungkook alzó los hombros, confundido.

"Ten, si quieres podemos bañarnos de nuevo en tu casa," volvió a hablar, riendo mientras estiraba su brazo con la polera del castaño en mano.

"¿Dónde dormirás hoy?" Preguntó Jungkook.

"Aquí obvio, es el hotel en el que pretendía quedarme hasta encontrar un apartamento" se le escapó.

Jungkook abrió los ojos como platos, Tae se arrepintió de hablar, había arruinado la otra sorpresa.

"¿apartamento?" Murmuró.

"Me trasladaron a Busan, pedí traslado, y me lo han dado" dijo alegre, y Jungkook, como hace un rato, cayó abrazado sobre Tae, junto a una de sus sonrisillas mientras se acercaba más y más a él.

"Por qué no me lo habías contado" reclamó.

"Debía ser una sorpresa pero acabo de meter la pata" habló bajito.

"¿Eso quiere decir que estarás aquí por el resto del año?" Preguntó emocionado.

"Claro, hasta que acabe el año" le confirmó, resbalando uno de sus dedos desde el entrecejo hasta la punta de la nariz del contrario, recibiendo un suspiro por parte de este.

"Tengo hambre" admitió, rompiendo el ambiente, TaeHyung rió.

"Entonces vamos, a demás ya es tarde, y quiero hacer cosas contigo mañana" le dijo, tomando su cabeza entre sus manos y besando rápidamente sus labios, Jungkook no podía estar siendo más mimado.

Los dos se levantaron y Jungkook se encargó de ordenar un poco el desastre que tenían.

Se abrigaron y salieron, puesto a que por las noches las calles de Busan eran notablemente más frías.

Jungkook no se soltaba del brazo de TaeHyung, así también aprovechando de esconderse cada vez más detrás de él ya que los cruces peatonales estaban llenos de chicos y adultos paseando como día viernes que era.

Una vez ya en el apartamento, los chicos los recibieron con la comida servida sobre la mesa, por lo que no tardaron en devorar cada trozo de carne y todo granito de arroz que hubiera dentro de los platos.

"nos ha llamado hace un rato" inició YoonGi, ganándose el susto de Jungkook y el desconcierto de Tae.

"Ha dicho que te debes ir de aquí, Jungkook" y el castaño parecía creer que era una broma, pues no podían estar siendo tan directos, justo el día en el que su Tae había llegado.

"De quién hablan..." Preguntó TaeHyung, pero Jungkook lo tomó del brazo, intentando decirle que se detuviera un poco.

"Qué les ha dicho" murmuró.

"Que si el ha ayudado a tu hermano, tu deberás ir con su familia como paga, dijo que allí te darán una vida mejor" habló Hoseok.

"Pero no lo ha salvado, no sería una paga, y no quiero ir con él, si no están ustedes no quiero, aquí es mi casa, aquí están mis cosas, no es justo" se enojó, alzando poquito la voz.

"Jungkook, está haciendo trámites legales, nosotros no te adoptamos, solo somos amigos y eres menor de edad" repitió YoonGi con seriedad.

Pero el menor negaba, y seguía negando, hasta que cayó da la silla y cuando volvió a abrir los ojos, estaba tirado en el suelo, a un lado de la cama de hotel de Tae mientras él ya nombrado lloraba agarrándole la cabeza como si su vida dependiera de eso.

Salió de su burbuja.

Había sido una pesadilla.

La mirada de cachorro de Tae se colgó de la suya, y de un momento a otro ya lo tenía encima mientras susurraba cosas en su oído.

"no respirabas, y tus manos temblaban, creí que morirías, dios" ahora hablaba desgarrado sobre su pecho, secando sus lágrimas con sus manos húmedas.

Dirigió una de sus manos a los cabellos marrones del chico sobre el, y solo se dio el tiempo de acariciar parte de su cabeza para después sentarse.

"Fue una pesadilla,. solo fue una pesadilla" aclaró, secando las lágrimas del contrario, quien ahora dejaba su cabeza en su regazo.

Ahí a Jungkook se le vino una carga de conciencia, ya que si Tae estaba dispuesto a ser su novio, tendría que sufrir día y noche viendo sus problemas sicológicos, y no era justo.

"Por favor no llores, en serio estoy bien" habló, encajando sus manos con el contorno de su rostro y acariciando parte de este con sus dedos

O tal vez sería Tae quien se aburría antes de que el le dijera que no sería justo que sufriera por el.

"mi amor... detente" seguía diciéndole, pues no entendía por qué lloraba así, si ya estaba bien, si estaba despierto.

Ahora sabía qué tal vez le rogaría por nuevas oportunidades.

"Tranquilo, respira" susurró contra el oído del mayor, dejando suaves besos en su mejilla.

O rogaría para que no le dejara, para que lo acompañara hasta que lograra mejorar, aunque sintiera su corazón partirse por hundir a su Tae al fondo de ese océano sin salida del que necesitaba salir a flote, junto a él.

A pesar de que sus manos estaban húmedas y sentía su cuerpo doler, tomó a Tae entre sus brazos y lo dejó nuevamente sobre la cama, viendo cómo se retorcía en un llanto que parecía no tener fin. Se acostó junto a él, y por primera vez, lo protegió de sus sentimientos quebrantados, por primera vez lo vió romperse frente a él, solo por una razón... él.

Sería difícil, pues los dos se necesitaban, y estaban creando fortaleza tan rápido como pudieran permitírselo para seguir bien juntos, y para seguir refugiándose entre los dos.