Típica vida de una faery-Fanfic Eldarya-Editando

Compeler

Compeler: obligar a alguien, con fuerza o por autoridad, a que haga algo que no quiere.

Estaría más pálida que un fantasma y él me miraba con los ojos como platos. Reaccioné rápido a los dos guardianes que se acercaban por el pasillo y le metí en su habitación tapándole la boca con la mano. <<De todos tenías que encontrarme tú>> Me reprendí internamente por mi mala suerte y supliqué por que no me delatara

-Mira sé que en estos momentos me odias, estás en tu derecho te he jodido tu vida aquí en el cuartel, pero por favor no me delates- le pedí sin dejarle hablar todavía y con la respiración errática- Ni te imaginas cuanto lamento todo lo que te he hecho pero vengo a intentar solucionar las cosas de verdad, por favor confía en mí.

-¿Cómo se te ocurre volver aquí acaso estás loca?- me recriminó asesinándome con la mirada

-Una vez que lo arregle me iré, no me verás más y podrás seguir odiándome pero por favor-me interrumpió negando y miró al techo pegándose aun más a la pared y arrastrándome con él

-No te odio pero eres realmente estúpida al venir ¡Es un suicidio!

Me alejé apoyándome en la otra pared del pasillito de entrada y terminé deslizándome agotada hasta el suelo-¡Ya lo sé! Pero Leiftan me ha contado que Miiko está haciendo llamar a todos los guardianes y va a hacer una cacería con mi especie...¿Y qué va a pasar con todos a los que defendían la Guardia de Eel Nevra? ¿Vas a dejarles desprotegidos y al merced de cualquiera que les vea como un estorbo?

-¿Cómo puedo ayudarte?

Sopesé mis opciones por un momento en silencio y fue cuando caí en la mejor opción para conseguir algo- Necesito hablar a solas con Miiko... puede que al final si vayas a delatarme

Bajé a las celdas mientras el vampiro iba a buscar a Miiko <<Por favor necesito que me escuches zorra orgullosa>>Pensé mientras daba vueltas cada vez más inquieta en esa penumbra tan sofocante

-¿Dónde está ese monstruo?-escuché cómo decía una voz exigente mientras bajaba las escaleras. Cuando me vio se giró a buscar al vampiro seguramente pero no lo encontró- ¿Qué te crees que haces aquí?- Sus ojos fríos como el hielo me traspasaron como dagas mientras me apuntaba con su báculo

-Quiero arreglarlo todo Miiko- confesé apacible, cualquier mal movimiento era jugarme demasiado el pellejo- De verdad no tengo otras intenciones

Se abalanzó contra mí de improvisto y solo alcancé a tirarme al suelo y rodar para esquivarla. Intentó atizarme con su bastón y le pegué una patada como pude a su mano haciendo que éste volase hasta perderse en el agua de la mazmorra.

Increíblemente más furiosa se volvió a abalanzar, intenté incorporarme pero me cogió de todos modos. Terminamos forcejeando en el suelo, dándonos golpes sin contemplación, al fin y al cabo éramos enemigas y mi vida estaba en juego

En esos agoniosos minutos me llené de pequeños cortes en la espalda y brazos por culpa de las piedrecitas del suelo y escocían en contacto con la camiseta pero no era el momento de centrarme en ese inconveniente. Rodamos hasta acabar dentro de una celda y esa era mi única oportunidad contra Miiko. Le di un cabezazo y me la quité de encima, corriendo cerré la puerta y le dejé encerrada allí

-Miiko por favor escúchame

-¡Voy a matarte asquerosa traidora!-exclamó para después escupir en el suelo a mis pies

- Bueno pero por ahora lo único que puedes haces es ver que estabas equivocada- Se me escapó  una sonrisa burlona que sin duda vio pero no le di mas importancia que la que tenía.

Sabía que tenía todo el tiempo del mundo para contarte lo que me había pasado desde que llegué a Eldarya así que eso he hecho Miiko como ves no todos son malos