Protegida por Nick © |COMPLETA|

《 23 》

― CAPÍTULO 23 ―

     El arma RPG impactó en el helicóptero en el que Nicholas se transportaba con sus soldados y su mejor amigo Cole, alarmándolo y asustándolo en sobremanera. La hélice del helicóptero se vio muy afectada, rota, y fue por eso que la aeronave no tardó en descender peligrosamente, provocando que los pilotos se vieran heridos de gravedad al igual que los soldados que se encontraban en medio de una misión.

     El cuerpo de Nick estaba adolorido, sintió un poco de ardor en su espalda, sabiéndose herido. El polvo entraba por sus ojos y aunque le molestara debía mantenerlos bien abiertos. Los habían atacado.

     Miró a su alrededor y se dio cuenta de que los demás no tardarían en perder su vida. Había sido un accidente fatal. De su costado emanaba sangre, mucha. Se hallaba tan desorientado que no sabía qué hacer primero, no sin antes estudiar la situación, cosa que se le dificultaba, pues la arena le impedía ver con claridad el panorama.

     El humo le llegó hasta las fosas nasales, y se dio cuenta de que nada andaba bien, y aunque buscara la respuesta de sus acompañantes, ninguno se las daba.

     Oyó toser a alguien desde donde estaba y giró el rostro para encontrarse con su mejor amigo al borde la muerte. Bajó sus ojos hasta la pierna fracturada y sintió su corazón acelerarse.

     ―Cole, vas a estar bien, estaremos bien ―habló Nick tratando de convencerse más a sí mismo de lo que podría llegar a convencer a Cole. Su mejor amigo tenía una herida grave en el cuello y respiraba con dificultad.

     Dios, ¿qué iba a hacer?, ¿cómo los sacaría de ahí?

     Debía salir y registrar el entorno, ver qué habrá causado ese accidente.

     Pero apenas podía moverse, su rostro estaba magullado por el impacto, por los golpes. Creyó que el área estaba segura y como ya faltaba poco para aterrizar, decidió ponerse de pie. Grave error.

     ―¿Cómo te encuentras? ―se dirigió a su amigo, el cual estaba pálido. Este negó con la cabeza haciéndole ver a su comandante que nada estaba bien con él, que era cuestión de segundos para que dejara el mundo ―. Vas a estar bien, te vas a recuperar.

     El sonido de una chispa llamó la atención de Nicholas, provocándole sentir inquietud, preocupación y haciendo que la desesperación creciera gradualmente. ¿Qué mierda había pasado?

     Por eso, tomó su ametralladora aún sintiendo ese dolor punzante en todo su cuerpo, debía tener alguna costilla rota o el hombro dislocado, porque cada vez que hacía un pequeño movimiento no podía evitar gruñir.

     Con mucha dificultad se pudo poner sobre sus rodillas, sintiendo cómo se le nublaba la vista de estrellas debido al esfuerzo. Estaba perdiendo sangre, fuerza. Sintió también el ambiente acalorado, y era por el fuego que estaba expandiéndose de alguna parte de la aeronave.

     ―No te vayas ―logró decir Cole al ver a su amigo más cercano dirigirse a la salida ―. No quiero morir aquí. No quiero morir solo.

     No hubo cosa que entristeciera más a Nick que el escuchar la voz pausada y quebrada de Cole. De su boca salía sangre y estaba más pálido que nunca. Regresó sus ojos a la pierna averiada y de los nervios quiso vomitar. Nunca se había encontrado en una situación similar, en la que viera a sus compañeros y soldados morir en un trágico accidente.