Entre balas.

23.

HUGO.

Eva había subido hace unos minutos porque quería ir al baño, así que termine de secar yo sin problemas claramente, ya que siempre hacíamos todo los dos en la casa. Apago las luces mientras camino hacia la escalera, entro a la habitación y me la encuentro sentada en el piso, su espalda apoyada en la cama y mirando hacia el ventanal que teníamos.

Qué haces.- solté sacándome la remera, tal vez estaba pensando algo de trabajo, pero al acercarme me di cuenta que no.- amor.- dije agachándome delante de ella.- qué pasa.- agarré su mentón para que me mire, sus lagrimas ya estaban mojando su cara.

Tenemos que hablar.- susurro y no se porque me dolió todo.

Qué pasa, me estás preocupando.- solté y me senté delante de ella.

Hugo, yo..- soltó y jugaba con sus manos nerviosas, mi mirada estaba fija en ella, tenía miedo por lo que vaya a salir de aquella boca.

Amor.- agarré sus manos.- qué pasa.- solté inquieto.

Es que.. estoy.. estoy embarazada.- solto y creo que mi corazón se paro por segundos.- segun esto tengo un mes y medio.- dijo nerviosa sacando dos test de su espalda.

Es en serio.- solté con mis ojos aguadas y ella asistio mordiendo su labio.- mi amor, por dios.- dije gritando con lo poco que me salía la voz.

Me abalancé sobre ella para abrazarlos fuertes y llenarla de besos. Abrazos, con nuestras lagrimas cayendo de felicidad, ambos queríamos, eso lo sabía.

Estás feliz.- soltó quebrada y la mire.

Demasiado mi amor, muy.- solté sonriendo y ella me imitó.- me acabas de hacer el hombre más feliz del mundo, más de lo que era.- acaricie su mejilla.

Tu, estás feliz.- le pregunte y sonrió mirando hacia el piso.- qué pasa.- solté acariciando su cachete.

Tengo miedo.- soltó y me miro.- y sino logro hacerlo bien, sino soy suficiente para él o ella.- soltó con sus lagrimas y me morí de ternura.

Yo también tengo miedo.- rei nervioso.- pero vamos aprender juntos, va hacer nuevo para ambos.- suspire.- no sabes lo feliz que estoy, te amo tanto.- dije.

Juntos vamos a poder.- sonrio.- te amo también.- rio mirándome.- no puedo creerlo.- nos volvimos abrazar y la guardé en mis brazos.

Allí nos quedamos un rato, riendo y acariciandonos, ninguno podía creerlo, nos pusimos a sacar cuentas para ver si fue en algún lugar en especial.

Buenas noches.- soltó. Ambos estábamos acostados mirándonos, acaricie su cintura.

Buenas noches mi amor.- dije llevando su pelo hacia atrás y bese su nariz.- puedes ponerte boca arriba.- solté y lo hizo mirándome rara.

Fui hasta el filo de la remera que usaba para dormir. La subí y pase mis dedos por su panza que por ahora era plana. Su piel se erizo, lo noté y la mire sonriendo. Deje un beso en aquella panza, donde nuestro hijo ya estaba desarrollándose. Luego baje la remera y fui hacia su boca para dejar un tierno beso allá para luego acostarme a su lado y abrazarla para dormir.

Desde esa noticia habían pasado días, donde chequeamos con el médico, donde les contamos a nuestros amigos y familia, donde cada día era ansiedad porque los nueve meses pasen rápido. Hoy estábamos en diciembre, había entrado en los cinco meses y la panza ya se hacía notar. Había pasado mi cumpleaños y navidad, había sido hermoso, era como todo distinto. Ahora mismo nos encontrábamos para recibir el Año Nuevo.

Me veo gorda.- suspiro tirando el vestido a la cama y se sentó en ella. Últimamente se frustraba por nada pero la entendía.

No estás gorda, estás embarazada.- dije poniéndome frente a ella.- y sos la embarazada más linda del mundo mi amor.- solté y vi aparecer una sonrisa en sus labios.

Es que..- soltó mirándome y suspiro.

Escucha.. sino te gusta como te queda porque no te sientes cómoda busca otra cosa mi amor.- dije mirándola.- aunque a mi con cualquier cosa que te pongas me pareces hermosa, pero tu debes estar cómoda con lo que te pongas, si.- solté mirándola y asistio.

Gracias.- dijo con una mueca y acaricio mi mejilla.- seguro encuentro algo que me guste.- soltó mirando el vestidor.

Sino encuentras allí algo que te busque entonces no se.- solté y reimos.- te amo.- bese sus labios.- voy abajo a terminar de colocar las últimas cosas.- solté.

Voy con v..- y negué de inmediato.

Tu cámbiate tranquila, ahora vuelvo.- dije y deje un corto beso para luego salir.

Todos vendrían a casa ya que navidad no fue aquí. Termine de ver sino faltaba nada para luego subir. Ella estaba mirándose al espejo acariciando su panza, la abracé por atras y puse mis manos encima de las de ella.

Estás hermosa.- solté y deje un beso en su cuello. Se había puesto un palazo blanco con un top y arriba un saco de vestir del mismo color.

Tu también, demasiado guapo.- soltó mirándome a través del espejo y mordí mi labio.- nos hacemos unas fotos.- soltó y asistí pasándole mi móvil.- pero luego me las pasas, porque te las quieres dejar solamente para ti.- reimos.

Lo prometo.- solté y asistio enfocándonos.

Luego termino de arreglarse y bajamos. Nuestros invitados empezaron a llegar, la cena empezó. No podía dejar de mirarla, el embarazo en ella le sacaba un belleza en especial. A mi me parecía hermosa hasta cuando estaba durmiendo. Me la pasaba mucho tiempo mirándola, hasta que se deba cuenta y dejaba de hacerlo. También la pasión había creció, supongo que eran las hormonas. Aún no sabíamos que iba hacer, ninguno prefería un sexo, solo que venga sano. Los primeros tres meses fue difícil, muchos vomitos, pero ahora ya lo llevaba mejor. No importaba la hora, yo estaba allí para sostener su pelo y relajarla. Solo tuvo un antojo por ahora, la miel. Le ponía miel a todo, hasta se bajaba el pote. Eso fue solo un día, le iba hacer mal así que solo le compre un tarro chico. Aunque al principio me odio, luego lo entendió y me compro con besos. Su humor siempre era bueno, ella seguía con su vida normal, supongo que porque aún podía hacer de todo, cuando la panza crezca más iba a tener que parar un poco.

Amor.- dijo acariciando mi mejilla y le presté atención.- vamos a brindar ya.- soltó y mire mi reloj, iban hacer las 00.

Si claro.- dije levantándome y agarro mi mano.

Todo bien.- pregunto mirándome fijo con aquellos ojos azules.

Si.- sonreí.- te amo.- deje un corto beso.

Yo a ti.- soltó sonriendo y me soltó para irnos por el champagne.

Servimos las cosas, salimos al patio a pesar del frío, pero queríamos ver la pirotecnia. La abracé por atrás mientras charlábamos con nuestra gente, un fuerte ruido nos hizo callar, los fuegos artificiales empezaron, eso quería decir que habíamos entrado en un nuevo año.

Feliz año, los amo mucho, me hacen feliz, demasiado.- solté y sonrió mirándome para luego besarme.

Nosotros te amamos a ti.- dijo separándose a penas de mi y acaricie su espalda.- Estoy feliz de que sea otro a tu lado, feliz año.- dijo y volví a besarla.

Que locura, este año tendremos compañía.- dije acariciado su panza.

Es una locura.- soltó sonriendo mientas me miraba.

Feliz año gente.- soltó sam gritando y nos sacó de nuestra burbuja. Reimos para luego chocar nuestras copas entre todos.