XIV

13.2K 734 31
                                    

Leandro Salvatore

En toda la reunión Leah no decía nada.

Esta mañana verla dormir a mi lado fue demasiado hermoso.

Ella era preciosa en todo aspecto.

-Entonces solo me gustaría que comencemos a trabajar en un sistema para mis autos- resumí luego de hablar demasiado

-No veo manera de negarme al contrato- respondió esta vez su socio

- ¿Tu? – levante mi ceja ya que nunca se presento

-Julián González, socio de Leah y mejora amigo- sonrió

Tremendo balde de agua.

Así que con él se había quedado la pasada vez.

-Leandro Salvatore su esposo- la señale mientras lo miraba a él

-Créeme que lo se- se rio, pero para mi no hacía gracia

-Hermosa- la llame logrando que ella me mirara

-Creo que podemos hacerlo- evito mi mirada

-Entonces firma- ella abrió el documento y lo firmo para luego pasarme el documento

-Gusto con hacer tratos con ustedes- sonreí

-Los dejo para que hablen- Julián tomo el contrato y salió casi corriendo mientras Allison lo seguía

-No sabía que me reuniría contigo hoy- volverla a escuchar aceleraba todo de mi

-Hay cosas que no sabes de mi pequeña- me coloque de pie para ir a su lado

- ¿Por qué te enojaste en el auto? – hice que se colocara de pie mientras la acercaba a mi

Logre recostarme en la mesa mientras la colocaba en el medio de mis piernas.

-Por nada- pase mis manos por su cintura

-Vestida así te ves hermosa- la mire detenidamente

-Tu no te quedas atrás- sentí su mano sobre mi saco

-Así que andas de puta- la matare por interrumpirnos

-Christine creo que te deje claro que no eres bienvenida en mi empresa- le hablo mientras yo no lograba verla ya que estaba de espalda

-Primero, una vez más que me insultes y que te quedas sin dientes- me sorprendí de su amenaza

-Deja que llamo a Leandro para contarle esto- sonreí por lo mensa que era

Apreté su cintura para que me mirara mientras le hacia señal de que no dijera nada.

Mi celular comenzó a vibrar y lo atendí.

-Leandro a que no sabes me encontré a tu esposa besándose con otro tipo en su empresa. Es más, estaba sin ropa- tenía demasiadas ganas de reír, pero su comentario hizo que me hierva la sangre.

-Por esposa tienes una puta- en segundo me gire para que s u teléfono se cayera

-Que sea la última vez que hablas así de mi esposa Smith. No te permito que la insultes y desde ahora quiero que sepas que te quiero lejos de nosotros- la señale cabreado

-Pero date cuenta es una puta- repitió y uno de mis puños se estrello contra la mesa creando un sonido fuerte

- ¡No te permito que hables así de mi esposa! - la señale caminando hacía ella

-Leonardo- me tomo de mi mano para evitar que me acercara a Christine

-Te quiero lejos de mi vida, ahora caigo en cuenta que nunca debí dejar que te metieras tanto en mi vida- la señale

Maldito error, Hermoso errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora