Entonces la lluvia llegó a mis mejillas y, aunque el sol brillaba y nadie la veía caer, yo no podía sentir más que las gotas nublando mi vista. Entonces recordé las promesas que crees cumplir y acepté tu ausencia aunque sigues junto a mí.
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Textos del alma
RandomAntes de empezar a leer esto advierto: "Textos del alma" no es una historia, no tiene un final por lo que cada capítulo puede ser el último. Son solo textos aislados, sentimientos de tinta, tormentas y navíos encallados que encierra mi corazón. Ante...
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Entonces la lluvia llegó a mis mejillas y, aunque el sol brillaba y nadie la veía caer, yo no podía sentir más que las gotas nublando mi vista. Entonces recordé las promesas que crees cumplir y acepté tu ausencia aunque sigues junto a mí.