Entre balas.

33.

HUGO.

No podía soportar más mis sentimientos, ni mis lagrimas. Una corriente recorría todo mi cuerpo, aun pensaba que era mentira. Con los nervios a flote ayer salí de la casa para hacerme los análisis, los cuales ya estaban los resultados, era positivo, era compatible. Y claro que lo sabía, lo sabía desde el minuto uno en que lo vi, no había chance que no lo sea. Tenía rasgos más de ella que míos y me encantaba. Aún así sus ojos se tiraban para el verde, como los míos. Su pelito rubio y su piel blanca.

Hugo..- soltó Jesús y lo mire.- ya pueden irse a casa.- sonrio y lo abracé contento.

Te debo tanto, muchas gracias.- solté y el nego sonriendo.

Él había movido todo para poder encontrarlo. Lo tenía una familia normal, que no podían tener hijos, aun así es imperdonable lo que hicieron. La enfermera fue presa, por venta de chicos. Aparte del nuestro había echo otros manejes, que Jesús también quiso trabajarlo junto a la policia y poco a poco iban recuperándolos. Tratamos de hacer todo nosotros cuanto a papeles, Eva aún no sabía nada y esperaba que viva cuando lo vea. Mi chica, ya no iba a ver más días negros, ya todo iba hacer felicidad. Lo subo a su sillita en el auto, está dormido y la está estrenando. Manejo y cuando puedo lo miro por el espejo, aun no puedo creerlo,ni tampoco sé cómo actuar al llegar a nuestra casa.

Hermosa, estoy manejando.- suelto al atender en altavoz.

Bueno mi amor, voy hacer rápida.- soltó.- llegaron unas cosas mal, no voy a poder almorzar contigo.- dijo y me puso feliz, solo por esta ocasión.- supongo que entre una hora estaré o dos.

Tú has tranquila, no importa, a la noche podemos salir.- le dije. Habíamos quedado que la pasaba a buscar para almorzar y le daba la sorpresa, mis planes cambiaron.- aunque trata de no tardarte mucho, te necesito en casa, hay algo que debo contarte.- solté con mi sonrisa.

Esta bien amor.- solto.- te amo, luego nos vemos.- soltó y me corto, ni tiempo a contestarle.

Aparco afuera de casa, el sigue durmiendo. Bajamos y entramos, no sé qué hacer con él. Ya le había dado una meme antes de venir, supongo que está vendría a ser su siesta y no iba a levantarse. Subimos, lo dejo en nuestra gran cama y muchos almohadones a su alrededor. Mientras voy a su habitación y veo que todo esté en orden. Luego vuelvo y él sigue allí, durmiendo. Me acuesto a su lado, solo me dedico a mirarlo por un rato largo. No sé cuánto tiempo pasa, sus ojos empiezan a moverse y me pongo al frente de él.

Hola campeón.- suelto acariciandolo.- qué pasa eh.- le digo agarrando su manita y tan solo me mira.- qué.- le digo sonriendo y acaricio su cara, él sonríe y patalea.- qué hermoso eres.- suelto y beso su frente. Escucho el ruido de la puerta, ha llegado el momento.- quédate quieto y en silencio, un Segundo por favor.- le digo rápido y solo me mira. Me levanto y me la encuentro en la puerta.- hola mi amor.- sonrio interviniendo en su paso.

Hola amor.- soltó y beso rápidamente mis labios.- no sabes estuvimos..- y quiso pasar y no la deje.- qué pasa, quiero pasar.- rio y negué.

No.. porque no vas abajo y yo ahora voy.- le dije y me miro.

Hugo qué pasa, porque no quieres que pase.- soltó y su rostro me iba mostrando su cabreo.

Eva.. no puedes.- dije.

Porque, quien está, que hiciste.- dijo y negue.- déjame pasar, que me dejes.- me dijo enojada.

Si tanto insistes.- dije sonriendo y le di paso.

Que hicis..- y se callo parándose en seco.- Hugo..- soltó con un hilo de voz y sonreí yéndola abrazar por atrás.- es..

Es él, Santi, nuestro bebé. Ahora si, estamos juntos los tres y para siempre.- le susurre mientras ella llevo sus manos a su boca mientras sus lagrimas caían.

Hola mi amor.- dijo agarrándolo despacio.- hola.- volvió a decir y el tan solo la miraba.- qué lindo sos.- dijo acariciandolo un poco.

La facha de papá.- dije agachándome al frente de ellos ya que ella se sentó en la cama.

No puedo creerlo, me tiembla todo el cuerpo.- dijo mirándome con una sonrisa y seque sus lagrimas.

Pues créelo, porque ya está con nosotros.- dije mirándola sonriendo y luego lo mire a él.- los amo y vamos hacer muy felices los tres.- dije y me acerque a besar sus labios.

Te amo demasiado.- soltó al separarnos y volví a dejar otro beso.

Estaba esperándote para que lo bañemos y le pongamos la ropita que tú quieras.- solté luego de un rato.

Esta bien, voy a preparar las cosas, buscas la bañera.- soltó y asistí.

Se levanto con él en brazos y nos pusimos a buscar las cosas. Preparamos el agua y con miedo lo hicimos. Era la primera vez, pero él nos ayudó demasiado, le gustaba el agua y nos lo hizo saber. Al salir lo llevamos a su habitación donde por fin empezó a estrenar su ropita, era todo muy fuerte. El día lo pasamos sin poder dejar de mirarlo. En la noche comimos en casa y luego ella le puso su pijamita.

Puede dormir con nosotros.- pregunto mirándome y me dio ternura.- solo por esta noche, para que no entre en pánico.- soltó y sonreí.

Claro que si mi amor, le ponemos la almohada alrededor como cuidador, así ninguno lo golpea.- dije y asistio.

Juega con él un rato hasta que acomode.- dije y asistí mientras me lo pasaba.

Ella se nos quedó mirando con una sonrisa y luego se fue por las cosas. Acomodo las cosas en el medio de nosotros, luego le dio la leche y lo hizo dormir, yo estaba hechizado ante aquella imagen. Una vez dormido lo coloco y apoyado en mi codo lo mire.

Gracias.- la escuché y alce mi mirada a ella.- pensé que nunca iba a vivir esto, ya tenía asumido que nunca iba a volver a nosotros.- dijo con sus lagrimas.- aun no puedo creerlo, sabía que eras un tipo increíble, pero hoy superaste todas las barreras.- soltó y sonreí.- debo agradecerte también por aguantarme estos meses, se que no fueron fáciles.

No debes agradecerme nada, para eso estoy, para cuidarte y hacerte feliz.- dije y acaricie su mejilla.- es más gracia a Jesús que trabajo duro para tengamos de nuevo a nuestro chiquitín.- dije y sonrio ante ello.- los amo y aun no puedo creer que mi corazón funcione, exploto de amor.- solté riendo despacio.

Los amo.- dijo y me acerque para dejar un corto beso.

No a dormir con mamá y papá, se debe acostumbrar a su cama.- solté y ella asistio. Solo jodia, porque si fuera por mi también dormiría todos los días que quedaban con nosotros.

Hugo..- la mire.- estás seguro que es..- y no siguió porque la interrumpí.

Me hice análisis, 100% positivo la compatibilidad.- dije.

Que boluda, como voy a preguntarte.- dijo y negué.- ya con los rasgos iguales.- soltó.

Y la conexión que tuvo, más contigo.- dije y asistio.

Y era verdad, habían tenido una conexión demasiada fuerte. Nos acomodamos para dormir aunque me costo. Eran muchas emociones fuertes, era como si fuera mentira. Las horas pasaron y lo escuché llorar a lejos.

Te ayudo.- solté cuando la vi preparando la leche. Habíamos traído todo el kits y lo dejamos en la mesita.

Solo entretenlo.- dijo y asistí.

Lo agarré y lo acaricie un rato largo, su boca buscaba desesperado algo, tenía hambre, estaba claro. A los minutos se lo pase y le dio la leche. Me lo paso y lo palmee un rato, ella corrió la almohada a su lado sacándolo del medio. Se durmió a los minutos y ella lo colocó allí.

Extraño dormir a tu lado.- soltó y reí despacio.- duerme.- dijo dándome un leve beso y se dio vuelta.

La abracé por atrás entrelace nuestras manos que rozaban a penas con la de nuestro hijo. Así volvimos a dormirnos por un rato más. La felicidad había llegado entre tanto caos.