Capítulo XVII

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"Érase una vez una oruga que por fin había encontrado su lugar en el jardín...


—Por cierto Evie Mae, nunca me contaste donde pasaste Halloween.

Me dirigía con ella al salón de eventos para el ensayo de la elección de reyes y reinas, faltaba poco más de un mes para el baile y dos semanas para los exámenes. Debido a eso los clubes no competitivos habían paralizado sus actividades para que los maestros puedan brindar los repasos correspondientes.

—Cierto, tú estuviste en la fiesta de Cherry —dijo sonriendo. —Aproveché el feriado largo y fui a pasarla con mi familia, ellos no residen en esta ciudad.

Asentí con la cabeza y cambié de tema rápidamente. Evie Mae era casi tan expresiva como yo, podía adivinar por su rostro que "familia" era un tema que no quería tocar.

Mientras ella revisaba su celular, mi cabeza no pudo evitar volver a mi último encuentro con Alain antes de que el club se paralizara. Habíamos decidido intercambiar números esperando que alguno de los dos le escribiera al otro, sin embargo nada había pasado aún. Evie Mae se detuvo frente a la puerta antes de entrar.

—Oh, Rini. Espero que no te molestes conmigo. —La observé confusa ante su expresión de arrepentimiento. —Te asigne el ensayo para el grupo de reinas.

Aunque un ligero temor se asentó en mi pecho, sonreí. No iba a permitir que ella siguiera afectándome.

—No te preocupes Evie Mae puedo lidiar con eso.

Ella me dio un abrazo en agradecimiento e ingresamos. Los dos grupos de nominados nos recibieron entusiasmados y amigables.

Sí, a mí.

Desde la fiesta de Halloween mi estatus social en la academia había ascendido rápidamente. De ser una paria despreciable, a que me saludaran en los pasillos y me invitaran a reuniones, pertenecer a un grupo me brindaba una extraña seguridad. Luego de que se corriera la voz sobre el "espectacular" evento de Cherry, la fiesta de Daisy había sido catalogada como un fracaso rotundo.

Esperaba no cruzarme nunca más con ella o por lo menos no intencionalmente, sin embargo había sido una de las nominadas a reina del baile. Para mi mala suerte, al revisar a mi grupo me di cuenta que no había llegado, interrumpí la conversación de las otras participantes y pregunté si la habían visto.

—La vi entrando en el baño del lado derecho —contestó amablemente una de las participantes del tercer año, le agradecí y me marché.

"Ojalá gane ella"

No tenía un favorito por ningún bando, aunque claro prefería que no ganara Daisy, sería echarle más leña a una fogata que se podía convertir en incendio. Cherry y Alain no podían participar al haber sido los reyes del año pasado y Lucas acababa de renunciar a su candidatura por la ida de su novia.

Abrí la puerta del baño y me quedé paralizada ante la imagen de Daisy limpiando una herida de su pierna llena de moretones. Siempre me había preguntado por qué utilizaba medias y mangas largas, la respuesta vino al recordar que la gimnasia no era un deporte para personas débiles.

—Veo que la popularidad te sienta bien, Rini— dijo al mismo tiempo que terminaba de arreglarse el uniforme

El tono sarcástico de su voz era palpable, un poco de rabia subió por mi garganta. No hablaba con ella desde la fatídica llamada en donde me incitó a declarármele a su novio, él cual había sido mi mejor amigo y crush por dos años. No iba a caer en su juego nuevamente, sabía que aún poseía cierto poder en la escuela, pero eso no me haría flaquear ni un poco.

CrisálidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora