Cenamos y subimos nuevamente al cuarto de Taeyong, él siguió estudiando y yo no tenía nada que hacer.
Entonces me dijo que podía darme una ducha y cambiarme así que me dirigí al baño.
Me di una ducha que además me sirvió para despejarme, me puse un chándal que me prestó Taeyong, y salí del baño.
-¿Ya?- preguntó.
- Si ¿Te queda mucho por estudiar?
- No, creo que terminé- se levantó y comenzó a guardar sus cosas en su mochila- ¿Y tú?
- También- caminé hasta la cama y me senté en ella, observándole.
- Daram, ¿Sigues incómoda?
Su voz sonaba nerviosa, y su rostro reforzaba esta emoción.
Me quedé callada pensando.
- No, contigo no, pero con Yuta creo que si, no he hablado mucho con el.
- Siempre estaba recordándote, Yuta, nunca se olvidó. A decir verdad ninguno, nos tomó por sorpresa que el primer día que viniste después de la muerte de Johnny nos ignoraras, pensamos que, quizás, nos abrazarías y llorarías.
- Yo... lo siento.
Taeyong se levantó acercándose a la cama y sentándose una vez llegó a ella. Se quedó mirándome.
Y yo le observé también. Esta vez su pelo estaba peinado hacia atrás, y se había puesto una chaqueta encima de la camiseta. El silencio inundó la habitación, pero no uno incómodo. Nuestros ojos se encontraron, y no los apartamos.
Simplemente nos miramos, nos observamos, como si nuestros ojos estuvieran teniendo una conversación ellos mismos. Provocando algo en mi, un cosquilleo, que empezó en mi estomago y fue subiendo hasta mi garganta.
Una sensación que hacia un año nadie o nada provocaba en mi.
Una sensación que provocaba Johnny.
Pero ahora no es Johnny el causante, es Lee Taeyong.
Debo estar loca, Taeyong es mi amigo, mi mejor amigo.
- Me gustaría ver una sonrisa en tu rostro- Taeyong dijo esto, pero parecía ser mas un pensamiento en voz alta que una confesión directa.
Me quedé callada, no sabía que responder a eso. No lo había notado, pero es cierto, no he mostrado un solo síntoma de alegría, de estar pasándolo bien. Y a decir verdad, no lo entiendo, no es que los chicos no me hicieran sentir bien, pero supongo que no es algo que pueda controlar.
No es un momento muy bueno para estar feliz y sonriente.
- Vamos a dormir- Taeyong me miró, y se acostó en la cama.
Me tumbé a su lado, de espaldas, mirando la pared.
Sentí unos brazos rodearme y acercarme a el. Agradecí estar de espaldas para así no permitir que viera mi leve sonrojo.
- Buenas noches, Nana- susurró en mi oído.
Estuve bastante rato con los ojos abiertos, nerviosa por la cercanía.
¿Nerviosa? ¿por qué? No es la primera vez que Taeyong y yo dormimos así, somos mejores amigos... bueno... éramos. No se que somos ahora, ¿amigos?
Una vez mi corazón latía con normalidad, cerré los ojos y dormí.
Mi cuerpo de repente dejo de sentir calor, abrí los ojos comprobando que Taeyong no estaba, había estado toda la noche abrazado a mi, por lo que el vacío se notó. Debe haber salido hace rato, ya que no hay rastro de el por ningún lado.
Bajé a la cocina, y efectivamente, estaba Taeyong haciendo el desayuno junto con Jeno.
- Buenos días- saludé, acercándome a la mesa donde estaba Jeno- ¿Encontraron el libro que buscaban?- pregunté intentando ser amable.
- Sí, pudimos acabar el trabajo.
Asentí, Taeyong se acercó y comenzamos a desayunar.
- Deberíamos vestirnos ya, llegaremos tarde- mencionó Taeyong cuando acabamos el desayuno.
- Suban ustedes primero, recogeré la cocina- le dije a los dos- Venga- insistí ante la cara de desacuerdo de Taeyong.
- Esta bien.
Los dos fueron a cambiarse y yo recogí como había dicho. Limpié los cuchillos que Taeyong había usado. Mi mente viajó a aquel día en el instituto, observando el cuchillo, recordando la charla con Jaemin y el instante en el que me di la vuelta y el aprovechó para... Si no me hubiera girado, si hubiera mantenido mi mirada en el sin dejar de observarle, si hubiera desobedecido a mis padres y hubiera dejado que se quedara en casa, si le hubiera llevado a otro médico como sugirió la psicóloga, ahora Jaemin estaría conmigo, viendo la televisión o jugando con su móvil antes de ir a clases, o de no ir.
Si tan solo hubiera hecho lo correcto, ahora no estaría en casa de Taeyong, perdiendo su tiempo y molestando. Jeno y Haechan no estarían sufriendo la pérdida de su amigo, Yuta y Taeyong no tendrían que estar al pendiente mío.
Yo no estaría así. No es justo para Jaemin ,¿por qué el no merecía una vida normal? Ir a la universidad... tener pareja... Si tan solo le hubiera escuchado.
¿Si hace un año hubiera estado mas atenta, Johnny estaría vivo? ¿Jaemin seguiría sintiéndose culpable?
-¡Daram!- el grito de Taeyong me sacó de mis pensamientos.
Sentí de repente una punzada de dolor, miré mi mano y vi que estaba apretando fuertemente la hoja del cuchillo que iba a guardar, y mi mano sangraba. Me quedé paralizada, Taeyong rapidamente me quitó de las manos el cuchillo tirándolo al lavabo, y metió mi mano bajo el chorro de agua aclarando el líquido espeso y carmesí.
Se alejó durante un momento y volvió con un jabón neutro, y comenzó a lavar la herida. Después usó una gasa para secar, ardía, pero no quería quejarme- ya había hecho mucho cortándome.
No me había dado cuenta que habían lágrimas en mis ojos, y algunas habían ya bajado por mi mejilla.
Tae desinfectó la herida- una vez seca- con alcohol, y después la envolvió con una venda.
-¿Qué hacías?- preguntó mirándome alterado.
- Perdón... yo... solo estaba...- me sentía culpable por haber montado ese número tan temprano, pero todavía seguía atormentada por lo que había estado pensando mientras mi mano apretaba el objeto punzante.
Las lágrimas bajaban un poco mas rápido, y Taeyong cubrió mi cuerpo con sus brazos.
- Está bien, no pasa nada, ya está- susurró.
- V-voy a vestirme.
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ʜᴀᴢᴍᴇ sᴏɴʀᴇɪ́ʀ
Fiksi Penggemar- Haré que seas la misma de antes. - ¿Como harás eso Lee? - Dímelo tu- se acercó más a mí- ¿Qué debo hacer? - Hazme sonreír. 6 #leehaechan ( 4/06/21) 5 #leehaechan ( 11/06/21) 20 #yuta (25/06/21) 17 #yuta (30/06/21) 92 #leetaeyong (26/08/21) 1 #tyt...