EL DESTINO ES CAPRICHOSO (Bts x Jin) (OMEGAVERSE)

Confusión

Hoseok volvió a mirar el reloj de la pared por milésima vez en el tiempo que había pasado desde que su ahora pareja se había ido. Sonrió al pensar en ese término. "Pareja". Le gustaba cómo sonaba esa palabra. Y más si era a Jin a quien estaba dirigida.

Nunca se había planteado el salir con un beta. Hasta que conoció al mayor, cuando pensaba en sí mismo saliendo con alguien automáticamente le venía la imagen de una omega linda. Le sorprendía lo poco que le importaba a su parte alfa el que Jin no fuera un omega. Su parte racional no lo consideró un problema en ningún momento, sólo algo que no se había planteado antes pero esperaba más recelo de su parte animal. Su repentina docilidad y agrado por el beta le sorprendía para bien. Era bastante común que alfas que no estaban en sintonía con su parte animal tuvieran problemas de conducta y era algo que él no quería experimentar. Sobre todo si Jin podía salir herido por su falta de control.

Suspiró mientras volvía a mirar el reloj. Estaba emocionado. Que Jin aceptara su petición era aún surrealista para él. Nunca creyó que lo aceptara, aún después de lo que había pasado en la habitación antes le costaba creer que el beta realmente estuviera interesado en él. Sintió su cara arder al darse cuenta de lo colado que estaba por el mayor del grupo y se rió solo al darse cuenta de la sonrisa tonta que tenía en la cara al pensar en él.

Su móvil vibró sacándolo de su pequeña ensoñación. Lo cogió pensando que sería Jin diciéndole que se iba a tardar un poco más pero se sorprendió al ver el nombre de Yoongi en la pantalla. Su mejor amigo no solía mandar mensajes a menudo. Solía preferir una llamada rápida si necesitaba algo urgente. Abrió el chat comenzando a preocuparse y leyó el mensaje que no era para nada tranquilizador.

"Necesito ayuda. Ven cuando puedas."

Había una dirección adjunta al mensaje que no conocía. Preocupado le escribió un mensaje a Seokjin avisando que se tenía que ir y salió de la habitación un poco decepcionado por no estar ahí cuando el beta volviera. Pasó al lado de la habitación de Taehyung parándose en frente de la puerta sin saber si llamar y avisar o si mejor dejar que siguieran arreglando las cosas. Todo estaba en silencio. Prefirió dejarlo estar. Jin ya vería el mensaje.

Salió del piso con una mala sensación en el cuerpo. Algo le decía que estaba pasando algo malo. Aumentó la velocidad al empezar a sentir una ansiedad creciente al recordar el mensaje. Llegó al sitio que le mandó Suga en veinte minutos. Se dio cuenta que estaba a diez minutos de la compañía.

Era un lugar bastante viejo. Parecía un edificio abandonado a medio construir ya que sólo tenía forma. No había puertas ni ventanas. Por un momento pensó que estaba en el lugar equivocado hasta que vio a su mejor amigo asomarse y hacerle señas para que le siguiera. Extrañado entró dentro y le siguió hasta el piso de arriba. Según iban acercándose a una de las habitaciones, comenzó a escuchar lo que parecían sollozos.

- Yoongi que está...

- Mira.- El alfa paró antes de llegar a la fuente del llanto.- Ahora necesito que mantengas la cabeza fría y no te sobresaltes.- Dicho esto entró sin esperar respuesta del otro.

Hoseok titubeó antes de seguirlo. Obviamente no podía ignorar esto. Lo que sea que fuera. Entró en la habitación quedándose helado al ver la escena que había dentro.

Una chica, omega por lo que podía percibir de ella, estaba apartada en un rincón de la habitación. Por su ropa y la suciedad en su cuerpo parecía una persona sin hogar. Su rostro estaba lleno de lágrimas y la sangre cubría parte de su cuerpo. La chica no llevaba pantalones y tenía heridas recientes por todas sus piernas.

Hoseok estaba a punto de preguntar que es lo que había pasado cuando siguió la mirada de la chica.

- Dios mío.- Susurró al ver que Yoongi estaba al lado de un hombre. Un hombre con la cabeza abierta. Parecía que alguien le había golpeado con uno de los ladrillos que estaban por todas partes dentro de la construcción. - ¿Está muerto?- Preguntó sintiendo como las fuerzas estaban dejando su cuerpo al empezar a unir los hilos. Yoongi asintió. - ¿Cómo...?- Miró a la chica, tenía las manos llenas de sangre. Sólo entonces vio que a su lado estaba un ladrillo con sangre en él.