━━ ⦗ siren! ⦘
❝ la tierra tiene sed
de sangre y nosotros
tenemos un mar
dentro de nosotros. ❞
███████████ 𝙚𝙣 𝙙𝙤𝙣𝙙𝙚
la vida que una vez conocieron
fue cambiada y niños inoce...
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—¿TODAVÍA ESTÁ INCONSCIENTE?
Newt miró a Minho, que había entrado a la cabaña de los Docs; después de haber regresado del laberinto había escuchado la noticia.—Si, sin cambios.
—No entiendo cómo sucedió esto.
—Se veía agotada esta mañana, dijo que se sintió mareada por un momento, pero me aseguró que estaba bien...—el segundo al mano explicó brevemente, pasando una mano por su cabello con un largo suspiro.
—Si, lo mencioné en el desayuno y ella le restó importancia. Tal vez, no sé, se desmayó debido a la falta del sueño.—sugirió el corredor, acercando una silla y sentándose junto a la cama de su amiga también.
—No, el Nuevito dijo que se estaba agarrando la cabeza, como si tuviera mucho dolor.—Newt dijo haciendo una mueca de dolor al pensar que ella estaba en tal agonía. Verla caer al suelo fue suficiente como para agitar sus nervios.—Ella está escondiendo algo... puedo sentirlo en mis huesos.
Minho no respondió. Solo vio a su amigo hacer círculos con su pulgar en la mano de la chica rubia con ternura; una frustración genuina ensombrecía sus rasgos. Newt generalmente se veía bastante tranquilo y sereno, pero Minho había notado que cuando se trataba de Lorelei, él era diferente.
Un gemido suave, casi inaudible, atravesó el espeso silencio. Los párpados de Lorelei se movieron, apretándose con más fuerza. Sus labios rosados como capullos de rosa se desgarraron cuando hizo el ruido, sus dedos se movieron en la mano de Newt. Ambos chicos se pusieron alerta al darse cuenta de que ella se estaba despertando.
—¿Lori?—el rubio habló en voz baja.
Ella gimió de nuevo, forzando a sus ojos abrirse y entrecerrándolos ante las luz que los golpeaba. Volviendo su cabeza, se dio cuenta de que sus dos amigos estaban presentes.—Hey, barbie.—Minho sonrió, viendo sus labios curvarse débilmente.
—Hey, idiota.
—¿Quieres sentarte?—Newt sugirió, ganando un breve asentimiento en respuesta y Lorelei logró moverse para estar erguida y con las piernas cruzadas. Cualquier pizca que había sentido anteriormente había sido desaparecida, siendo reemplazada por cansancio.
—¿Qué pasó?—ella preguntó, bostezando silenciosamente como un gatito. Fue un momento lindo, pero difícil apreciar además de la tensión en la habitación. Newt y Minho intercambiaron una mirada antes de que el segundo al mando respondiera.
—Te derrumbaste después de correr hacia el Nuevito. Dijo que te sostenías la cabeza con dolor...—Newt respondió, pensativo.—¿Qué está pasando, Lori?
—No sé de qué estás——
—No tiene sentido mentir, Lo. Sabemos que estás ocultando algo, así que solo dinos.—Minho dijo antes de que siguiera mintiendo. Ella suspiró, sus ojos cayeron sobre su regazo.
