Capítulo 48

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****Lucy****

Fue 1 segundo, un milisegundo, mis pulmones se llenaron de aire, mis venas se llenaron de sangre, mi cuerpo se llenó de vida otra vez.

Intenté abrir los parpados, me era imposible, eran súper pesados, igualito a levantar 3 elefantes con una mano. Si he sido un poco exagerada,pero mi cuerpo no me permitía ni moverme, me dolía al respirar, al notar como el aire pasaba por mi garganta, produciéndome una molestia infernal. Aunque esa molestia era diferente, parecerá raro pero me gustaba que me doliera, me recordaba a que podía vivir.

-Se está moviendo.- dijo alguien.

-Dios mío, es un milagro.- comentó otra persona.- Era imposible, era una misión imposible.

-¿Lucy?- dijo una voz femenina. No podía contestar, por lo que intenté abrir los ojos.- quitar la luz, le puede molestar.- repitió la mujer. Le agradecí eso, ya que mis parpados se separaron lentamente. Mi vista estaba borrosa, pero podía distinguir, que había varios bultos con batas verdes. Y antifaces blancos en la boca. Seguí abriendo los ojos hasta estar, totalmente despierta.

Miré de un lado a otro, ahora sí que veía bien donde estaba, estaba en un hospital, y por lo que pude contar había 6 enfermeros delante de mí. Observando cada movimiento que realizaba. Abrí la boca para preguntar qué había pasado para que me encontrara  en hospital. Pero solo me salían ruidos extraños. ¿Había olvidado hablar? No, no podía ser.

-No te preocupes Lucy.- me dijo una mujer, acercándose a mi cama.- Sabemos que tienes muchas preguntas, pero no es el momento para hacerlas, te las explicaremos luego. Supongo que te habrás dado cuenta de que, no puedes hablar.- me dijo, y como pude moví la cabeza de arriba abajo. Afirmándole.- Eso es debido, a la anestesia que te hemos puesto estas semanas. Se te pasará en media hora.- dijo con un tono tranquilizador.

-Vaya suerte que tienes, tus padres se han ido hace 10 minutos.- dijo otro enfermero.- Tendremos que llamarles.

-No.- dije a lo que yo misma me sorprendí, volvía a hablar.- Quiebbdjsj.- y de vuelta a quedarme muda. Casi todos se rieron, a lo que me sonrojé, la mujer de antes, me trajo un trozo de papel y me dio un bolígrafo. Comencé a escribir, aunque me era molesto, ya que suponía que estaba llena de moratones y heridas, pude escribir. “Quiero estar sola, un tiempo” enseñé el papel, y todos asintieron, le volví a dar la vuelta y escribí “¿Qué me pasó?” Cuando lo leyeron, me miraron… ¿Con lástima? No se podría ser. Debió ser grabe lo que me pasó, para que no recordara nada.

-Cariño, moriste.- dijo un hombre, después de un largo silencio. ¿Qué? ¿He muerto? ¿Estoy viva? ¿Qué narices ha pasado? Mi cabeza estaba llena de preguntas, pero a lo único que respondí fue a un sentimiento de tristeza, comencé a llorar.-No llores, ahora estas viva.- volvió decir la enfermera. Levanté la cabeza, cogí el papel y lo volvía a enseñar.

-Un coche, te arrolló, cuando estabas en la carretera.- Mi cabeza comenzó a doler, la sujete con mis manos, y empecé a recordar, lo sucedido. Las imágenes de un escenario, gente, por todas partes. Gritando, haciéndose fotos. Intenté recordar quien eran aquellas personas. A mi derecha estaba Rocky, ¡¡¡Rocky!!! Ya recuerdo, estábamos en un Meet&Greet, en el tour, con Magcon. Una sonrisa, se iluminó en mi rostro pálido. Pero al segundo, me volvió dar un pálpito la cabeza, cerré los ojos con fuerza.

 Era un hombre, estaba de espaldas, se estaba haciendo fotos con unas chicas, no podía descifrar quien era, pero debía ser importante ya que la chica no paraba de gritar de alegría. Terminó de hacerse la foto, y se giró hacia mí, me miró, su mirada era cálida, me sonaba mogollón, me sonrió y me guiño un ojo. Y se volvió hacia las demás chicas.

Summer with MagconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora