Entre balas.

17.

HUGO.

Cuando recibí el llamado de que la habían atrapado el corazón se me escogió. Esperaba este momento, pero aún así estaba nervioso. Empecé a ver que su localización empezaba a moverse, así que nos pusimos rumbo a ellos haber donde iban a llevarse. Mucho me sorprendio cuando la enganche, estaba sola, huyendo, sabía que era una mina inteligente. Asustada corrió a mi y active el plan que seguía. Le di un agua que tenía algo para que se duerma por un tiempo, no podía decirle nada por ahora, tampoco quería escuchar sus preguntas en el camino. Llegamos a una casa, fuera de la ciudad, allí había más hombres esperándonos cuidando él lugar, se venía la parte más jodida del plan y rezaba porque todo salga tal y como lo esperábamos. La subí hasta la habitación y la deje en la cama, la acaricie delicadamente, me había prometido contarme la verdad a penas llegáramos, aunque yo a esa verdad ya la sabía. Una llamada me estaba entrando, deje la pistola en la mesita de luz y salí a atender, era Jesús. Media hora después entre me llevé una gran sorpresa.

Quien eres, dímelo ya.- dije apuntándome.

Baja eso Eva.- solte levantando las manos.- no soy malo, no soy uno de ellos.- dije tratando de acercarme a ella.

Quédate quieto.-  me grite y lo hice.- ellos quien.- pregunto.

El zurdo, el narco que mató a tu padre.- dije y me miro fijo.- soy Hugo, un especie de detective. Tu padre hablo con mi jefe Jesús, antes que pasara todo se puso en contacto con nosotros, mi misión desde ese día era protegerte.- solté botando toda la verdad.- estoy a tus espaldas hace mucho tiempo, se todo de ti, más de lo que piensas.- ella solo me miro y sus ojos estaban aguados.

Entonces no fue casualidad encontrarte cuando escape.- negue de inmediato.- ni cuando nos conocimos.- susurro.-claro que tonta.- soltó y tiró la pistola rapido en la cama para luego sentarse en ella, rápidamente la agarré.- por que.- pregunto mirándome.

Por qué, que.- dije sin entender.

Porque jugaste conmigo.- solto de repente, no era verdad eso.- yo te entregue mi corazón, me enamore de ti.-me dijo con la voz entre cortada.- y resulta ser que todo era una mision.- soltó con algunas lagrimas.

No no, Eva.- solte rapido sentándome a su lado.

No te me acerques.- dijo con odio.

Mi cariño hacia a ti es real y puro.- dije sincero.- cada beso, cada caricia, cada noche juntos fue real.- solté mirándola y ella también lo hizo.- yo no debí, yo.. yo solo debía hacer mi trabajo pero me enamore de ti.- sonreí mirando el piso.- empecé a conocerte, a pasar mi día a día contigo y no pude controlarlo.- la volví a mirar.- sabia que cuando te enterarías ibas a pensar esto pero no es así, créeme.- solté y ella miro sus manos.- te amo y mi amor por ti es real y por eso me dolió tanto cuando me dejaste aun sabiendo que iba a pasar.

Ya creí en ti y mira con lo que me sales.- soltó dolida.

Yo tampoco debería creer en ti entonces.-dije y volvio a mirarme.-tampoco me dijiste la verdad.- solté y seque algunas de sus lagrimas.

Pero es distinto Hugo.- murmuró y negué.

Es lo mismo, nada más que desde distinto lado, pero ambos ocultamos información y por el bien del otro.- solté y ella hizo una mueca.- Eva..

Que va a pasar ahora.- pregunto mirándome desesperada.- que va a pasar con ellos,  van a volver a encontrarme.- soltó y suspire.

Ya han llegado.- solté mirando mi móvil, ella me miro paralizada.

Me has entregado.- solto y guarde la pistola cuando me pare.

Vas al baño, corres el mueble, allí abra una escalera que te llevará a un sótano, te quedas allí y no sales por nada.- solte decidido, el plan empezaba.

Que.- pregunto.- qué vas hacer.- dijo mirándome fijo, estaba asustada.

Terminar con esto de una maldita vez.- dije.- vamos.- dije y agarro su mano para llevarla al baño.

No Hugo.- dijo tratando de soltarse.- te van a matar, tú no, por favor.- dijo empezando a llorar.

No va a pasarme nada, tú solo métete allí y no salgas.- dije mientras corría el mueble.

No voy a dejarte, no.- solté decidida y la mire.

Eva, escúchame.- dije agarrando su cara.- tendré refuerzos, estaré bien, luego vendré por ti.- solté y nego mirando el piso.

El me dijo lo mismo, jamás nos volvimos a ver.- soltó llorando.- no quiero perderte.- dijo con la voz quebrada y mi corazón se rompió.

No vas a perderme.- solté acariciandola.- pero por favor entra allí.- asistio y estaba por entrar a bajar las escaleras. Me miro y vino rapido hacia mi para besarnos tiernamente.

Prométeme que volverás por mi, que terminarás con esto y seremos felices, juntos.- soltó con su frente apoyada en la mía.

Te prometo volver por ti, te doy mi palabra.- solté y asistio mirándome.

Te amo.- dijo acariciando mi mejilla.

Te amo.- sonrio y deje un corto beso en sus labios.- ve.- solte y se fue para meterme en aquel sótano.

No era cualquier sótano, estaba todo preparado para que ella se quedara allí y cómoda. Volví a poner el mueble en su lugar y fui a prepararme. Coloque bien mi chaleco antibalas, respire y nos empezamos a posicionar. Ya estaban aquí, tal y como lo habíamos planeados. Todos estaban esperando su turno para salir en aquel plan, yo solo quería que terminara todo esto y que termine bien. Fue en un segundo cuando empezaron los disparos, era una guerra y para mí estaba en juego lo más valioso de mi vida.