Tarúpido

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Tarúpido: persona de ideas absurdas y no muy lista

Realmente estaba agotada y llena de polvo del camino, al menos Nevra me daba sombra casi todo el rato cosa que ayudaba con la fatiga. Me hizo comer mientras montábamos al igual que ir bebiendo regularmente para que no me marease. El sol se iba ocultando entre las montañas y pude ver un pueblo a lo lejos por encima del hombro de mi jefe-Mataría por una buena cama-murmuré y se rió, frenó en el cruce del camino y la entrada al pueblo y para mi sorpresa y desgracia no entramos a él-Nevra ya aprendí a no meterme contigo no hagas esto-me miró por encima del hombro con una sonrisa cansada y negó suavemente

-No nos lo podemos permitir, necesitamos todo el dinero posible para pagar la posta en la misión...-pegué mi frente a su hombro con un suspiro y nos empezamos a acercar a la linde del bosque-Acamparemos aquí-habíamos entrado unos metros al bosque y Nev volvió a parar la montura y se bajó, luego agarró mi cintura y me bajó a mí. Mis piernas ardían del esfuerzo del día-Busca un poco de leña, las noches son frías encenderé fuego- rebuscó en su mochila en la alforja y empecé a caminar a trompicones fijándome en el suelo para recoger lo que me sirviese. Minutos después tenía lo suficiente según mi punto de vista

Nevra en nada consiguió hacer una pequeña fogata y se sentó apoyándose en un árbol, yo me puse a su lado y apoyé mi cabeza en su hombro, levantó el brazo y me rodeó haciendo que quedase en su pecho, el fuego alumbraba su cara con muchas sombras y tonos anaranjados, los ojos grises sobresaltaban por su apariencia cansada junto a las ojeras

-Duerme, yo vigilaré-negué disconforme y suspiró

-Estás incluso más cansado que yo-rebatí decidida- tú también tienes que dormir

-En un rato te despertaré para que vigiles tú-accedió y se volvió a acomodar contra el árbol. Suspiré y me levanté como pude, con un pié moví su pierna delicadamente y me senté pegando mi espalda a su pecho

-Ahora si estoy cómoda-finalicé con una sonrisita y Nev me abrazó

Había dormido tranquilamente hasta que noté los brazos del vampiro tensarse, instintivamente me giré ocultando mi mano que bajaba para agarrar la daga-¿Un vampiro y una humana?-varias voces rieron y mi jefe me apretó un poco más contra él

-¿Qué queréis?-respondió tenso, notaba su corazón acelerado y eso no era buena señal

-Mira Mat como protege a la niña ¿Es tu novia vampirito?-se escuchaban las pisadas a unos metros de nosotros

-Gillter déjales

-Mason no seas aburrido, además cumplimos órdenes del jefe

-¿Mason?-disimuladamente observé cómo cambiaba la expresión de Nevra, ellos se conocían

-Dejémonos de tonterías, dame a la chica-una mano tiró con fuerza de mi brazo, salté como un muelle y le corté con la daga dónde alcancé, le hice un tajo en toda la mejilla-¡Eres una zorra!-levantó la mano para pegarme un guantazo pero Nev la paró a tiempo y pude pegarle el filo a la garganta

-Gill te avisé-el que supuse era Mat se fue corriendo y Mason tras una última mirada a Nevra y a mí igual

-Sólo eres una perra-Mi jefe le agarró en un rápido movimiento el brazo y lo inmovilizó en el suelo, el hombre empezó a gritar que le iba a sacar el hombro pero Nevra apretó su agarre.

Me llené de valentía aunque me atemorizase haber tenido una idéa así y me dirigí a nuestra montura, mientras el vampiro forcejeaba con el hombre rebusqué en mi mochila hasta que encontré la otra arma que llevaba y puse la hoja sobre el fuego. No estaba segura de lo que iba a hacer pero no pensaba quedarme con el miedo de la duda

-¿Quién te manda?-pregunté aún agachada frente al fuego, pero no respondió, solo gritó del dolor cuando volvió a tirar de su brazo Nevra. Levanté el puñal de la hoguera y ya estaba roja gran parte de la hoja. Suspiré y me acerqué a ellos con el cuchillo incandescente entre manos.
Dubitativa me aproximé a los dos hombres, evité la pesada mirada de mi jefe, sabía que me arrepentiría de mi idea.

Típica vida de una faery-Fanfic Eldarya-EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora