XLIII

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Leah Fleming

-Míralos- susurro mientras los señalaba

Julián y Alison estaban bailando un poco más alejados de nosotros.

-Crees que puedan ser pareja- lo mire curiosa

-Posiblemente si, mi hermana cuando quiere algo hace lo que sea por obtenerlo- los mire y en definitiva hacían una linda pareja

-Estas hermosa- sentí mis mejillas sonrojarse

-Gracias-

-Mañana en la noche vendrá mi madre, Alison y Julián a cenar- lo mire sorprendida

-Julián no me dijo nada- me queje riendo

-Quería ser yo quien te diera la noticia, pero por la mañana estaremos solo ya que Esmeralda se fue hoy con su familia y regresa para la cena- asentí escuchándolo

-Si te incomodo que estemos solos en la casa me lo dices que me quedo en un hotel- negué riendo

-Tranquilo, como quiero cada cual tiene su habitación- susurré

-Lamento interrumpirlos- gire y me encontré con una chica hermosa

-Soy Valentina- nos ofreció su mano la cual los dos tomamos como saludo

-Soy Leah Fleming- me presente

-Leandro Salvatore- tomo su mano

-¿Podemos hablar de negocios? - asentí para seguirla

Leandro me guiaba entre la gente.

Fuimos hasta una esquina del salón mucho más tranquila.

-No pensé verlos aquí- nos ofreció una bebida de uno de los mozos que pasaba

Si soy sincera no sé quién era.

-Disculpa mi falta de conocimiento, pero ¿quien eres?- Leandro me miró sorprendido

-Lo siento, soy Valentina Jiménez dueña de uno de los centros comerciales más importante de la ciudad- sonreí

Comenzamos a hablar de negocios.

-Creo que lo podemos discutir de forma más oficial en mi oficina- sonreí

-Llamaré a tu secretaria entonces para establecer una reunión- asentí

Habíamos hablando por horas.

Leandro me había dejado con ella.

-Gracias por escucharme- asentí

-Nos veremos después- me despedí para buscar a Leandro

La música de la fiesta estaba muy buena.

Tenían una mezcla de canciones navideñas lentas y algunas activas.

-¿Bailamos? - salte del susto

-Tonto- lo golpee virándole un poco de su trago

-Lo siento- me disculpe mientras sacudía su saco

-Olvídalo- se rio, pero me sentía mal por virar el trago

-Ven- tomó mi mano y volvimos a la pista de baile

La canción era lenta y por la muchedumbre nos pegamos bastante.

-Llevaba tiempo sin verte sonreí tan natural- lo mire preocupada

-Se que siempre que sonreías anteriormente no era tan sincera como la de hoy- asentí

-Poco a poco iré mejorando, no sea la Leah de antes, pero seré mucho mejor que la anterior- pase mis manos por su cuello

Maldito error, Hermoso errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora