Crisálida

Capítulo X

"Érase una vez una oruga que descubrió que una colonia de mariposas era realmente peligrosa"

Rini

El cielo sobre Abingdon estaba como mi estado de ánimo: oscuro y nublado. Había faltado al trabajo y no me había conectado a LOW en días. Hasta había bloqueado a 69 en mis chats. Pero no podía faltar a clases, ya había echado a perder mi poca vida social en esa escuela, no iba echar a perder también mis notas.

Tal vez me estaba volviendo una completa desquiciada, pero podía jurar que todos me estaban mirando o murmurando a mis espaldas. No sé cuál de las dos era peor, porque si hacían la primera significaba que habían hecho la segunda.

Me dirigí a mi locker a guardar mis cosas y descubrí que mis sospechas eran ciertas.

"ZORRA BECADA"

Alguien había rayado en mi locker con un vibrante color parecido a la sangre. Ni siquiera intente borrarlo, sabía que era un esfuerzo inútil. Había esperado el bullying por ser media nerdy desde el inicio de clases, pero nunca creí que sería por ser una "zorra".

"¿Por qué era una zorra?". Guardé mis cosas y me dirigí a mi aula con velocidad, no le daría importancia.

Los pasillos estaban repletos de alumnos que no dejaban de observar cada uno de mis pasos, una desconocida chocó contra mi hombro de manera intencional haciéndome caer al suelo. Se retiró, no sin antes susurrar lo suficientemente fuerte para que llegara a oírla.

"Perra robanovios"

Ahora sí estaba confundida. ¿Me había vuelto una robanovios sin saberlo? Me levanté y noté que las miradas de burla sobre mí se dirigieron a algo que estaba atrás mío en la distancia, pero en este caso las miradas eran de admiración. Me giré y los vi caminando en mi dirección tomados de la mano.

Tim y Daisy.

Sentí como el oxígeno se volvía escaso, mis piernas reaccionaron antes que mi cerebro y me moví apresurada. Estaba aturdida y mi pobre corazón se quería separar luego de apenas ser unido con algo de cinta adhesiva. Una gran cantidad de susurros se hicieron notar a mi alrededor.

"¿Cómo pudo haber creído que le podía robar el novio a Daisy?"

"...y era su amiga, ¡Daisy incluso la invitó a su mesa!"

"Dicen que intentó besarlo aún cuando él se negó"

"Qué se podía esperar de esa basura becada"

"Basura"

"Robanovios"

"Zorra becada"

"Perra"

Llegué al aula y me senté en mi sitio tratando de ponerme a salvo, sin embargo sabía que la situación no iba a mejorar. Tim y Daisy terminaron de destruirme socialmente en esta escuela. Era por mi declaración, ese estúpido choque de labios que nació de la desesperación. Porque a eso no se le podía llamar beso, no duró ni dos segundos.

Nunca más sería bienvenida en ninguna área de toda la academia.

Ella lo logró. No necesito de mucho, me tuvo donde quiso, me llevó al límite y luego me lanzó por el barranco.

Lucas me advirtió, no le hice caso y ahora no estaba aquí. Daisy sabía, ella había estado saliendo con Tim y me orientó a declararme solo para que me rompieran el corazón y luego hacer que toda la escuela me humillara. Me puse en bandeja de plata, con una manzana en la boca, creyendo todo lo que me decía. No era mas estúpida solo porque no lo intentaba.