32.

1K 68 4
                                    

Otro día más, otras horas más, un mes más, sin él. Era complicado, pero poco a poco iba asimilando. Asimilando que esa promesa que me hizo Hugo no iba a cumplirse y no, no lo culpaba el no poder cumplir, solo debí asimilar que no volvería a ver jamás a mi hijo. Mi primer hijo y sin querer sonar egoísta, el único. No sabía si iba a poder volver a tener un hijo, no podía, sentía miedo y no estaba preparada psicológicamente tampoco.
Estoy sentada en el patio, disfrutando del pedazo de día que hace. Estábamos entrando al mes de junio y el calor empezaba a sentirse. Hace unas semanas volví a diseñar, por fin iba terminando unas ideas nuevas, me ayudaba a poner mi cabeza en otro lado.

Amor..- escucho de fondo y giro mi cabeza.

Te vas.- pregunte rara mientras se acercaba a mi.

Si.. debo ir a revisar unas cosas.- soltó y parecía nervioso o tal vez yo estaba mal.

Dijiste que no me dejarías sola hoy.- hice puchero y se agacho delante mío.

Lo se, lo siento.- dijo acariciando mi mejilla.- voy hacer todo lo más rápido y vuelvo contigo.- soltó sonriendo.

Vete tranqui, no pasa nada.- solté sonriendo y se acercó a besarme.- cuídate.- solté mientras se iba.

Te amo.- grito y reí, no iba a contestarle ya estaba lejos.- ey.- lo volví a escuchar y me giré, estaba apoyado en el marco del ventanal.- te amo te dije.- soltó y reí.

Yo te amo a ti mi amor.- le solté y le tiré un beso.

Ahora si, adios.- soltó y se fue corriendo.

Negué riendo y volví a concentrarme en aquellos dibujos. Sam me llamo así que en minutos había llegado a pasar la tarde conmigo.

Nos podríamos ir de vacaciones, deberíamos organizar algo.- soltó y asistí de inmediato.- con nuestros chicos o solas.- pregunto pícara.

No se, cómo tu lo prefieras, pero me gusta la idea la verdad.- solté.- necesito salir de acá, respirar otro aire.- dije.

Entonces hugo también se lo merece, podríamos quedar en comer juntos y organizamos junto a fla, que te parece.- solto.

Me parece genial amiga.- dije y agarré su mano.- Gracias.- me miro rara.- tu y fla han estado muy pendiente de nosotros, son unos grandes amigos.- dije y sonrió.- te quiero mucho.- solté.

Y yo te quiero a ti, para eso estamos los amigos, nada que agradecer tonti.- soltó y reí.

Nos pasamos toda la tarde juntas, entre charlas y diseños. Porque aunque queríamos jamás podíamos parar de trabajar, siempre se nos ocurría algo. Luego se fue y subí a ducharme, pero antes hice una parada, la puerta estaba abierta. Entre y todo olía a nuevo aún, los detalles que le habíamos preparado estaban allí, creía que le hubiera encantado su habitación aunque fuera un bebé. Me siento en un pequeño sillón qué hay ahí, luego de agarrar una prenda del cajón. Prendas que jamás iba a usar, tan chiquitas que daban ternura y no sabía cómo un bebé podía caber allí.

Amor volví.- escuché y rápidamente guardo todo, miro una vez más y cierro la puerta.- opaaa.- soltó cuando nos chocamos en la escalera, estaba por bajar cuando el ya había llegado arriba.

Hola.- solté sonriendo y bese sus labios.- todo bien.- asistio al separarnos.- justo estaba por irme a duchar.- solté dándome vuelta y camino hacia la habitación.

Acaso es una invitación.- dijo abrazandome por atrás mientras enterraba su cara en mi cuello.

No necesitas invitación.- solté canchera.

Mmm.- soltó y reí mientras entrábamos al baño.

Que te pasa.- pregunte, ya estábamos por salir de la ducha.

Que me pasa de que.- soltó mirándome mientras pasaba su mano por su cara.

Te noto raro, tus ojos están raros.. hay algo que anda mal.- pregunte.

No no.- soltó de inmediato y hice una mueca.- en serio, nada anda mal.- acaricio mi mejilla.- solo trabajo, demasiado.- soltó y asistí no muy convencida.- salimos.- pregunto.- asi decidimos que comemos.

Vamos.- solté cerrando la canilla para luego empezar a salir.- sabes.. sam me dijo para quedar uno de estos días loa cuatro.- dije mientras me colocaba la bata, el me miro atento.

Hace mucho no hacemos de nuestras cenas.- soltó y asistí con una mueca.- Cuando quiera dile.

Claro.- solté.- pero porque quiere que nos vayamos de vacaciones juntos, los cuatro.- solté.

Me parece buena idea amor.- soltó y salimos para el vestidor.- me gusta.- dijo.

Y estamos en condiciones de pasar unas locas vacaciones.- solté preguntando.

Amor.- rio.- estamos muy bien económicamente.- soltó y negué.

Sentimentalmente digo, no por lo económico.- dije.

Aaah... qué idiota.- soltó y rei.- tu quieres.- pregunto y acaricio mi espalda.- yo te sigo a ti, ya sabes.- soltó sonriendo.

No estoy 100% como antes, pero la verdad que me gustaría.- solté mirándolo fijo.- creo que ambos lo necesitamos.- dije.

Debemos ver cuando igual.- dijo separándose.- creo que se nos va a complicar un poco.- lo mire raro.- pero lo vemos cuando nos juntemos.- y solo asistí.

Nos terminamos de cambiar y bajamos para hacer algo tranquilo de comer. Lo bueno era que siempre entre los dos cocinábamos, cada uno tenía lo suyo, entonces nos ayudábamos bastante para poder disfrutar de una rica comida. Luego nos fuimos directo a acostar mientras mirábamos un poco de tele, pero lo sentía raro y no quería ser molesta.

Qué pasa eh.- soltó mirándome con una sonrisa, yo estaba de costado mirándolo.- qué pasa.- volvió a decir y me rodeo con sus brazos.

No quiero ser molesta.. pero te noto raro, tal vez es cosa mía.- solté sonriendo.

Quédate tranquila, que todo está muy bien.- soltó acariciando mi mejilla.- no hay nada de lo que te debas preocupar.- asisti.

Es qué tal vez.. no deja, nada.- solté y me miro raro.

Sabes lo que quiero.- solto y tan solo mire.- unos besitos me hace falta.- dijo.

Que lastima.. hasta mañana.- solté y me di vuelta.

Mmm.- gruñó y mordí mi labio para aguantar mi risa.- mi beso de buenas noches por lo menos.- soltó pegándose a mi.

Buenas noches.- dije volviéndome a poner de frente a él, pero bese su mejilla, pero muy cerca de sus labios.

Evaaa.- soltó y me apretó fuerte a él.- dame un beso.- dijo y reí negando.- qué malas eres.- soltó entrecerrando sus ojos.

Demasiado..- solté canchera y mordió su labio.- porque no me besas tu.- lo jodi.

No me apetece.- solto y se dio vuelta dándome las espalda.

Esta bien, hablo con tu espalda.- dije.

Empecé a pasar mis dedos por ella, dibujando líneas imaginarias. Me acerque más para dejar besos, un recorrido de besos.

Buenas noches mi amor.- solté cuando llegue a su cuello. Lo escuché suspirar y se dio vuelta rápidamente dejándome debajo de él.

En serio eres mala.- soltó mirándome y reí.

Se acercó rápidamente para besarme. Con sus besos, sus caricias, sus gemidos me hizo olvidar todo lo malo que pasaba por mi cabeza. Todo estaba bien, me lo hizo saber.

Entre balas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora