Protegida por Nick © |COMPLETA|

《 51》

Only Want You - Rita Ora

— CAPÍTULO 51 —

     —¿Qué? —Dijo en un hilo de voz.

     Vanessa pudo jurar que por un momento que su corazón había dejado latir. Estaba confundida y un poco perdida. Quizás escuchó mal.

     —Nicholas se ha ido.

     O quizás no quiso haber escuchado algo como eso.

     Brandon la miraba preocupado. Sabía que era una noticia un poco difícil de digerir, sabía lo desorientada que se encontraba, tratando de hallar una respuesta en su cabeza que justificara la partida de Nick.

     —No puede ser, Brandon —comenzó a sacudir la cabeza —. Me lo hubiera dicho, lo hubiera hablado conmigo, ¿por qué?

     Él se encogió de hombros y Vanessa comenzó a pasearse por la sala de estar de su nuevo apartamento. ¿Cómo que se había ido?, ¿por qué?, ¿por qué no se lo dijo? Ella lo hubiera entendido. Poco a poco comenzaba a sentir el abandono, y al mismo tiempo se consolaba con la idea de que tuvo que haber tenido una buena razón para irse. Pero ¿a dónde?

     —¿En dónde está? —Se giró hacia Brandon, con el ceño fruncido. Nicholas se fue aun cuando estaba de luto, ¿cómo podía haber hecho eso? ¿Por cuánto tiempo? Eran tantas las preguntas que se acumulaban en su cabeza, amenazando por hacerla perder el control, la cordura, el raciocinio —. ¿Hace cuánto tiempo se fue? ¿Por qué? —Al darse cuenta de que estaba subiendo la voz decidió interrumpirse. No era justo hablarle de esa forma a Brandon, no cuando él también estaba pasando por un momento difícil —. Lo lamento, yo... Esto...

     —Descuida —le mostró una sonrisa tranquilizadora y se apresuró a sentarse en el taburete que estaba en la barra que dividía la cocina de la sala. Vanessa estaba amueblándolo poco a poco, con ayuda de una buena decoradora. Faltaba el sofá, una mesa de centro y también algunas que otras decoraciones juveniles —. Sé que es injusto para ti enterarte de esta forma, Vanessa. Lo único que puedo decirte es que regresó a hacer el servicio militar.

     De pronto Vanessa recordó todo lo que Nicholas tuvo que pasar en esos lugares. El terror, el pánico la conquistaron. ¿Cómo pudo haberse ido sin despedirse? ¿Y si no lo volvía a ver?

     —Al parecer no soy tan importante para tu hijo como yo creí —su tono fue bajo, con ese atisbo de decepción, desilusión y tristeza. No iba a mentirse, si se fue sin decírselo fue porque creyó que no hacía falta.

     —De alguna manera piensa que haciendo... —Brandon hizo un ademan con la mano —... esto, tratará de protegerte.

     Ella rio con ironía. No entendía nada, fue una decisión tan precipitada y en la que ella no tuvo lugar. Y de nuevo, esa inseguridad de no haber sido suficiente para él, la embargó.

     —¿Protegerme? —Y justo en ese momento, cualquier tipo de sensación triste, se había esfumado, siendo reemplazado por la indignación. Es que, si Nick estuviera en frente de ella, le daría un buen puñetazo en el abdomen, quitándole el aliento. ¿Cómo se atrevía? Era absurdo —. ¿Cómo se supone que va a protegerme cuando no está? Es ridículo. ¿Hace cuánto se fue?

     —Tomó su vuelo ayer, en la madrugada. Dijo que trataría de hacer lo posible para regresar cuanto antes.

     Regresar. Estaba consciente del riesgo que Nicholas tomaba al regresar a la milicia, al volver a ese lugar en el que una vez casi pierde la vida. ¿Y si la perdía esta vez? Ni siquiera él le había dado la oportunidad de despedirse, de abrazarlo, de pedirle que volviera. Se sentía abandonada.