Lo Aprendí de Ti 💔

23. Cita en el acuario.

Al día siguiente ambos se preparaban para su cita, Mew también quería pensar que esto era una cita, ayer había ido a visitar a su padre para hablar sobre asuntos de trabajo, iba a comenzar en la compañía justo después de la boda, pero solo sería por varios años hasta que pudiera ahorrar y montar su propio negocio, quería un matrimonio a largo plazo con Gulf, solo debía tratar de convencerlo.

Llegaron al acuario y Gulf parecía muy emocionado, solo ver su sonrisa lo hacia sentirse feliz de haberlo traído aquí, vieron algunos estanques hasta llegar al área de los pingüinos que fue lo que más emocionó a su esposo, era como traer a un niño por primera vez, su niño era divertido.

- Señor pingüino ¡quack! ¡quack! - Gulf pegó ambas manos y cara a un estanque para ver a los pingüinos que nadaban a través del cristal, se veía adorable.

- ¿Te gustan los pingüinos? - preguntó sonriendo.

- Si, son mis favoritos. - sonrió mientras los llamaba como si fueran mascotas. - me recuerdan a enanitos con esmoquin. -

Cada día Mew descubría cosas nuevas de su esposo, pasaron por un tunel observando peces por todo al rededor, cuando de repente Gulf preguntó;

- ¿Tienes planes para el futuro? -

- ¿Por qué hablas del futuro de repente? - preguntó a cambio.

- Solo tengo curiosidad, llevamos poco más de dos meses y hay cosas de ti que no se. - respondió Gulf.

- Bueno, pienso trabajar para papá por algún tiempo, después quiero montar mi propio negocio. - respondió con sinceridad.

- ¿Que clase de negocio? -

- Siempre he amado la música, así que tendría que ver con eso, talvez venta de equipos de música o productor musical. - aún no había pensado en ello, quizá porque hasta hace poco había olvidado lo que le gustaba.

- ¿Pensé que lo habías dejado? ¿amabas tanto la música? - preguntó curioso Gulf, no lo culpaba, casi nunca hablaba de ello.

- Si, sentía una gran pasión por la música, hasta que se volvió insípida, creo que fue porque no encontraba más pasión en nada de lo que hacía, así que poco a poco lo fui dejando. - jamás había expresado esto en voz alta a nadie.

- ¿Que te hizo volver a ello? -

- Encontré algo más apasionante que todo, me devolvió las ganas de volver a dedicar canciones, a expresar así, lo que no puedo expresar con simples palabras. - explicaba mientras se acercaba lentamente a él, la tenue luz del túnel le daba una atmósfera romántica.

- Que romántico ¿que fue eso? - Gulf sonreía mientras lo abrazaba, quería decirle que el ha sido responsable de cada cambio en su vida, pero lo haría más adelante, tenía una idea de mas o menos cuando sería. Por ahora solo podía demostrárselo.

Se acercó a él y acarició sus labios con el pulgar, para luego inclinar su barbilla y besar suavemente sus labios, seguramente habían niños aquí, pero quería besar a su esposo y no resistía más, un beso suave y se separó.

- ¿Quieres ir a comer? - preguntó.

- Si, tengo hambre. - respondió su esposo.

- ¿Que quieres comer? -

- Pulpo a la parrilla. -

- Shhhh los peces podrían ofenderse. - sonrió Mew.

- Lo siento. - se disculpó Gulf con los peces.

***
UN DIA ANTES DE LA BODA.

Mew era un lio de pensamientos de su cabeza, sabía que tenía sentimientos por Gulf, pero ponerlos en palabras era difícil, al inicio de su relación, había levantado muros tan altos que en el intento de protegerse había lastimado a su esposo en más de una ocasión, ahora buscaba la manera de revindicarse con Gulf.

- Tío ¿Por que tienes esa cara que da miedo? - preguntó su sobrina entrando a la cocina, en casa de sus padres estaba reunida su familia, a un día de la boda aún habían cosas por hacer, debía probarse su traje y su madre envió a su hermano a arrastrarlo hasta aquí.

- ¿Por que asustas a mi hija? - ese era su hermano, tan protector como siempre.

- También es mi sobrina. - le dijo a su hermano. - Porque estaba pensando en algo pequeña y no te vi entrar. - le dijo a la niña.

- Ohhh ¿no vendrá hoy el tío Gulf? Él es divertido. - su sobrina había entablado una amistad con su esposo, aunque para ser justos cuando estaban juntos parecían de la misma edad mental.

- Hoy el tío Gulf se queda en casa de sus padres. - ambas madres habían declarado que era de mala suerte que ambos durmieran juntos un día antes de la boda, pero lo extrañaba terriblemente.

- Y ¿por eso es que tienes esa cara? - preguntó la niña. - ¿Lo extrañas? - agregó su sobrina inteligente.

- Eres muy lista pequeña, pero tu tío siempre pone esa cara, ve a buscar a tu mamá. - Korn intuyó algo y despidió a la niña para poder hablar, Mew también necesitaba hablar.

- Ahora dime ¿que te pasa? - preguntó su hermano cuando la niña se hubo marchado.

- ¿Por qué piensas que me pasa algo? - se defendió.

- Porque conozco a mi hermanito y se que esto no es lo que querías, además se que alguien a aparecido ¿no piensas cometer una locura o si? - su hermano lo conocía mejor que nadie.

- ¿Como sabes de... ? Olvídalo, no me lo dirás. - Mew en serio necesitaba saber como Korn siempre se enteraba de todo. cuando tuvo su relación con Art su hermano fue el primero en enterarse y quien más lo apoyo.

- ¿Me dirás lo que pasa o tendré que sacartelo? - amenazó Korn.

- Esta bien. - aceptó su destino. - Cuando te casaste con Namtam ¿como sabías que era la indicada? -

- Podría decirse que lo supe desde que la conocí. - respondió su hermano después de pensarlo unos segundos, el matrimonio de ellos era envidiable. - Escucha no tenemos un matrimonio perfecto, ambos tenemos nuestro carácter, pero fue su temple el que me hizo darme cuenta que era para mi. -

- ¿Que quieres decir? - Mew sentía tanta curiosidad, hasta el momento nunca los había visto discutir.

- Bueno, frente a los demás ella es dulce como su nombre*, pero cuando discute o estamos en desacuerdo su carácter rivaliza con el mío, ella es capaz de ponerme en mi lugar. - su hermano sonreía mientras hablaba de su esposa, se notaba en la forma en que se expresaba el amor que le tenía y sobre todo el respeto que le guardaba.

- Nunca lo habría adivinado, ustedes parecen la típica familia tradicional, un esposo dedicado y una esposa leal. - afirmó Mew a su hermano.

- Bueno las apariencias son engañosas, ella es capaz de hacerme subir a las paredes, pero la amo, me enamoré de ella desde el momento en que la vi, nada tiene que ver lo que dices con el éxito en un matrimonio. - nunca había hablado antes con su hermano de esta manera.

- Ella tiene suerte de que la ames de esa manera, pero eso no responde a mi pregunta original. -

- El ofortunado soy yo de haberla encontrado y reservado para mi, nada tiene que ver la suerte, tuve que luchar muy duro para conquistarla, ahora para responder a tu pregunta te preguntaré algo y debes ser sincero, sobre todo contigo mismo. - Mew asintió.

- Si dentro de veinte o treinta años tu vida llega a un punto en que no quieres pasar un momento sin esa persona a tu lado, en el que te vez con canas y bastón, con todas tu metas y sueños cumplidos ¿a quien buscarías? ¿quien está a tu lado? ¿El rostro de quien quieres ver al despertar?. Quien aparezca en tu mente, es la respuesta que buscas. - las palabras de su hermano le dieron una perspectiva diferente a los que estaba sintiendo en este momento.

Mew estaba listo para dar el paso mas importante de su vida. Mañana sería un día para festejar el inicio de su vida, porque acababa de descubrir que antes de Gulf no había nada.

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*Nota: Namtam significa azúcar. ☺☺
Estoy tan feliz de ver como viven la historia, gracias por el apoyo.