✯𝐌𝐢 𝐃𝐢𝐠𝐠𝐨𝐫𝐲✯ 𝚑𝚊𝚛𝚛𝚢 𝚙𝚘𝚝𝚝𝚎𝚛 𝚢 𝚝𝚞

1.03: 𝐋𝐚 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚 𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲 𝐲...𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲

Narras tu:

Caminamos hacia las entradas del enorme estadio de Quidditch, a la entrada de este había filas y filas de vendedores, vendían muchísimas cosas, demasiados recuerdos, había banderines de los equipos e incluso había figuras de los jugadores que podían caminar en la palma de tu mano.

—¡Compre sus omniculares! ¡Lleve sus omniculares! ¡Diez galeones cada uno!—anunció uno de los vendedores.

—Papá, ¿puedo?.—le pregunté con ojitos de suplica

—Claro linda—Corrí disparada hacia el puesto y me acerque al señor que vendía los omniculares

—Quiero dos—dije y saque de mi bolsa 20 galeones.

—Por supuesto señorita aquí tiene—el señor dejó en mi mano un par de omniculares, servían para mirar el partido en cámara lenta o repetirlo si lo quería, le pagué y le di las gracias.

—Mira Ced—le estiré uno de los omniculares a él—podrás mirar el partido en cámara lenta o repetirlo.

—No tenias que gastar tu dinero en mi pero gracias, son geniales—reposo los omniculares en su cabeza y paso uno de sus brazos por mi cuello.—Vamos pequeña—comenzamos a caminar hasta llegar a la entrada donde una bruja indicaba los asientos o sección a cada grupo de personas.

—¡Asientos de primera! —dijo la bruja del Ministerio apostada ante la puerta al comprobar las entradas—¡Tribuna principal! Todo recto escaleras arriba Amos.

Caminamos hasta llegar a la tribuna principal donde papá saludaba a todas las persona del ministerio, Cedric y yo solo sonreíamos cordialmente, unas cabezas atrás pude ver a Hermione y los chicos.

—Papá—el me miró sonriente—¿Puedo ir a sentarme con los Weasley y sus amigos?

—si cariño, tu hermano y yo nos sentaremos aquí, ya sabes, por si necesitas algo.—asentí contenta y caminé con cuidado entre los asientos hasta que llegué al lado de una cabellera castaña en una coleta alta.

—Hola—les dije y me miraron para saludarme—¿Puedo sentarme con ustedes?

—Claro—dijo Ron de un modo amable, mire detrás y vi a una elfina sentada, parecía por sus grandes y redondos ojos que estaba asustada, pobre.

—Pobres, ¿No?—me dijo Hermione

—Si, lo sé.

—No se por que nunca se ha hecho nada por ayudarles.—dijo ella.

Ron sacó unos omniculares y comenzó a probarlos, mirando con ellos a la multitud que había abajo, al otro lado del estadio.

—¡Sensacional! —exclamo girando el botón de retroceso que tenía a un lado—. Puedo hacer que aquel viejo se vuelva a meter el dedo en la nariz una vez... y otra... y otra...

Hermione, mientras tanto, leía con interés su programa forrado de terciopelo—Antes de que empiece el partido habrá una exhibición de las mascotas de los equipos —leyó en voz alta.

—Eso siempre es digno de ver —dijo el señor Weasley—Las selecciones nacionales traen criaturas de su tierra para que hagan una pequeña exhibición.

Vi que Harry había terminado de hablar con la Elfina así que con cuidado de no molestar a nadie me acerque a el.

—Hey

—Hola ____—me dijo el

—También tienes unos—señalé sus omniculares.

—Son geniales—se los colocó—¡Mira! ¡Ahí!—comenzó a reír a carcajadas y me pasó los omniculares poniéndolos en mis ojos, sentí que presionó un botón y enseguida vi a un hombre cayendo de su asiento, comencé a reír pues toda su bebida le había caído encima y tiritaba de frio.