-Eres muy tierno para ser un homicida-en mi rostro aparece un sonrisa de burla. -Y tu eres muy inocente para ser una suicida-dice mientras corta espacio entre los dos. -Tu opinión me vale mierda-escupo en su rostro y empiezo alejarme de ahí. -A demás eres grosera-escucho como se ríe a carcajadas y lo único que hago es sacarle el dedo.