Capítulo 52

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*______'s POV*

Vale... No... No podía... Reaccionar de... Lo que estaba... Ahí. Justo delante mio... Dios... ¿Pero como David... tiene este tipo de... “cosas”?

Mi prima, prácticamente, se quedó igualque yo. Porque... A ver... No es medio de normal encontrarse este tipo de cosas en el escritorio de alguien... Y menos viniendo de David...

Esther: Vale... ¿Que hacemos?

Yo: Pues... Sinceramente... No quiero que me recuerdes lo que voy a hacer ahora por el resto de mi vida... -Dije cogiendo una cosa de esas de entre todas las que había allí. La abrí, y me quedé mirandola- Pero quiero que sepas que ni yo misma se por que lo hago -Cogí y me heche un poco de ese... “liquido” en el brazo. Me quedé mirándolo y lo chupé. Al principio no sentía nada. Fue como si no me afectara... Mi prima me miraba con los ojos muy abiertos y partiéndose el culo, con la mano puesta en su boca, para que no nos oyeran y nos pillaran con esto. Pero entonces sucedió. Empezó a picarme la lengua a montones. Parecía que me había tomado miles y miles de jalapeños. Cuando solo había tomado un poco de eso...

Y pensaréis: ¿Que mierda es lo que ha probado? ¿Que cojones había en los cajones?

Bien. Os lo responderé.

El cajón estaba lleno de lubricante de esos de durex play. Y puedo jurar que David tenia en ese cajón, de todos los sabores y dos o tres veces el bote repetido. SEGURO. También habían condondes, mas lubricante, condones de colores... Mas lubricante... Y... Oh dios mio... Que no sea lo que estoy pensando...

Esther: ¡UN PENE DE PLASTICO!

Si... Era lo que pensaba... Joder David... ¿Que mierda hace todo esto aquí?

Mi prima y yo no parábamos de reírnos. Joder... Es que estaba que no cabía en mi misma... Aver, que es normal... Es que no me lo esperaba... Alguna caja de condones si. Pero no un cajón lleno de lubricante de tos los sabores, un pene de plástico (Que por cierto, era rojo...) y no una ni dos cajas de condones, si no... Una, dos, tres, cuatro... Cinco... Seis... Sie... te... O... Cho... Vaaleee... Ocho cajas de condones. De los normales. No voy a empezar a contar las de colores... Soy demasiado joven para llevarme un trauma de este tipo...

Creo que nos reímos taaaanto, que nos escucharon los demás, los vecinos, y creo que hasta los de china. Estábamos tiradas en la cama de David, con el pene en la mano, y con el lubricante en otra. Simplemente lo mirábamos y nos meabamos de la risa. Hasta que algo, mas bien alguien, abrió la puerta de la habitación de David.

Álvaro: ¿Que os pa...?

Álvaro entró en la habitación, y al vernos con el lubricante en una mano, y con el pene de plástico en la otra, se calló de golpe.

Yo: ¿Tu sabias algo de esto? -Pregunté como pude, ya que seguía sin poder parar de reirme-

Álvaro: Emm... Mas o menos...

Mi prima y yo nos miramos serias, y al momento empezamos a reírnos como cabras locas. No sabíamos porque nos reíamos tanto, ya que teníamos medio asumido que David coleccionaba lubricante.

Simplemente, nos reíamos.

Fijaros si nos reímos tanto, que todos los demás subieron para ver que nos pasaba. Al entrar en la habitación de David, se encontraron con la cara de no comprender nada de Álvaro, a mi prima y a mi con un lubricante en una mano y un pene de plástico rojo en la otra, mientras nos meabamos de la risa encima de la cama de David. Y, el cajón de los lubricantes de David abierto, claro está, como lo dejamos antes.

Damian, Carlos, Noelia, Sofía y Dani, nos miraron con la boca muy abierta. Que era normal. Pero lo que hicieron después, NO era normal...

Todos ellos se fueron a coger un bote de lubricante. Cada uno cogía un sabor diferente, se restregaba un poco en el brazo o en la mano, y empezaban a chuparlo.

Still (Blas Cantó y Alvaro Gango)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora