This Sh*t Isn't What You've Been Looking For || ATEEZ || pt.I

Broken Home (San)

Narrado por la abuelita...

Cuando mi hijo me presentó a su novia, no podía estar más feliz, Jiyeon era una mujer maravillosa, tan dulce y tierna a la vez que fuerte y de carácter, todo lo que mi esposo y yo siempre quisimos para nuestro único hijo.

Pero el día de su boda algo cambió, ella se veía perdidamente enamorada y me preocupó que su amor por JinWoo la cegara en algún momento, mi esposo me convenció de que estaba exagerando pero esa idea nunca dejó mi cabeza.

Un año después de la boda nació mi rayito de sol, mi Sannie.

Debo en admitir que al principio no me gustaba mucho que fuera tan parecido a su madre, pero ahora lo agradezco, pues JinWoo no merece estar reflejado en un ser tan puro como mi nieto.

Ellos eran una familia perfecta, mi hijo tenía un buen puesto en una  empresa de telecomunicaciones mientras mi nuera decidió que quería encargarse de San y su hogar al menos hasta que mi pequeño empezara la secundaria.

Todo iba tan bien que no sé en qué momento se arruinó.

Un día Jiyeon me llamó llorando pidiéndome que fuera a recoger a San, mi esposo y yo llegamos lo más pronto posible y cuando Entramos, nos encontramos con una escena que nos destrozó.

JinWoo estaba desmayado en la sala debido a todo el alcohol que consumió, el televisor estaba roto en el suelo y habían muchos cristales rotos esparcidos por ahí.

Nos llevamos a San con nosotros pero Jiyeon insistió en quedarse, nunca dije nada pero estoy segura de que el golpe en su mejilla no fue por una caída, como ella dijo.

JinWoo nos juro que todo fue un error y no volvería a pasar, todo parecía volver a la normalidad pero tres meses después otra llamada llegó.

Está vez fue de SunHee, la madre de Yeosang.

Mi esposo y el padre de Sunhee siempre fueron muy buenos amigos, SunHee y JinWoo también lo fueron y finalmente, Yeosang y Sannie siguieron sus pasos.

Ella fue a buscar a Sannie para llevarlo al parque de diversiones pero se sorprendió cuando Jiyeon le dijo que San no podría ir después de que fue la más emocionada por la idea.

Pero esa no fue la razón de la llamada, el moretón en el ojo de Jiyeon lo fue.

Una semana después, cuando pude hablar con ella, me dijo que JinWoo había estado muy estresado por el trabajo y que había sido un poco brusco con ella pero le pidió perdón.

A veces me gustaría haberle insistido más para que dejara a mi hijo, así tal vez las cosas hubieran sido diferentes.

Las cosas siguieron igual, golpes misteriosos, excusas ridículas e intentos de convencerla de dejarlo.

Fue cuando mi pequeño cumplió siete años que todo llegó al límite.

Jiyeon preparó una pequeña reunión para celebrar el cumpleaños de San, los invitados éramos mi esposo y yo, Yeosang y sus madres y algunos compañeros del trabajo de JinWoo con sus hijos.

Todo estuvo bien hasta que Jiyeon empezó a repartir las bebidas, no había alcohol, por supuesto.

Cuando estaba por entregarle una soda a JinWoo, un niño pasó corriendo e hizo que todo el líquido cayera sobre él.

Todos vimos como la golpeó, un fuerte puño en el rostro que la dejo en el suelo.

SunHee y Hannah fueron a ayudarla mientras JinWoo fue sacado de la sala por uno de sus compañeros.

Mi esposo nunca había golpeado a JinWoo, esa fue la primera vez. Él pidió perdón y dió las mismas excusas tontas de siempre pero esa vez  no le creímos, ya no más.