Arcoíris «FRERARD»

27. Padres

—Frankie...– me estaba desesperado y no quería tratar mal a Frank, entonces traté se calmarme un poco– Por favor, dímelo, tus padres tienen algo que ver con todo esto.

—Y-yo no sé nada, ¡Encerio!– y entonces, por primera vez pude ver como una neblina de color rosa en este caso, comenzaba a aparecer del lado de Frank.

—¿Y no puedes recordar?– Frank tenía miedo, pero yo también estaba aterrado.

—¿Cómo puedo recordar algo que yo no sé?– entonces aquel aura rosa ahora era una roja.

—Lo siento, ¡Es que yo no quiero estar aquí una semana!

—Ni yo, pero no podemos hacer nada.

Ambos nos quedamos en silencio, ¿Cómo le dices a tu ahora novio que sus padres además de asesinos aún de muertos le arruina la vida?

Después de casi dos horas de pensar en cómo iniciar un tema de conversación, tenía planeado decirle todo, si bien no era un buen momento, tenía que hacerlo. Sentía necesidad de hacerlo, era como si un pequeño bicho estuviese comiéndose mi alma.

—Frankie– dije en voz baja.

—¿Si?– se escuchó del otro lado, ah, por cierto, estábamos en un lugar oscuro, el único lugar que nos daba un pedacito de luz era por debajo la puerta.

—¿Pu-puedo decirte cómo conozco a tus papás?– dije algo nervioso.

—Bueno...

—Yo...– me tomé un rato para respirar y pensarlo bien, entonces seguí– Hace dos años, mi madre murió, no sabíamos como pasó y mi padre se comenzó a desesperar, mi hermanito estaba triste y yo también, ella nos comprendía muy bien. Después de unos meses mi padre trajo a Mikey a este lugar, yo me sentía solo y traté de investigar sobre que pasó con mi madre.

—¿Y qué pasó? ¿Qué tienen que ver mis padres en esto?

—Pues... En la temporada de vacaciones yo me volví... Algo así como un detective. Estuve semanas tratando de encontrar una respuesta, hasta que revisé los papeles de mi mamá. Ella era una oficial de policía.

—¿Y qué eran esos papeles?

—Tenía varias fotos de tus padres y otros señores, no entendía por qué, creí que eran delincuentes y lo dejé, pero en eso cayeron unos papeles, unas notas.

—¿Qué decía en esas notas?– su voz sonaba más animada y desesperada.

—Decía algo como... "Cheech Iero y Linda Pricolo de Iero, han sido encontrados en una granja, al parecer están ocultando su identidad de nuevo" No entendí nada hasta que detrás de esta había otra nota, esa tenía manchas de sangre y decía... No recuerdo bien pero decía "Donna, no te salvaras de esta, sabemos que estás detrás de nosotros y nos la pagarás con sangre, con tú sangre"

—¿Entonces...?

—Supuse que tus padres mataron a mi madre, o quizá solo tu padre, pero no dije nada, no crecerían eso y lo dejé, me sentí mal, y comencé a deprimirme más.

—¡Ahora lo entiendo!– escuché como Frank se levantaba del frío suelo sus zapatos se rasparon contra este.

—¿Entender qué, Frankie?

—¡Ya sé porque nos íbamos a California! ¡Ya sé porque vinieron a este lugar!

—¿De qué hablas?

—Entonces... Ellos sabían que  me quedaría solo, ellos... ¡Ellos aún viven!