《Especial 300 vistas: TemaTen.

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Un año después de la desaparición de Yún..

-- Tenten, ¿Por cuánto tiempo más vas a evitarme? --La rubia habló molesta, estando de pie con los brazos cruzados, frente a ella, la castaña soltó un suspiro, bajando la cabeza.

-- Ya te dije que no me parece adecuado que, mientras mi amiga está desaparecida, yo esté coqueteando, estoy preocupada por ella. --Eso último había sido un tanto hiriente para la kunoichi de la arena, se vio perfectamente en la expresión que había hecho. Al instante, Tenten supo que había cometido un gran error.

-- ¿Sabes qué? Tienes razón, te pedí UNA cita, no que te casaras conmigo, pero no voy a seguir rogándote. Estoy cansada de eso. Suficiente tengo con ver como mi hermano se deshace por buscarla, ¡Yo también estoy preocupada! En cada misión fuera de la aldea hago lo posible para obtener aunque sea un poco de información que me ayude, pero tú no ves eso, sólo estás concentrada en TÚ preocupación. --La castaña quiso detener a la rubia, quien se fue hecha una furia, pero tenía razón, se había enfrascado solamente en lo mucho que extrañaba a su amiga, no veía que también Temari resentía la desaparición de Yún.

Golpeó su frente con la palma, había una gran posibilidad de que lo que se pudo dar con Temari estaba arruinado.

Para el colmo, la rubia había acabado sus deberes ahí un día antes para poder estar con ella y gracias a la discusión, quizás ya iba camino a su hogar. Recurriría a pedirle a Tsunade una misión en la aldea de la arena para poder hablar con Temari.

Tendría que ser completamente sincera con la Hokage si quería ser enviada a la aldea de la arena lo antes posible.

Decidió caminar en dirección a la torre Hokage, pensando en que le diría a la kunoichi de la arena, realmente le gustaba, pero se había enfocado en algo que en ese momento estaba fuera de sus manos, si el Kazekage no podía encontrar a Yún ni con ayuda de la Hokage, ¿Cómo podría hacerlo ella sola?

Se preocupaba por su amiga, pero también debía de continuar con su vida, no podía estancarse de esa manera, se enteró de que Shikamaru lo había hecho y era muy duro ver al Nara así, ni siquiera sus padres podían ayudarlo, fue cuestión de días para que el chico se perdiera en el abismo, las pocas veces que había logrado verlo, era como estar viendo a un fantasma o un robot, si lograbas hacer que te respondiera, era sólo con monosílabos.

No, ella no terminaría así.

Iba tan sumida en sus pensamientos que no supo que le hablaban hasta que chocó con Lee, quien la sostuvo antes de que cayera.

-- Tenten, ¿Estás bien? Estaba hablándote y ni siquiera me miraste. --La pregunta le sacó un suspiro pesado a la castaña, preocupando al azabache.

-- Lee, creo que arruiné las cosas con Temari, me cerré tanto por lo de Yún que no vi que la estaba lastimando. --Habló mientras un aura de tristeza la rodeaba, haciendo reír ligeramente a su amigo.

-- Tenten, habla con ella, se completamente sincera, dile que no querías que se sintiera mal, dile todo lo que pasa por esa cabeza tuya y si ella decide no volverlo a intentar contigo, entonces no estaban destinadas a estar juntas. --Esas palabras eran todo lo que la castaña necesitaba para motivarse a pesar de que se había escuchado un poco como Neji. Rápidamente se despidió de Lee para finalmente salir corriendo.

Cuando llegó a la torre Hogake, tuvo la fortuna de ver a Tsunade saliendo de su oficina, quien al ver a Tenten corriendo hacia ella, se detuvo.

-- Lady Hokage.. Necesito.. Necesito ir a la Aldea de la arena.. Por favor. --Un toque de desesperación era notable en su voz. Tsunade se mantuvo en silencio unos segundos antes de sonreír.

-- Es para hablar con la hermana del Kazekage, ¿Verdad? --La castaña se congeló con sus palabras, ¿Cómo es que Tsunade sabía eso? Comenzaba a creer que todos lo habían notado.-- Bien, pero sólo puedo darte tres días, sin contar obviamente lo que tardes en el camino de ida y regreso. Pero partirás pasado mañana, te necesito aquí ahora para una misión. --La castaña sonrió gracias a las palabras de la rubia, la había comprendido.

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Bien, Tenten ya iba de camino a la aldea de la arena, había partido hace aproximadamente un día, sólo se había detenido para descansar a lo mucho tres horas.

Iba lo más rápido que podía, no sabía exactamente porque se sentía con tantas ansias de llegar, pero había dado frutos, ya que después de día y medio de camino, finalmente llegó la aldea.

El primer lugar en el que buscó a la chica, fue en la torre donde trabajaba su hermano, pero al entrar a su oficina lo encontró sólo a él, más delgado que cuando lo vio por última vez.

-- Es bueno volver a verte, Tenten Takagi. Tsunade me informó que venías de visita. --La chica hizo una pequeña reverencia, saludando al pelirrojo.

-- Lo mismo digo, Lord Kazekage. --Bien, no se andaría con rodeos, iría directo al grano, a pesar de tener tres días, no esperaría para poder hablar con la rubia.-- Disculpe, ¿Podría decirme dónde se encuentra su hermana? Es que me gustaría hablar con ella. --La castaña rascó su nuca con algo de nerviosismo, dando un pequeño salto al escuchar una voz tras ella.

-- ¿Para qué me necesitas, Takagi? Ya me dejaste las cosas claras el otro día. --Tenten se dio vuelta, encontrándose con la rubia, quien estaba con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

-- Temari.. Yo.. --Tragó saliva con dificultad, sus nervios comenzaban a jugarle en contra, respiró profundo para poder calmarse.-- Quiero decirte que lo siento mucho, mi intensión no era lastimarte ni nada por el estilo, realmente me gustas, es sólo que me entró mucha frustración al ver que mi amiga no aparecía, sé que es algo que no está en mis manos y sé que tu también te preocupas, quiero pedirte perdón por ser una ton... --Hablaba con rapidez, siendo entendida a duras penas por la rubia, pero la habitación quedó en silencio cuando Temari unió sus labios con los de Tenten. El pelirrojo tuvo que girar su cabeza algo apenado por lo que estaba pasando frente a él. 

-- Hablas mucho, bebita llorona. --Susurró Temari cuando se apartó de la castaña, quien seguía en un pequeño shock.-- Dejemos eso en el pasado. Empecemos desde el día en que supe que sentías lo mismo que yo. Tenten Takagi, ¿Quieres salir conmigo? --La mencionada asintió con la cabeza, tomando la mano de la rubia.

Salieron de la oficina de Gaara, dirigiéndose a casa de la rubia para que Tenten pudiera tomar una ducha y para que descansara correctamente.

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Al día siguiente de la llegada de Tenten, Temari la llevó a comer en el restaurante que, según ella, era el mejor de la aldea.

Las personas que las veían, se sorprendían de ver a una kunoichi de la hoja tan cariñosa con la princesa Temari y viceversa. Los murmuros no se hicieron esperar, la mayoría diciendo que se veían tiernas, aunque algunos estaban en desacuerdo con sus acciones.

Claro que las chicas se percataron de lo que comenzaba a murmurarse, pero no le tomaban importancia, disfrutarían de sus días juntas, ya que quizás no se verían en un buen rato.

Para Tenten había sido muy divertido ver como Temari peleaba con Kankuro porque éste le hacía burla respecto a su cambio de actitud por su presencia, siendo el marionetista quien terminó estampado en la pared gracias al abanico de la rubia.

Aunque no se le había hecho tan divertido recibir las mismas burlas por parte de Lee y de Tsunade cuando volvió a la aldea.

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¡Hola! Sé que no son tantas vistas pero me alegra mucho que la primera historia que estoy publicando éste avanzando, aunque sea un poquito. 

¡Muchas gracias a todas aquellas personas que se toman la molestia de leer Like a cupcake!

Like a cupcake [Shikamaru Nara]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora