El amor es para valientes.

Capítulo 20

Natalia se despertó decidida a dejarse llevar con Alba. Una cosa era ir despacio, conociéndose bien y disfrutando cada momento; y otra muy distinta era que saliese corriendo cada vez que la cosa se ponía un poco intensa.

A fin de cuentas, tampoco es que la rubia le hubiera dado ningún motivo para desconfiar y no podía basar su relación con ella en la que había tenido con Alexa. Le había marcado bastante, sí, pero debía utilizar las marcas para aprender y no para pensar que podían volver a hacerle sufrir de aquella forma.

Pensó, tras valorar todo lo que le había dicho la rubia y todo lo que había pensado ella misma, que quizá la rubia era la persona indicada para cuidar su corazoncito.

Pues a lo mejor es buena idea invitar a la rubia a una cenita.

Pues mira, va a ser que apruebo la moción.

Nat
Ruuuuubiaa

Rubia ❤️
Hola Nat!
Te iba a escribir justo ahora

Nat
Qué compenetración
Es que había pensado que esta noche podríamos hacer algo
Si te apetece

Rubia ❤️
Me encantaría Nat
Qué habías pensado?

Nat
Pues había pensado en que podríamos ir a cenar
Pero a algún sitio bien

Rubia ❤️
Venga vale
Dónde?

Nat
Es secreto
Tu ponte guapa
Bueno más
Bueno... Inténtalo, aunque será difícil
Te recojo a las 8

Rubia ❤️
Miedo me das, sinceramente

No sabía todavía dónde iba a llevarla, pero tenía claro que tenía que ser de los mejores sitios que podría encontrar, por lo que empezó a buscar en ese mismo instante, casi olvidándose de comer. Todo tenía que ser perfecto, porque su rubia no merecía menos.

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Tras estudiar durante la mayor parte de la mañana y haber cocinado el resto, se sentó al sofá esperando a que Julia le confirmara en plan para el día siguiente. Habían decidido irse todas de senderismo, aunque sin invitar a las parejas ya que les apetecía pasar un día de descanso grupal. Desde que Julia había empezado con Sabela, las veces que se reunían era con su grupo de amigas y, ahora que Alba estaba con Natalia, la cosa se complicaba todavía más.

Estuvo pensando que, ya que podrían verse solo un día aquel finde, por qué no aprovechar para verse ese día. Se ve que Natalia le había leído el pensamiento porque, justo al desbloquear el teléfono, recibió un mensaje suyo proponiéndole quedar aquella noche, aunque con mucho misterio.

Tras acordar con Natalia cuándo pasaría a por ella, se fue a ducharse y a preparar lo que se iba a poner para quedar con ella.

Que me ponga guapa, bueno más.

Con eso creo que ha querido decir que eres guapa, pero más.

O que soy fea y que lo tengo que arreglar.

Por favor, mírate, tremenda diosa.

A Alba le quedaba bastante tiempo de sobra antes de que Natalia llegara, pero eso no le hacía tomárselo con calma. Era como si fuera a llegar en cinco minutos, cuando en realidad todavía quedaba una hora.

Se arregló como si hubiera sido invitada a la boda de algún influencer importante. Se puso su vestido negro con brillos y se maquilló a la perfección.